Glimpses of us. Juantin one-shot collection

2. Deletréamelo

Martin nunca ha sido fan de Starbucks.

De hecho, sigue sin serlo.

El otro día, durante un descanso entre clases, cuando Chiara insistió en que tenían que ir al establecimiento que acababan de abrir cerca del conservatorio, se mostró bastante reacio. Starbucks no deja de ser una cadena que explota a sus empleados y que tiene cero conciencia ecológica. Además el café es repugnante. Es aguado y sabe a todo menos a café.

Sin embargo, no puede negarle nada a su amiga y terminaron yendo juntos a por unos cafés.

Martin sabía que en la mayoría de cadenas, los puestos enfocados a la atención al público están reservados para gente jóven y atractiva. Lo que no se esperaba era que le atendiera el chico más guapo que había visto en su vida.

"Hola, chicos. ¿Qué os pongo?" La voz del chico era tan bonita como su cara y Martin creyó sonrojarse al darse cuenta de que estaba callado, mirándole fijamente mientras que Chiara leía la carta en el mostrador.

Chiara dió un saltito y procedió a ordenar el café con peor pinta que Martin había visto en su vida. Llevaba caramelo, y... chuches?

Él por su parte pidió un cappuccino, que probablemente no podría ser tan asqueroso.

"Enseguida" respondió el empleado con una sonrisa brillante, como de anuncio de pasta de dientes. Cuando se giró para preparar las bebidas, Martin no pudo evitar fijarse en su ancha espalda y en cómo la tela de la camisa negra del uniforme se tensaba ante cada movimiento de sus brazos. "Un Estrella de Caramelo y Nube Frappé para... ¿Cómo te llamas, amor?"

"Chiara, pero mis amigos me llaman Kiki", respondió Chiara, mirando el café como si no hubiera comido en dos semanas, incluso con el aspecto horrible que tenía la bebida.

"Perfecto, pongo Kiki entonces" el chico le guiño un ojo a la pequeña mientras garabateaba el nombre en el vaso y se giró hacia Martin "¿Y tú cómo te llamas?" otra vez esa sonrisa perfecta.

"Martin" por algún motivo, el hecho de decirle su nombre al camarero guapo le ponía de los nervios.

"Aquí está" el chico le entregó el café y se despidió mientras Martin y Chiara se alejaban después de darle las gracias.

Una vez salieron del local, su amiga le enseñó el café emocionada. "Look Marts. Ha puesto Chichi. Sooo cute".

Y Martin aún no había leído el nombre escrito en su café, pero estaba mentalmente preparado para ello.

Martín :)

Estuvo de mal humor durante todo el descanso.

.

Un día más tarde, no tiene muy claro por qué, pero se encuentra de nuevo frente al local. Diría que el café no era tan malo, pero no puede engañar a nadie, era vomitivo.

Mientras se aproxima a la cola, contempla la posibilidad de darse media vuelta, pero su mirada se detiene en el mostrador donde divisa al chico guapo que había escrito mal su nombre el día anterior.

Tendré que corregirle.

Martin saca su móvil y lo consulta distraídamente mientras espera su turno mientras que avanza lentamente hasta llegar a la barra.

"Ay, hola Martín ¿Te gustó mi café?" pregunta el más alto con una sonrisa amistosa.

"En realidad es Martin, no Martín" no puede evitar que el disgusto se haga presente en sus facciones.

"Lo siento, lo escuché mal entonces. Martin" responde mientras le mira a los ojos, haciendo que Martin se sonroje furiosamente. "Lo escribiré bien esta vez"