Mr. Loverman [yoonmin]

parte 17

Finalmente llegó la mañana, la luz del sol filtrándose en el dormitorio. Los dos seguían entrelazados, ninguno se había movido de sus posiciones durante la noche. Yoongi fue el primero en moverse, lentamente abrió los ojos y miró a su amigo. Le tomó un momento darse cuenta de dónde estaba.

*Yoongi respiró hondo unas cuantas veces, sus ojos escanearon la habitación por un momento, y luego notó la figura que yacía a su lado.*

Jimin abrió lentamente los ojos, estaba un poco atontado pero una vez que reconoció a Yoongi, sonrió suavemente, se acercó a él y se acurrucó contra él. Yoongi podía sentir lo suave y cálido que era su amigo, lo reconfortante que se sentía. Y no pudo evitar sentirse tan débil por él que se sintió abrumado por todo eso.

"Hola bello durmiente...
¿Como amaneciste hoy?"
*dijo Yoongi*

*Su expresión se iluminó instantáneamente en el momento en que escuchó la voz de su amigo. Se inclinó un poco hacia él y sonrió suavemente. Sus ojos todavía estaban medio cerrados pero ahora había una suave sonrisa en sus labios.*
"Mmm... Estoy bien, dormí bastante. ¿Y tú?"

"Mejor...hoy estoy mas tranquilo"

"Eso es bueno..."

*Sonrió y se acercó un poco más, podía sentir la calidez y la fuerza de su amigo. Dejó escapar un pequeño bostezo y se estiró un poco antes de recostarse contra el pecho de su Yoongi.*

"¿Quieres levantarte a desayunar?" *Preguntó en voz baja.*

"Jimin-ah...no recuerdo bien lo de ayer...porqué estas durmiendo a mi lado?"

"¿Hmm? Oh, eres tan olvidadizo..." *Se rió un poco y se apoyó en el hombro de su amigo, estaba tratando con todas sus fuerzas de mantener este tono casual.*

"...Estabas borracho anoche y estabas Realmente triste, así que me preguntaste si podia dormir contigo... terminamos durmiendo muy juntos"

*Su tono era juguetón mientras le respondía. No quería hablar de la confesión de su amigo todavía... Hoy no.*

"Lo siento...no fue respetuoso de mi parte haberte pedido eso...yo...no estaba pensando bien en ese momento..." *dijo yoongi*

*Suspiró, no le gustaba ver a su amigo arrepentido, le dolía verlo tan deprimido. Quería que supiera que no había nada malo en lo que había pedido.*
"No tienes que disculparte... puedes pedirme cosas, no hay nada irrespetuoso en ello"

*Sonrió suavemente ya que su amigo no parecía herido u ofendido por su respuesta. No presionó a su amigo por nada más y casi pudo sentir el alivio de su amigo en esas pocas palabras.*

"Pero... podemos hablar más de ello más tarde si quieres. Me alegra ver que te has anímado un poco. Deberías tomarte unas horas más para recuperarte por completo, tómate tu tiempo. Voy a prepararnos el desayuno, ¿está bien?".

"Está bien..."

"Perfecto..." *Dijo mientras besaba suavemente la frente de su amigo

"Yoon~...yo tambien te quiero mucho" *dijo de la nada para luego levantarse e irse a la cocina*
Se estiró por última vez antes de dirigirse a la cocina. Le llevó un rato preparar el desayuno pero finalmente regresó con un plato de tostadas, huevos y dos tazas de café. Colocó suavemente el plato frente a su amigo y luego le entregó una taza de café, tomando la otra para él. Se reunió con él en la cama mientras tomaba un sorbo de su café.*

Mientras tanto Yoongi se habia quedado pensando en las palabras de Jimin...
Porque diría algo como eso de la nada?...
Acaso el ayer habia dicho algo que no debia decir?
Se quedó un poco confundido mientras tomaba su café desde la cama pero al mismo tiempo se sentia algo ilusionado y contento por aquel comentario

Cuando terminaron de desayunar Jimin se vistió con ropa para salir rapidamente y le dijo a Yoon que iba a salir un rato, sin dar muchas explicaciones de donde iba...
A Yoongi no le importaba quedarse solo en la casa, quería darle a su amigo algo de tiempo para pensar y reflexionar. Tomó su teléfono de su mesa de noche y puso algo de música a bajo volumen, no tenía ganas de escucharla a alto volumen por hoy. Se recostó en la cama y respiró hondo unas cuantas veces, necesitaba pensar también. Sus pensamientos comenzaron a dar vueltas una vez más, todo lo que había experimentado la noche anterior, todas sus inseguridades, sus miedos, todos estaban saliendo a la superficie nuevamente. Se reclinó y cerró los ojos.
........

_Jimin_

Hola de nuevo Tae...perdon por no hablarte por estos dias...estuve algo ocupado con mi trabajo y con unos problemas que tuvimos en casa con Yoon...
Pero ahora todo está bien tranquilo

*Dijo Jimin sentado en el suelo del cementerio*

Ayer...fue una de las noches mas dolorosas pero a la vez mas lindas de mi vida
Tuvimos una pelea fuerte con Yoon...
Pero luego el se encontraba algo sensible...habia bebido al parecer y me pidió dormir con el
NO SEAS MALPENSADO, NO HICIMOS NADA EH
pero...me sentí tan comodo en sus brazos...
No podré visitarte tan amenudo estos dias Tae...el cementerio queda demasiado lejos de la casa de Yoon...pero prometo que aún vendré a verte

Taehyung...Kim Taehyung
Lo conoció hace unos años en la escuela donde iban juntos, cuando empezó a trabajar con el señor Choi...lamentablemente...Taehyung falleció
Jimin siempre le contaba todo a Tae
Eran amigos muy cercanos, asi que Jimin solia recordarlo yendo al cementerio a menudo y contandole su dia a Tae...aunque no sabia si el podria escucharlo...

Jimin dejó una rosa roja sobre el suelo donde se encontraba la lápida de Taehyung...y lentamente se fue...

Luego se acercó hasta la lápida de su mamá y dejó unas hermosas calas rojas sobre el suelo, la saludó y salió de aquel lugar

Yoongi suspiró, había estado pensando en la noche anterior. No sólo estaba pensando en la pelea, sino en todas las emociones profundas que habían salido a la superficie durante esa noche. Estaba abrumado por todo eso, no estaba listo para hablar de ello todavía. Tenía algunas cosas más que resolver antes de estar listo para hacerlo.
Se giró hacia un lado y agarró su almohada para sostenerse. Sus pensamientos seguían dando vueltas, su mente no se detenía y se sentía muy abrumado. Su mente seguía volviendo a la pelea que habían tenido la noche anterior y a lo vulnerable que había sido su amigo. Suspiró y cerró los ojos por un momento mientras apoyaba su cabeza contra la almohada. De repente se sintió agotado, se sentía agotado por todos sus pensamientos en espiral.
Finalmente, después de unos minutos, sus ojos comenzaron a volverse pesados una vez más. Los cerró y lentamente se quedó dormido.