Moon Shine Times.

1.

 Incluso tras el comienzo del desastre del apocalipsis y el derrumbe en su hogar, Orix jamas habia dejado de lado aquel gusto que habia generado por el andar del tiempo en cada pequeña flor que veia, cada pizca de naturaleza viva era un respiro en el, un recordatorio que aun habia belleza bajo todo el desastre y las muertes hechas.

Solia expresar ese amor al mundo mediante los regalos que entregaba y el cuidado que daba a cada pequeño rincon que encontraba de la misma. La mayoria de supervivientes lo ubicaban asi, el chico de las flores, porque siempre repartia pequeñas plantas en cada muestra de afecto material que entregaba, Ariocc no pudo salvarse de su gusto tampoco.


Para aquel momento, el cariño hacia el enmascarado habia incrementado de manera asombrosa, siendo el mismo quien recibiera bastantes regalos silenciosos por parte del Sol, muchos de ellos relacionados a la naturaleza, accesorios y fritas frecas, incluso pequeñas flores que tardaban en marchitarse, Ariocc nunca tuvo el corazon de dejar de lado alguna que aparecia en la mesa del bunker.


Para aquel momento, Ariocc y Orix habian abandonado la isla para curar al de mascara, la habilidad de Orix parecia ser el peor enemigo que Ariocc habia encontrado en la pelea, las quemaduras por minas cada dia incrementaban mas en cantidad,


Pero siempre estuvo el para sus vendas gastar.


La cabeza de Ariocc reposaba en las piernas de Orix, ambos se habian mantenido callados desde que el Sol habia terminado de curar a la Luna. Las manos de Orix acariciaban el cabello del de menor estatura, mimando y cuidando del mismo con cariño. Ariocc nunca lo detuvo de hacerlo, se limito a intentar disfrutar de los movimientes y caricias sin queja alguna, el reposo le habia sido indicado como obligatorio por el enfermero de la zona, y dudaba de librarse de su palabra en la cercania del tiempo.


Una idea surgio en su cabeza, pequeños pedazos de petalos y flores fueron dedicados a ser acomodados entre mechones del supervivente, un ceño fruncido se dedico a aparecer en su rostro mientras que Orix, alegre se dedicaba a seguir cubriendolo de las pequeñas plantas. Cubria su cabeza con cada uno de ellos hasta terminar, orgulloso de su trabaj, en silencio se dio cuenta del desagrado que se habia generado en Ariocc.


Suspiro suavemente, comenzando a retirar cada pequeña flor y petalo de su cabello, dejandolos al mismo lado del tronco hasta terminar de limpiar su cabello, levantandose delicadamente tras avisar de la accion. Una pequeña y leve muestra de decepcion era percibida por parte de aquel ser que solia ser una bolita de alegria. Le entrego un Muffin, antes de hablar y tomar todas sus cosas.


"Lamento si aquello que lleve a cabo te fue molestia- No era mi intencion, y no hay problema en que me digas que no te gusta ello. Quedate unos minutos mas, Ariocc, yo regresare a la pelea."


Orix se retiro, sin esperar a un habla ajena o a recibir una respuesta. Se dedico a limpiar la isla para el regreso de Ariocc.


El lo seguia queriendo mientras guardaba silencio.