Capitulo 31. Casualidades

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La hora de receso llegó. Erick y yo salimos del salón  aún manteniendo nuestra postura.

—¡Waaa! ¡muero de hambre! ¿Que tú no?—Erick se llevó las manos a su estómago.

—La verdad no—Suspiré —Todo esto me puso muy tensa.

—¿Y?

—¿Como que "Y"?

—¿Y por eso dejarás de comer?—El se puso delante de mi haciéndome detener el paso—Ay vamos, una manzana no te caerá mal.

Erick parecía insistir pues comenzó hacer su carita y juntar sus manos como si de rogarme se tratara, pero antes de negarme nuevamente, su brazo entrelazo con el mío y volvió a tomar su paso mientras cantaba en voz alta "Out of my League " de Fitz and the trantrumps.

—¡If i die, don't wake me!, 'Cause you are most than just a drime —entonó en voz alta mientras ambos seguíamos caminando. Yo no podía esconder la cara de tomate que llevaba pues al pasar todos nos voltearon a ver.

Erick me miró y me hizo una señal que me tocaba cantar. Me negué por completo moviendo la cabeza de un lado para otro en un rotundo no, pero luego que mi amigo me diera un pequeño pellizco no pude evitar seguir con la línea de la canción.

—From time to time I pich myself —Dije en voz baja—Because i think my girl mistakes for somebody else.

Seguí cantando en voz baja y con la cabeza agacha.
Erick se dio cuenta de eso y continuó con la canción en voz alta. Poco a poco su ánimo me contagiaba y cuando estaba cerca de terminar de cantarla, entone con todas mis fuerzas y moviendo mi cabeza a ritmo continué yo.

—¡All the things I believed, Yeah, you were most than just a drime!—La vibración positiva de Erick me había contagiado tanto que movía mis manos como si de verdad tuviese un micrófono, dándome igual las miradas y algunas risas de los demás.
Erick era mi mejor amigo, y si pudiera bajarle las Estrellas lo haría.

Pero estaba tan distraída que accidentalmente choque con la espalda de un profesor.
Fue un fuerte golpe, pues mientras miraba hacia en dirección contraria, alguien estaba caminando hacia atrás.

—¡A-agh..!—Me lleve mi mano a la cara y mire de reojo que era la espalda de un maestro —¡Yo..Lo-Lo siento!—Dije sintiendo un enorme pánico.

El maestro giró un poco el cuello y me percaté que era Cauich.

Mi corazón se detuvo en ese instante y él abrió sus ojos tan grandes que no puedo dudar que él también se había sorprendido.

Se giró por completo.

—Morgan...—Sus manos parecían acercarse a mi, pero antes que pudiera tocarme me aparte.

—¡Lo siento Maestro!—Mi voz era firme pero no podía mirarlo, mis ojos permanecían abajo—No volverá a pasar..

Mire a Erick quien estaba observando toda la escena con lujo de detalle y lo tomé de la mano para correr lo más rápido.

Escuché que por detrás de mi Cauich volvía a decir mi nombre pero no me detuve y Erick y yo corrimos hasta llegar a una banca de la jardinera, lugar donde casi nadie solía venir. Me senté en ella y comencé a respirar profundo pues al correr me había sofocado.

—Perdón..—Erick estaba asustado.

—¡No! ¡No!, Yo no me di cuenta que él estaba ahí —Dije tomándolo de las manos para tratar de tranquilizarlo.

Ambos permanecimos en silencio.
Había sido un momento muy extraño para mi, Realmente no esperaba que el de la nada se apareciera en ese momento y chocáramos.
Trague saliva y me lleve las manos a la cara sintiendo una pequeña frustración ,pues al verlo tuve la necesidad y ganas de abrazarlo. Lanzarme hacia su cuerpo y preguntarle el por qué me había dejado ahí esperando.
Que en fondo deseaba tenerlo entre mis brazos y besarlo.
Su loción me había vuelto a sacudir las neuronas y sin querer una sonrisa se colocó en mi rostro.

El dolor de ser nosotros ✔️ Editando Donde viven las historias. Descúbrelo ahora