Llegó el día de ir a la Universidad de los Andes para buscar información sobre el traslado de facultad, me sentía muy optimista y entusiasmado de ir por primera vez a la escuela de medicina con la que tanto soñaba, tenía muchos nervios y emoción. Después de una ducha de agua tibia, me lavé los dientes, me arreglé el cabello y me puse la mejor ropa para dar mi mejor impresión en la ULA, después de plancharla y dejarla completamente impecable, me vestí con velocidad para salir y saludar a mi mamá.
Mi primorosa y refinada vestidura me hacía sentir seguro de mí mismo, me puse una camisa blanca, una corbata y un hermosísimo abrigo negro que combinaba con mi calzado, me peiné el cabello de lado y me apliqué protector solar antes de ponerme las gafas. Estaba bastante contento de ir a la Universidad de los Andes, ya no podía esperar más para realizar el traslado y reiniciar mi vida en todos los sentidos. Salí de la alcoba y fui por mi desayuno, le preparé la comida a mis mascotas y me dirigí a la habitación de mi madre para saludarla, era el día de su cumpleaños. La puerta de su alcoba estaba abierta, me alegré mucho cuando la vi porque se veía muy tranquila, ella se encontraba arreglando el closet.
- ¡Hola, mamá! Feliz cumpleaños a mi reina, a la mujer que más amo en todo el mundo.
Mi mamá se dio la vuelta lanzándome una hermosa sonrisa, me acerqué a ella y la abracé.
- ¡Gracias, Michael! –Dijo mi mamá, regresándome el abrazo.
Amaba el olor de mi mami, me hacía sentir protegido cuando la abrazaba.
- Mamá, eres lo más valioso y magnífico que tengo en mi vida. Espero seguir teniéndote conmigo muchísimos años más porque no me imagino una vida sin ti. ¡Te adoro!
Ella volvió a sonreírme e hizo un bonito gesto.
- Yo también te adoro mucho, siempre estaré para ti sin importar qué... ¿Ya te vas? Te ves hermoso, mi corazón.
Le di un beso en la frente y la solté tenuemente de mis brazos.
- Si mamá, iré a la ULA para buscar información acerca del cambio de universidad.
Mi mamá se emocionó mucho por lo que le dije, su mirada de orgullo me hizo sonreírle con regocijo.
- Sé que te irá muy bien, espero que regreses a casa con buenas noticias. ¡Ah, por cierto! –dijo con sorpresa–. Ya no iré más a trabajar.
Mi mamá estaba doblando su ropa para encajarla en las gavetas.
- ¡Genial, mamá! Es una buena noticia, así podrás descansar. ¿Ya renunciaste? –Arrojé, cambiando de tema.
- Sí –movimiento afirmativo con la cabeza–. El intermitente dolor en las articulaciones ha empeorado, además, ya no soporto el dolor en la columna. Debo ir al doctor esta semana, probablemente me refieran a realizarme rayos x.
Mi mamá se veía adolorida con cada movimiento que hacía, la percibí muy tensa.
- Me contenta que hayas tomado la decisión de no ir más a trabajar –reconsideré–, ahora lo que importa es tu salud. Deben estudiarte para ver qué tratamiento pueden recetarte, ya sea terapia o analgésicos, solo cuídate mucho de cualquier caída. Tampoco puedes levantar cosas pesadas o hacer movimientos que te generen dolor.
- Si, lo sé –concordó mi mamá, girándose para buscar más ganchos de ropa–. He estado tomando analgésicos, mayormente, siento la molestia en todo mi cuerpo cuando estoy sentada, acostada o caminando.
- Es probable que se trate de un declive hormonal a causa de los estrógenos –le expliqué–, es muy común en la menopausia, la falta de estrógeno provoca una disminución en la fortaleza de los huesos y de la masa muscular. Eso es lo que produce las molestias corporales que sientes. También pudiera ser una deficiencia de vitamina D, provoca los dolores musculares y mucha debilidad. Todo lo que te digo son simples suposiciones, es necesario que te realices exámenes de sangre y otros estudios que te ordenará el doctor.
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22 NOCHES
Teen FictionMichael Dantés, regresa a la literatura con uno de sus libros más traumáticos y reveladores. "22 Noches", una obra autobiográfica escrita en la soledad del insomnio, el desamor y la depresión, narra la travesía del autor al enfrentar sus miedos desd...