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A la mañana siguiente cuando toda la familia Cowper estaba desayunando mientras el Lord leía el periódico anunciaron que había una visita

- La señorita Elizabeth tiene una visita de un caballero

Lady Cowper: Dile que pase

Benedict: Buenos días Lord y Lady Cowper- dijo educadamente

Lord Cowper: Señor Bridgerton, ¿A que se debe su visita?

Benedict: Me agradaría poder cortejar a su hija menor, la señorita Elizabeth- dijo con un ramo de flores que le dio a esta

Elizabeth: Muchas gracias mi Lord, las podré en agua

Lord Cowper: Lamentó informarle Señor Bridgerton que mi hija no se encuentra en el mercado matrimonial, en cambio si está interesado en mi preciosa Cressida adelante

Benedict: No se ofendan pero mi interés esta en la señorita Elizabeth

Lady Cowper: Pues no puede ser

Benedict se marcho molesto pensando en la manera de rescatar a su dama de esa prisión, sin esperarlo al salir de la casa oyó un silbido que lo hizo subir la cabeza viendo Elizabeth en su ventana colgada de la enredadera a lo que se acercó

Elizabeth: Como me imaginaba que pasaría eso, ya has visto lo fácil que es bajar la enredadera

Benedict: No pierdas la esperanza seguiré intentándolo y pensando en cómo rescatarte

Elizabeth: Intentaré convencerlos de que me presenten en sociedad y así se me quitarán de encima 

Benedict: Buena idea, en casa siempre serás bienvenida, lo sabes ¿Verdad?

Elizabeth: Tu siempre serás bienvenido en mis aposentos - dijo compartiendo una sonrisa algo picara 

Benedict: ¿Puedo preguntarte algo?

Elizabeth: Dime

Benedict: ¿A quien habéis salido tan hermosa? 

Elizabeth: Al parecer tenemos descendencia en otros países y solo fui yo la afortunada de salir así, aun que sea un bicho raro

Benedict: No eres una bicho raro, sois hermosa y seremos bichos raros juntos 

Elizabeth: Que así sea, viene mi madre, vete corre 

Benedict beso mejilla para irse de forma que no lo visen, para que Elizabeth subiera su enredadera escondiéndose de su madre, para luego de un rato sentada en su ventana con dibujando la puerta de su habitación se abrió  

Lord Cowper: Te traemos buenas noticias

Lady Cowper: Tu querida y preciosa hermana nos a hecho que nos estemos pensando presentarte en sociedad 

Elizabeth: ¿Enserio? - dijo emocionada levantándose

Lady Cowper: Si, así que en un tiempo te diremos nuestra decisión

Elizabeth: Esperaré ansiosa, gracias madre, gracias padre

Cuando los progenitores Cowper salieron de allí ella empezó a saltar de alegría para que poco después entrará Cressida muy feliz

Cressida: Veo que te han dado las buenas noticias

Elizabeth: Gracias hermana- dijo abrazándola

Cressida: Aun que mamá nos enfrenté, sigues siendo mi hermosa hermanita - dijo sonriendo - Qué no te convenzan de que no te quiero, por que no es verdad, te quiero muchísimo

Elizabeth: Y yo a ti

Ambas se abrazaron para sentarse ambas en la cama de la menor donde Cressida se permitió relajarse y esconderse de sus padres, apoyando su cabeza en el regazo de su hermana menor quien dibujaba, mientras charlaban

Cressida: No me extraña que el señor Bridgerton te quiera como esposa, eres una artista igual que el, ayudaré a que te dejen presentarte en sociedad

Elizabeth: Estaré eternamente agradecida y si consigo casarme con Benedict y tenemos hijos, a mi primera hija le pondré tu nombre

Cressida se incorporó para abrazar a su hermana de la emoción aun más convencida de ayudarla a conseguir su felicidad.

Mientras que las dos hermanas Cowper disfrutaban de su tiempo entre hermanas en la casa Bridgerton, Benedict entraba muy serio y pensativo algo que extraño a todos

Lady Bridgerton: Hijo ¿Estás bien?

Benedict: Si, pero me retiraré hasta la hora de cenar, sino os importa

Lady Bridgerton: Claro, ves hijo

Benedict se fue a sus aposentos a tumbarse y pensar quedándose dormidos, siendo esa la primera vez que volviera a soñar con Elizabeth y su futura boda con ella, algo que no le había vuelto a pasar desde los diez años, algo que lo hizo despertar de su siesta con una sonrisa y seguir pensando con ganas y mucho ánimo.

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