Supongo que seré un Rey Demonio

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"¿T/N, te alegras de haberme conocido?" Rias pregunta con voz apagada. Su cara sumergida en mi almohada no me deja ver su expresión, pero puedo imaginarla. Ella se había ocultado en mi habitación después de sentirse avergonzada por su padre y hermano mientras reproducían los videos que habían tomado de las clases abiertas. "A mi me hace muy feliz, ¿sabías?"

"¿Qué clase de preguntas es esa?" Resoplé fingiendo indignación mientras tomaba asiento en un espacio junto a ella en mi colchón. "Por supuesto que me alegra haberte conocido. Me haces muy feliz."

No estaba seguro a que venía ese bajón tan repentino, pero Rias no tardó en incorporarse y besarme.

"Presidenta, ¿Se encuentra bien? Parecía algo decaída" Issei entró en mi habitación, junto con Asia, y encendieron la luz, interrumpiendo nuestro momento.

"¡A-ah! Lo siento. S-solo quería comprobar si la presidenta se encontraba bien" Asia se disculpó con las mejillas sonrojadas y se ocultó detrás de Issei.

"Estoy bien, gracias por preocuparse." Rias sonrió.

"Es bueno escuchar eso." Una tercera persona apareció en la puerta. Sonriendo despreocupado con una mano en uno de sus bolsillos.

"Onii-sama"

"Sirzechs-sama"

"Rias." La llamó. "Hay algo en lo que he estado pensando."

"¿Qué es"

"¿No crees que va siendo hora de que liberes a tu otro [Alfil]"

Rias pareció impactada, mientras que Asia e Issei no tardaron en mostrar su confusión.

"¿Otro [Alfil]?"

"¿Había alguien así?"

"Los poderes de esa persona fueron considerados muy peligrosos." Rias respondió. "Así que fue sellado porque yo no era lo suficiente fuerte como para controlarlo."

"Sellado..." Issei parecía algo reacio a la situación.

"Eso fue tu decisión en primer lugar, ¿cierto?" Rias preguntó a su hermano.

"Sí, eso es correcto" Respondió éste, y luego dirigió su mirada a mí, "Pero, Después de ver sus batallas contra Phenex y Kokabiel, lo he reconsiderado"

"Entonces..."

"Tienes más piezas ahora, y tu nobleza sin duda se ha hecho más fuerte. Estoy seguro de que podréis manejarlo." Su voz se volvió más profunda, supongo que para darle un efecto más dramático al asunto. "Libera el [Alfil], Rias"

"Si tú..." Rias se detuvo y corrigió su frase. "No, si el Maou Lucifer lo ordena..."

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"¿Aquí?" Issei preguntó.

Nos encontrábamos frente al salón prohibido del club, ese que siempre estaba cerrado con cadenas, cintas de seguridad y candados. Todos estábamos presentes para el gran momento.

"Un [Alfil], ¿cómo yo?" Asia parecía estar entre nerviosa y emocionada, supongo que no quería verse opacada por el nuevo integrante al club.

"Mi hermano me dijo anoche que podíamos abrir el sello y le sería permitido deambular en el antiguo edificio escolar, pero se negó" Rias sonaba algo cansada, con un pequeño toque de frustración en su voz.

"Entonces, ¿El [Alfil] es un Hikkikomori?" Issei intentó bromear, o eso creo.

"Sin embargo, es la persona que más contratos cumple en el club." Akeno le dijo mientras lo miaraba divertida.