Mr. Loverman [yoonmin]

parte 39

Finalmente después de unos minutos y varias respiraciones profundas, se levantó y trató de recomponerce, enjugando sus lágrimas y saliendo del cubículo del baño. Sabía que tenía que ser fuerte y hacer frente a la situación y no podía permitirse permanecer escondido allí por más tiempo
Se lavó la cara con agua fría y miro su rostro reflejado en el espejo por un momento, viendo el dolor y la desesperación en sus ojos.
Salió del establecimiento angustiado dirigiendose a su casa en Sicilia donde en estos ultimos tiempos estaba compartiendo con Jimin

Mientras caminaba hacia su casa, su mente seguía llena de imágenes de lo que acababa de presenciar en el club. Las emociones mezcladas lo estaban volviendo loco, pero sabía que tenía que mantenerse calmado y pensar claramente para que nadie salga lastimado de ahí...

Cuando llegó a la casa y entró al hogar, sintió una punzada de culpa y tristeza nuevamente al recordar los eventos del día. Intentó mantener una expresión tranquila mientras cerraba la puerta detrás de sí, haciendo lo imposible por ocultar el caos emocional y mental que lo agobiaba en ese momento.
Se adentró en el hogar, dejando sus cosas en un lugar cercano a la puerta antes de dirigirse al salón, donde se detuvo por un instante y cerró los ojos, tomándose un momento para respirar profundamente y tratar de calmar su mente y cuerpo. A medida que permanecía ahí, sintió cómo las oleadas de emociones amenazaban con romper la frágil cáscara de tranquilidad que intentaba mantener, y cerró más fuerte los ojos mientras hacía un esfuerzo concienzudo por contenerlas
Se sentó en el sofá del salón, suspiro profundamente y se paso las manos por el rostro en un intento de calmarse. Su mente y emociones estaban enloquesidas después de presenciar la escena en el club. Sabía que tenía que hablar con Jimin y contarle lo que había visto, pero le pesaba el pensamiento de tener que hacerlo.
Unos minutos más tarde, el sonido de la puerta principal abriéndose resonó en la casa, indicando que Jimin ya había llegado. Yoongi cerró los ojos y tomó aire profundamente mientras esperaba su llegada. Escuchó cómo los pasos de Jimin se acercaba a él poco a poco hasta que finalmente entró al salón y lo observó sentado en el sofá.

"YOONGI?! QUE CARAJOS HACES EN ITALIA?!"
*dijo Jimin asustado*

*Yoongi se levantó del sofá en cuanto Jimin entró y avanzó hacia él, colocando sus manos gentilmente en sus hombros.*
"Jimin, escúchame. ¿Estás bien? ¿Estás herido o lastimado en algún lugar? " *Cuestionó con preocupación y desesperación en el rostro y la voz, mientras observaba fijamente a Jimin buscando heridas.*

"Jaja...no...¿porque piensas eso? Yo estoy bien Yoon..."

*Yoongi se dio cuenta de que Jimin estaba intentando evadir el tema y fingir que estaba bien a pesar de lo que había experimentado.*

"Jimin, necesito que me escuches. Necesito que me expliques qué pasó en el club. Quiero ayudarte...yo...no queria que vuelvas a ese lugar"

Le dijo con voz seria y un tono casi suplicante, mientras colocaba una mano suavemente en la mejilla de su novio.
Jimin bajó la mirada y se quedó en silencio, con las emociones claramente escrito en su rostro. Tomó aire profundamente y finalmente habló.

"Yoongi, no sé qué decirte... Fue un infierno ahí dentro. Los clientes, el jefe, todo fue tan horripilante y terrible".

*Dijo intentando contener las lágrimas mientras abrazaba a Yoongi y escondía el rostro en su pecho. Yoongi lo envuelve con sus brazos en un gesto protector y reconfortante.*

Yoongi escuchó atentamente las palabras de Jimin y sintió cómo su pecho se tensaba con la furia y la preocupación. Besó suavemente la cabeza de Jimin y apretó los brazos alrededor suyo. Mantuvo los brazos envolviendo fuertemente a Jimin en un intento de brindarle consuelo y apoyo.