📆 UNA SEMANA DESPUÉS
El que me haya bajado la inflamación de la rodilla, está ayudando a que la rehabilitación no sea tan dura ni me deje tan cansada. Levanto mi pierna con lentos movimientos realizando las series que Mario me ha dicho. Él va a ser la persona que se encargue de mi rehabilitación, algo que agradezco porque es muy profesional y competente, y por suerte no me trata como quien soy. No así algunas personas, a las que he visto cuchichear por los pasillos y también aquí en el gimnasio.
No debería afectarme esto. El que me miren y hablen de mi, pero, la verdad es que si me molesta porque desde que saben que soy la nieta del presidente del Real Madrid es como si tuviera delante de mi un cartel de prohibido acercarse a menos de un kilómetro.
-¿Te queda mucho con la máquina? -levanto mi mirada de la rodilla y al momento en mi rostro se forma una expresión asqueada. Carvajal, el capitán de la primera plantilla de fútbol, algo que él me recuerda constantemente, está frente a mi con sus brazos cruzados con evidentes signos de molestia al mirarme.
-Dos series más -le contesto pues no deseo de nuevo una confrontación con él. Bastante tengo con tener que aguantar su arrogancia cada vez que lo veo.
-¿Y no puedes hacerlas en otro sitio? te lo digo porque los jugadores tenemos prioridad en los aparatos. Aunque bueno, a lo mejor ser la nieta del presi te la da sobre los demás.
Levanto una de mis cejas, mordiéndome la lengua con tal de no mandarlo a la mierda, que es lo que se merece, pero, como he dicho, no quiero una nueva pelea con él. Así que, simplemente me levanto del aparato y después de coger mis muletas, con toda la calma del mundo, busco un lugar lo más apartado posible de él, donde no molestar.
-Todo tuyo -le contesto forzando una irónica sonrisa, alejándome de él.
Camino con pesadez pues esta clase de ejercicios me dejan bastante exhausta. Me siento en un banco, el cual no está siendo usado por nadie y retomo mis series, deseando acabar y así poder hacer otra cosa.
-Yo no me hubiera ido. Estás dejando que se salga con la suya -mi mirada se desvía hacia mi derecha, siendo la voz de Kylian la que me habla. No puedo evitar fijarme en la pesa que lleva en su mano, la cual usa para fortalecer los músculos de sus brazos. Y joder, que brazos. Musculosos. Con unas marcadas y gruesas venas. Bueno, es que el resto de él, es jodidamente así. Fuerte. Tonificado.
Dios, casi estoy babeando por él.
-Prefiero poner distancia entre él y yo. No quiero estar cerca suya -le confieso al jugador, quien detiene su ejercicio para ofrecerme una interrogativa mirada.
-¿Te ha hecho algo? -su pregunta preocupada me sorprende un poco, aunque bueno, es de las pocas personas que me habla y puede que hasta le interese lo que me pasa.
-No, desde el otro día no ha vuelto a decirme nada más. Pero, como que no se corta en hablar de mi cuando estoy delante. Me llama niñata mimada.
-¡Menudo gilipollas! Eres demasiado buena, Sianna. Otra en tu lugar, hubiera ido a chivarse a tu abuelo.
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Arabesque - Kylian Mbappé
RomanceKylian Mbappé, ¿alguna vez ha estado enamorado? Si, lo estuve, de ella. De esos ojos azules que querían traspasar mi alma. De su sonrisa arrebatadora y a veces, tan provocativa. De los abrazos que me daba a escondidas. De sus besos desesperados. Co...