Dejado En La Hoja

497 31 7
                                    


Hiruzen nunca espero que esto sucediera no, es más, nunca se le cruzo por la cabeza lo que estaba ocurriendo en su propia oficina en este instante

Delante del hombre que esperaba con ansias su jubilación se encontraba su alumna o mejor dicho ex alumna Tsunade Senju acompañada de su propia aprendiz quien era la conocida como Shizune de tan solo 4 años edad quien para todavía confusión del dios shinobi tiene un bulto entre sus brazos que deducir viendo una pequeña mata de pelo rubio y puntiagudo que sobre sale de ella que era un bebé

Un bebe?

Si un bebé y uno recién nacido eso no hacía más que confundir más a Hiruzen

- Y que hace que vuelvas Tsunade - hablo por fin rompiendo el silencio que se formó entre los tres de un mediato cundo entró en la habitación

- Quiero un favor suyo sensei - replicó Tsunade con cara seria mirando al hombre que la formó al principio de su camino shinobi

- Y eso tiene que ver con ese pequeño que tiene tu aprendiz? - respondió volteando a ver a la pequeña quien se siento un poco nerviosa

Ella si bien a cierta medida entendía el rango de poder de su sensei ella también entendía que representaba el hombre frente a ella siendo quien era el maestro de su sensei y el propio Hokage de la actual aldea más fuerte y si bien el señor delante tuviera la cara de un buen samaritano eso no quiere decir que no se pueda enojar

-Así es sensei - ella bajo la mirada del hombre tomó al que parecía ser un niño de los brazos de Shizune, quien parecía un poco disgustada, y se acercó al escritorio del Hokage - El es mí hijo y de nadie más - sentenció con dureza

Hiruzen por fin pudo ver al bebé de cerca, el era pequeño y un poco regordete, tenía un poco de pelo el cual como vio antes era rubio brillante y puntiagudo para todos lados

Cuando lo tuvo en brazos el pequeño abrió los ojos y grande fue la sorpresa de Hiruzen al ver esos diminutos pero brillantes ojos azules que tenía el niño

El pequeño en los brazos del shinobi con mayor rango en la aldea no tuvo mejor idea que estirar sus mano mientras trataba de agarrar su barba para poder jugar con ella, inevitablemente eso le saco una sonrisa a todos en la habitación menos a alguien lo cual hizo que se sorprenda la misma Tsunade seguía con su seño serio mirando a su sensei y llegó el turno de hablar de Hiruzen

- Y quien es el padre? - obviamente se dio cuenta de la forma en la que se tenso Shizune llamando más la atención del viejo

- Eso no importa solo fue un desliz con un cualquiera de una aldea cercana - lamentablemente paso si bien no recuerda la noche, si recuerda la gran paliza que le dio al hombre a la mañana

Obviamente el gran sabio de los sapos no estaba enterado de nada y cuando digo nada, es nada

Esa última declaración de Tsunade dejó más que extrañado a Hiruzen quien decidió no discutir ni replicar eran las decisiones de su alumna quien ya era una adulta y no se metería en su vida privada pero mentiría si dijera que no estuviera preocupado

- Y que opina Mito-san? - pregunto con genuina curiosidad

- Ella está en total desacuerdo de esto y no quiere saber para nada sobre el tema - ella sabía que su abuela quizás la puede comprender pero se sentía muy avergonzada

Ella si bien no le guardaba ningún secreto a su abuela esto estaba en otro escalón

Hiruzen se sorprendió el conocía muy bien a Mito, era una mujer muy amable y comprensible con todos y más con sus seres queridos pero devuelta decidió no meterse en la vida privada de Tsunade

Naruto: Un Namikaze Muy SenjuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora