Al día siguiente, todo transcurrió de forma cotidiana.
A la hora del almuerzo, Legoshi fue al comedor. Pidió su plato favorito: Sándwich de huevo. Contento, fue a sentarse con su grupo de amigos, los mismos caninos con los que comparte habitación.
Mientras hablaban acerca de sus clases, preopaciones entre otras cosas, la atención de Legoshi se centro en otra cosa: Haru.
La vio entrar al comedor, pedir su comida y sentarse en la mesa dónde se encontraba el mismo de gato de ayer. Legoshi no podía apartar la mirada, estudiaba los gestos del gato y lo feliz que aparentaba estar Haru.
Pensó que nunca podría verla feliz a su lado, teniendo en cuenta que él era un carnívoro y ella un herbívoro... Igual que Louis.
Su mente olvidó por completo a Haru, centrándose en el venado.
Más tarde podría verlo en el club y admirar su actuación. Al pensarlo, se emocionó, moviendo su cola.
-¡Legoshi! -Jack exclamó, moviendo sus hombros-.
Legoshi se había perdido en sus pensamientos.
No sabía que estarían hablando. Al parecer, le preguntaron si tenía algún examen. No tenia ninguno, solo debía presentar una especie de maqueta, la cual tenia un plazo de entrega de un mes.
La conversación, tras que Legoshi vuelva a darles atención, se centro en lo ocurrido anoche.
La hora del almuerzo, terminó.
Legoshi estaba aliviado de que la conversación llegara a su fin. No es que no le agrade hablar con sus amigos, solo... no quería seguir hablando de ayer. Quería centrarse en armar otro plan. Necesitaba hacerlo.
Al ir a clases, se topo con Louis.
Lo vio casi al final del pasillo, hablando con alguna chica. Se la veía emocionada, en cambio, él actuaba distante. Con notable desagrado.
La chica se acercó más a Louis, invadiendo su espacio personal. Ello, hizo que Louis se termine la conversación, apartándose de ella.
Legoshi, al darse cuenta que Louis caminaba en su dirección, mirando hacia él, se avergonzó. Desvío la cabeza, evitando seguir haciendo contacto visual con él. Enseguida, entró en el aula.
Ya por la tarde, Legoshi se hacia tarde para llegar al club.
Un maestro le había pedido que le ayudara a mover unas cajas. Tuvo que seguirlo por casi toda la academia.
Cansado, camino hacia el club.
Cuando llegó, todos lo miraron. Fue incómodo, había interrumpido los ensayos. Nervioso, fue a esconderse entre las sombras, como siempre lo hacía.
Louis lo observó mientras arreglaba la vestimenta. Su tardanza era algo que no le agradó, pero no iba a recriminarlo, no en ese momento.
Louis continuo los ensayos. Sin antes, recordarles a los miembros que no lleguen tarde. Siendo una clara indirecta a Legoshi.
Alguien volvió a interrumpir los ensayos.
Era una loba, quien se presentó como Juno. Compartió su entusiasmo por formar parte del club y lo mucho que deseaba poder actuar en el escenario.
Louis le dio la bienvenida, ocultando su hartazgo por ser interrumpido. Otra vez.
Juno se incorporo sin demora, demostrando ser sociable.
Dum, le pidió a Legoshi que me ayudara a traer las cajas que se encontraban cerca de la puerta de entrada; contenían el material que habían pedido para seguir armando la utilería. Sin demora, Legoshi fue a traerlas.
Juno pudo verlo salir de la sombra. Quedando fechada al instante por él.
Intento mantener una conversación con Legoshi, con la excusa de ser la misma especie; a pesar, que Legoshi no parecía interesado en la conversación ni sabía como responderle.
Louis miro con disgusto la escena. No le agradaba que Juno quiera acercarse a Legoshi. Se notó molesto.
Al no prestar atención al ensayo de la batalla con Bill, terminó cayendo mal. Lo que provocó que se doblará el tobillo.
Enseguida todos fueron a auxiliarlo. Entre ellos, Legoshi. Quién dejó de prestarle atención a Juno, para ayudar a Louis.
El dolor no era para tanto, podía soportarlo.
Louis al ver que Legoshi ya no estaba a lado de Juno, desvaneció su molestia.
Lo llevaron hacia la enfermería.
Cuando todos iban a retirarse, les dio la noticia que no podría interpretar el papel principal en la obra. Y que alguien lo reemplazaría. Pidió que todos se retiraran, excepto Legoshi.
Antes que pueda quedarse a solas con él, Juno quiso hablar con el lobo. Louis volvió a sentir su disgusto. Era claro que estaba celoso, pero no iba admitirlo. Se limitó a mirar con desaprobación a Juno, quién se percató de cómo era observada. No tardó en despedirse.
