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Lisa llegó a casa, con su mente perdida en la conversación que tuvo con Jaekyung está tarde, desde ese momento, no pudo concentrarse en nada

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Lisa llegó a casa, con su mente perdida en la conversación que tuvo con Jaekyung está tarde, desde ese momento, no pudo concentrarse en nada.

Maldito Jaekyung. Lisa lo maldijo mientras dejaba su bolso de golpe en la mesa, atrayendo la atención de Jungkook, quien estaba en la cocina.

—El bolso no tiene la culpa, mujer — dijo mientras se acercaba a ella, dejando una taza de café encima de la mesa para después mirarla. —¿Sucedió algo en la empresa?

Lisa soltó un suspiro y negó. —No, no sucedió nada — dijo, tratando de tranquilizarse, no quería decirle que su estúpido hermano lo hizo dudar de él. —Regresaste a casa temprano — cambio de tema.

—Sí, hoy cerré temprano porque quería llegar a tiempo a casa y prepararte la cena — sonrió, mientras se acercaba y la abrazaba por la cintura.

—No tengo hambre — respondió mirándolo. Jungkook la miro confundida.

—¿Pasa algo? Es raro que no tengas hambre — Lisa desvió la mirada y tomó su bolso de la mesa.

—Comí tarde, por eso no tengo hambre, no te preocupes, todo está bien. Iré a darme una ducha — sin decirle nada más, camino hacia las escaleras, subiendo en silencio hacia la habitación de ambos.

Jungkook sabía que algo le estaba pasando a su esposa, pero también sabía que no le diría si se lo preguntaba, ni por más que la presionará, solamente la molestaría y se enfadaría ambos. No quería eso.

Jungkook dejó la cena en la mesa y subió rápidamente las escaleras minutos después, al entrar a la habitación de ambos, pudo escuchar el agua caer en el baño, rápidamente sonrió, se quitó la ropa, tomó una toalla y sin dudarlo, entro al baño.

El cristal de la ducha estaba polarizado por el humo la temperatura del agua, sin embargo, pudo ver perfectamente la figura de su esposa, el agua cayendo sobre ella y relajándose bajó el agua.

Dejó su toalla colgada y deslizó la puerta de cristal sin hacer ruido, la cerró y posó sus grandes manos en la pequeña y delgada cintura de Lisa. Ella se sobresaltó ante el repentino tacto y se giró rápidamente, viendo la sonrisa perversa de Jungkook.

—¿Qué haces aquí? Te dije que tomaría una ducha — dijo, frunciendo suavemente el entrecejo.

—Mi esposa está actuando raro, la conozco y sé que no me dirá nada, así que al menos, quiero que se relajé y despejé todos los pensamientos tontos, que la estén atormentandola — Jungkook la giró nuevamente, dejándola de espaldas a él, mientras sus manos subían de sus caderas hacía sus pechos.

Mientras acariciaba sus pezones con sus dedos, empezó a besar su cuello, mientras Lisa soltaba suaves gemidos ante la estimulación.

—Mhm~ — gimió Lisa. Jungkook sonrió contra su cuello, dejando una mano jugando con su pezón, mientras que la otra bajaba por su abdomen, vientre, hasta llegar a su feminidad y estimularla con sus dedos.

Lisa gimió un poco más fuerte, recargando su espalda en el pecho de Jungkook, mientras gemía por su tacto. Jeon aceleró sus movimientos sobre su clítoris, sonriendo al ver a su esposa deshacerse en gemidos entre sus brazos.

Jungkook la hizo sostenerse del cristal de la puerta de la ducha, mientras jalaba un poco sus caderas hacía él, mientras cerraba la llave de la regadera.

—Ahora viene la mejor parte, cariño — Lisa se quedó en silencio ansiosa, mientras que Jungkook sonrió de lado, tomó su miembro erecto y lo puso en la entrada de Lisa, empezando a entrar en ella lentamente.

—¡A-Ah ~! — Lisa sintió el miembro de Jungkook invadir en su interior, haciéndola gemir de placer, sosteniéndose de la puerta de cristal de la ducha.

Las embestidas empezaron a ser más rápidas, fuertes y profundas, haciendo que los gemidos y sollozos de Lisa llenarán la ducha, mientras él jadeaba al sentir como estaba a punto de correrse.

Unas estocadas más y ambos tuvieron su orgasmo, Jungkook sostuvo a su esposa con un brazo rodeando su cintura y vientre cuando sus piernas perdieron fuerza y estabilidad.

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Al día siguiente, Lisa se había ido a primera hora a la empresa, a revisar los documentos pendientes y de importancia. Ni siquiera pasaron dos horas, cuando nuevamente había una mujer embarazada pidiendo ver a Lisa con urgencia.

—¿Le digo a seguridad que la saqué? — Lisa suspiro pesado y negó.

—No, hazla pasar, le daré el beneficio de la duda y veré cuál es el pretexto que usa ahora — dijo, acomodando unos documentos frente a ella.

—Está bien, la haré pasar — Rosé se retiró de la oficina de Lisa. Segundos después, una joven de tez clara entró, su cabello negro y de complexión delgada, excepto por el vientre abultado que mostraba bajo ese vestido de maternidad.

Lisa la miro y analizó, señalando en silencio la asiento frente a su escritorio, la mujer se sentó en silencio, mirándola con una leve expresión de temor.

—¿Y bien? — preguntó Lisa, tomando los documentos que tenía en su escritorio, mientras los firmaba sin mirar a la mujer frente a ella.

—J-Jeon Jungkook es el padre de mi bebé — Lisa se detuvo, despegó la punta del bolígrafo de la hoja y la miro con seriedad.

—¿Cuál es tu nombre? — preguntó.

—Lee Ji eun — respondió la mujer, mientras acariciaba su vientre abultado.

—Mira, Ji-eun, ¿Acaso sabes cuántas mujeres embarazadas supuestamente, de mi esposo, han venido en está semana? — preguntó mirándola con seriedad, estaba harta de está mierda.

—N-No, pero...

—Estoy harta de esto, así qué, por favor, retirate, como puedes ver, estoy muy ocupada — dijo mientras suspiraba cansada.

Lisa espero a que Ji-eun se levantará y saliera de su oficina como las demás mujeres que habían venido con esa estúpida farsa, sin embargo, frunció el entrecejo al ver la fotografía que ella había puesto en el escritorio, frente a ella.

Lisa tomó la fotografía, mirándola con el entrecejo fruncido. Era Jungkook y Ji-eun, ambos estaban abrazados.

—¿De dónde sacaste esto? — pregunto con voz seria y muy molesta.

—H-Hace siete meses lo conocí en la academia de baristas, dijo que necesitaba aprender a hacer un buen café — dijo, jugando nerviosa con sus manos.

—¿Y luego? — para entonces, la fotografía que estaba en la mano de Lisa, estaba siendo apretada con fuerza y arrugada, sin quitarle los ojos de encima a Ji-eun.

—M-Me invitó un café y una cosa llegó a la otra...terminamos teniendo sexo — Ji-eun bajó la cabeza y se sobresaltó al escuchar como Lisa golpeaba la mesa con la palma de su mano y se ponía de pie.

—¡Maldita sea! — gritó furiosa.

Porque Lisa sabía que Jungkook había asistido a esas dichosas clases en la escuela de baristas de Seúl, diciéndole que quería aprender cosas nuevas.

Sintió un enorme nudo en la garganta, mientras que sus ojos contenían sus lágrimas.

La traicionó.



—LaOmmaChida💜💜✨✨✨

»Positions 🍓 +18 [ Lizkook ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora