01: Un gran poder conlleva algo

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My Hero Academia pertenece a Kōhei Horikoshi.

(N/A: Esto es una Fem-Izuku Futanari y con un Kōsei —Literalmente— ocular)

Midoriya Izuku, solo deseaba ser normal.

Y en este mundo, ser normal, significa ser portador de Kōsei.

Un Superpoder.

Todo comenzó con un bebé que liberaba luz de su cuerpo y luego otros nacieron, cientos de otros.

Al comienzo de la Era del Kōsei, el significado de la palabra "humanidad" fue destrozado y lo irreal y fantástico, se volvió lo normal.

Cuando el caos se calmó y aquellas personas con Kōsei Mutantes dejaron de ser perseguidos, se formalizaron y catalogaron los Kōseis.

Cuando más de un 80% de la humanidad, adquirió un Kósei, entonces nacer sin uno, era tomado como lo inusual.

Midoriya Izuku, deseaba lograr tener un Kōsei. Pero la ciencia le dijo que eso sería imposible. Él no "evolucionó", él era normal, era un humano.

Lo discriminaron, lo odiaron. A sus diez años de edad, miró por una ventana, hacia el cielo estrellado y con lágrimas de desesperación, rogó a las estrellas, que le dieran un Kōsei.

Si él tuviera un Kōsei, entonces Kacchan volvería a ser su amigo.

Si él tuviera un Kōsei, su madre no hubiera aumentado de peso.

Estaba muy encerrado en sus pensamientos y cuando se percató de la luz sobre él, lanzó un grito de miedo, al ver lo que parecía ser un meteorito, yendo directo hacia él.

Solo pudo cubrirse con los brazos y cerrar los ojos, mientras que el calor aumentaba.

《No te haré daño, Midoriya Izuku》Dijo una extraña voz, haciéndolo abrir los ojos y viendo delante suyo, una esfera de fuego verde. 《¿Puedes aceptar la idea de viajar a un universo distinto?》Preguntó 《¿Un universo en donde encontrarás cariño y un Kōsei?》

— ¿Quién eres tú? —Fue su primera pregunta al extraño ente delante de él, ¿Esto era acaso alguna persona? ¿un alienígena? ¿un ser de otra dimensión? ¿O quizás solo era una elaborada broma? Tenía muchas preguntas, pero las dos más  importantes, surgieron de sus labios, antes siquiera de registrarse en su mente. — ¿Me estás ofreciendo... viajar a otra dimensión y darme un Kōsei?

《He viajado por muchos universos, por varios multiversos y siempre alguien, desea usarme para el mal》Habló el ente, que estaba parado delante de Izuku 《Fueron tantos, que no me percataba, que: Al ir cambiando de portador, ganaba una conciencia y ganaba poder. Hasta que acumulé lo suficiente, como para poder hacer mi propia voluntad y hoy, Midoriya Izuku, yo te ofrezco, ir a un lugar en donde serás inmensamente feliz y otorgarte una fracción de mi poder》

El peliverde lo pensó. Lo pensó por varios minutos. Pero finalmente lo decidió. Amaba a su madre, pero habían estado pasando cosas muy extrañas recientemente, creía que era alguna clase de grupo extremista, que odiaba a los Mukōsei y si se quedaba, matarían a su madre. — ¿Qué tengo que hacer? —Preguntó finalmente Izuku. Un portal se abrió delante de Izuku y su consciencia fue copiada. En esta dimensión, se quedaría Midoriya Izuku, pero en esa otra dimensión, despertaría Midoriya Izumi.

Cuando abrió los ojos, se encontraba en su habitación y pensó que todo había sido un sueño raro. Cuando comenzó a sonar el despertador, él se puso de pie y se fue a bañar. Notaba su cuerpo... extraño, pero no incomodo. Llegó al baño, se desnudó, sin apenas mirarse. Se metió en la ducha, el champú en el cabello y luego lavarlo...

¿Desde cuando su cabello era tan largo?

Espera un segundo: ¿Acaso tiene los ojos cerrados? Pues sí, sus ojos están cerrados, mientras el champú está sobre sus ojos. Pero su cuerpo... se sentía más... delgado.

¿Sí sus ojos están cerrados, porqué puede ver el agua de la ducha?

Abrió sus ojos y vio un par de orbes blancos con un círculo perfecto de color negro y envuelto en un anillo verde.

Delante suyo, habían otro par de ojos, que solo flotaban allí.

Lanzó un grito, cuando se percató de lo que eran y escuchó pasos y a su madre llamándo... ¿la?

— ¡¿IZUMI-CHAN, ESTÁS HERIDA, CARIÑO?! —Su madre abrió la puerta del baño y vio lo mismo que su... hija: Dos ojos que flotaban en el aire, antes disiparse en la nada. Su madre se tomó un segundo, antes de que sus ojos se llenaran de lágrimas y cubriera su boca — ¡Cariño, no sólo tienes un Kōsei! Mira hacia abajo —así lo hizo Izumi y sus ojos se abrieron aún más, al ver lo que colgaba entre sus piernas — ¡Eres una Futanari, mi amor! —dijo su madre, con felicidad rebosante.

Y la respuesta a la pregunta no formulada, llenó su mente: Los hombres fueron extintos, durante una guerra entre héroes y villanos, hace ya casi un siglo y las mujeres construyeron una isla artificial, llamada Isla-F (Isla de la Fertilidad), en donde desarrollaron métodos, para que dos mujeres, otorgarán parte de su ADN y se crearán niños con rasgos de ambas madres e incluso fusión de Kōseis.

Las Futanari surgían de una en un millón, se le llamaba Gen-F y nadie sabía cuándo estos Genes surgirían, pero eran adoradas como diosas y encargadas de tener un Harén, para tener hijos biológicos y naturales.

Cuando Izumi estuvo lista, comenzó a rebuscar en su interior, para poder comprender como funcionaba su Kōsei, pero toda concentración, se perdió cuando su madre le sirvió el desayuno, antes de sumergirse bajo la mesa, alzar su falda, quitarle las bragas y devorar ese miembro de caballo, provocando que la chica agarrase con fuerza la mesa del comedor, mientras sentía la lengua y labios de su madre, ponerse a trabajar e intentar extraer su semilla.

Cuando madre e hija, terminaron de desayunar (más Izumi, que Inko), la matriarca Midoriya, fue a hacer una llamada, en lo que Izumi miraba su mano derecha y luego se dirigía al patio trasero, para intentar convocar los ojos. — ¿Acaso solo son ojos para ver? ¿O puedo otorgarles distintas habilidades? —ciertamente, Izumi podía otorgarle muchas habilidades a estos orbes, pero era algo que tendría que aprender lentamente. Por ahora, solo los usaba como drones, pero sabía que tarde o temprano, podría hacer más, muchísimo más y poder recuperar la amistad de Kacchan, la hacia feliz.

Más tarde, en el parque, mientras que Inko y Mitsuki hablaban, Izumi se toparía con quien era su mejor amiga en esta dimensión: Bakugō Kazumi, quien todavía tenía ese Kōsei para crear explosiones.

Gracias a Kacchan, Izumi descubrió que los ojos podían ser "programados" y gracias a la "programación" previa de estos ojos, ella podía tener visión telescópica, microscópica o de láser... o incluso Rayos X.

— ¿Porqué te sonrojas? —Preguntó la rubia de ojos rubíes.

—Lindas bragas de ositos, Kacchan —bromeó la peliverde.

—Dek... MIDORIYA-BAKA —hizo detonar su Kōsei y los ojos azul (Rayos-X) y rojo (Láser) desaparecieron.

Para Izumi, era reconfortante, el tener la amistad de Kazumi y la violenta rubia de ojos escarlata, no le negaría esa amistad.

Midoriya: La diosa de los mil ojos (Fem-Izuku Futa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora