Tallé mis ojos mientras me dirigía al cuarto de baño para tomar una ducha matinal, me vestí y apliqué algo de rímel junto con "eyeliner" a mis ojos color azul cristalino.
Bajé las escaleras con lentitud y me encontré con una no muy agradable sorpresa.
Mamá.
-¿En qué irás al instituto? -Cuestionó mientras leía el periódico.
-¿Realmente te importa? -Bufé-. Mark me llevará en el vehículo negro.
-Está bien -musitó, sin alejar la mirada de su aburrida lectura-. Adiós.
-Adiós.
Me retiré de casa y corrí donde se encontraba Mark. Él abrió la puerta trasera, dándome acceso al automóvil. Subí a éste y observé por la ventana como el viento que corría movía las hojas de aquellos árboles otoñales, ya dejándolas en el suelo, formando un camino de puntos naranjas.
Mamá y yo no teníamos una relación normal. Ella era fría conmigo, al igual que yo con ella. ¿A que se debía esto? Mamá permanecía la mayor parte del tiempo en el trabajo, y si no era eso, se encontraba leyendo el estúpido periódico con sus estúpidas noticias de asesinatos. Y para colmo de males, cuando lográbamos hablar, lo hacíamos con las mínimas palabras posibles. Yo no existía para ella.
Al llegar a mi lugar de estudio, bajé corriendo del vehículo, ya que rápidamente logre visualizar a April entre la cantidad de estudiantes que rondaban por ahí.
-¡April! -le llamé en un grito. Volteó.
-¡Brittany! -Sonrió y se acercó para plantar un tierno beso en mi mejilla, tal y como hacemos desde que nos conocemos.
-¿Entramos juntas? -Cuestioné con una sonrisa.
-Cla...No habló. Parecía que toda ella había quedado petrificada como una roca.
Observé a mi alrededor y mucho más estaban igual a April. Les miré confundida.
-¿Hola? -Sacudí mi mano frente al rostro de April-. ¡Tierra llamando a April Edwards!.
-Fuera de mi camino -Habló una fría voz a mis español.
Presioné mis dientes de arriba con los de abajo, formando un sonido bastante desagradable.
Volteé.
-Hay mucho más espacio para caminar y entrar al instituto. Ciego - Musité furiosa.
-No quieres problemas conmigo, Parker. Apártate - Ordenó.
-¿Quién diablos te crees tú para decirme que hacer? -Pregunté acercando mi rostro al suyo. Logré sentir su fría respiración.
-Hija de..
-De perra -Sonreí-. Lo sé, sí, mi madre es una perra -Frunció el ceño y apretó sus dientes-. Oh. vaya. El "Chico Malo" esta enfadado -Reí en su cara.
-Brittany, vámonos -Murmuró April tomando de mi camisa.
-No. Este chico necesita que alguien le enseñe un buen comportamiento.
-¿Quieres sufrir? -Cuestionó el formando su mano en un puño.
-¿Me golpearas? -Reí Irónica -.Por favor, que poco hombre eres, no me asustas Rader.
-¡Brittany! -Oí que alguien mencionaba mi nombre y un brazo masculino rodeaba mis hombros -. Vamos ya pequeña -Sonrió alejándome del chico ondeado-.
¡¿Pero qué diablos crees que haces Brittany?! -Elevó la voz cuando ya estábamos lo bastante lejos para que nos oyera alguien.
-Deberías dejar de adentrarte en asuntos que no son de tu incumbencia -Bufé.
-Tendrás problemas si ocurre algo desagradable entre Jack y tú. Además, es mi deber como hermano mayor.
-Hermanastro -Corregí rápidamente.
La campana sonó.-Debo ir a clase. Adiós Damon -Besé su mejilla secamente.
-Adiós.
Quité algunos libros de mi casillero y me dirigí al aula número cuatro. Tomé asiento a un lado de April.
-Gracias por ser la mejor amiga del mundo y dejarme sola con aquel chico -Bufó bajando el libro que leía.
-Lo siento. Damon nuevamente -Suspiré aburrida.
-Él siempre al rescate de tus casi muertes, Brittany -Rió.
-¡Hey!, ¡No soy débil, podía contra él! -Me defendí-. Ap.
-Jamás en tu vida me vuelvas a llamar "Ap". Sabes que lo odio.
-Solo quería molestarte un poco -Sonreí y me volteé para recorrer el aula con la mirada. No sabía por qué demonios realizaba esta acción.
Frené al encontrarme con los últimos asientos a la izquierda. Allí permanecían ellos, desde que llegué a "Black". Harry Crawfford, Eddie Hunter y por último, Jack Rader. Cualquier estudiante del edificio les llamaría "La pandilla de chicos malos", ya que se rumorea de que han cometido asesinatos entre otras barbaridades.
El fuerte sonido de los tacones que llevaba la maestra Hudson hizo que volteara rápidamente para atender al pizarrón y hacer el saludo diario a ella.
-Buenos días estudiantes -Saludó.
Buenos días señorita Hudson -Hablamos al unisono.
-Señor Rader, buenos días.
-¿Qué hay? -Dijo Jack con desinterés.
-Usted jamás cambia alumno -Suspiró pesadamente.
-Tampoco usted -Continuó él-. Está igual de vieja como hace cinco años.
La clase completa rió, a excepción de mi.
Era extraño que rieran con algo dicho por Jack. Principalmente guardaban silencio y temblaban en sus asientos. La maestra solo frunció el ceño y comenzó a escribir sobre el blanco pizarrón, comenzando con su aburrida clase.
Gracias por leer.
Luna ♥.
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¡No me asustas Rader!
AcakI n t r r o d u c c i ón; Mi instituto es diariamente intimidado por un chico, Jack Rader desde tiempos que aún no sé. Fui transferida a Black cuatro semanas atrás y son la única -O al menos eso creo- que no le teme en lo más mínimo a Rader. Soy Br...