Mareada y con dolor de cabeza, miré a mí alrededor... Había demasiado blanco para estar vivo. Con una de mis manos retome mis cansados ojos y me recosté sobre la cama.
Debía haber sido un gran sueño para sentir todo el cuerpo entumido... Tan rasgado, en parte. ¿Había tomado otra vez con los chicos?
Pero era raro que hubiera tomado de nuevo con los chicos, sí lo que parecía representar mí alrededor era más y más muerte... Un hospital. Lo era, escuchaba las camillas pasando a cada rato, sin un fin...
¿Me había dado una congestión alcohólica acaso?
Quizás lo fuera; de nuevo tomando mí tonta cobardía entre tragos... Sí logrará acercarme siquiera un mínimo a ella, sin que esos asientos rojos se interpongan... Sí logrará hablar con Enid... Esa chica rubia colorida y con un dialecto poeta.
No podía evitar sonreír al leer sus ensayos hacía la profesora Weems. Era una preciosa escritora, tan diestra, tan... Letrada.
¿Había soñado con ella otra vez?
Pero... Sí estaba en el hospital...
- ¡La deje en el vagón! - exclamé.
No podía haber perdido la oportunidad de nuevo, no podía llegar tarde otra vez.
Intenté levantarme, pero el cuerpo no me dio para más que estirar la pierna... Todo el cuerpo me había dolido como sí de un rayo se tratase. ¿Qué diablos me había pasado?
A mí lado se encontraba un control remoto... Claro, en cualquier hospital hay televisiones, creo.
Nadie me va a hacer caso sí llamó, deben estar muy ocupados... Pero necesito saber que sucede.
- ¡Enfermera! - la llamé.
Una joven de rojiza cabellera captó mí atención, o yo capté su atención... Cómo fuera, ella se acercó a mí con una tierna sonrisa en el rostro.
- Oh, linda, has despertado - mencionó - ¿Cómo te sientes? - me preguntó.
- Me duele el cuerpo, me duele la cabeza... Me duele todo - reí y relamí los labios - pero no sé porqué... ¿Sabe lo qué me pasó? - pregunté.
El rostro de la chica cambió por completo. ¿Qué sucedió?
- ¿No recuerdas nada? - negué con la cabeza - ¿Ni siquiera la explosión? - preguntó.
¿Explosión?
La chica no tardó en pasar a mí lado, tomó aquel control y encendió la televisión; tardó un tanto en encontrar una nota informativa que me destrozó por completo... Enid...
El pasado 11 de marzo, diez bombas explotaron casi simultáneamente en cuatro trenes de cercanías de Madrid. Los trenes estaban estacionados en las estaciones de Atocha, El Pozo y Santa Eugenia, en la calle Téllez...
- Atocha... - murmuré.
Mí Enid...
- ¿Te ha refrescado la memoria? - preguntó... No tuve nada más que asentir con la cabeza.
- Puede... ¿Puede decirme qué día es hoy? - pregunté.
- Es 15 de marzo - respondió - tuviste mucha suerte, linda - mencionó.
Tragué saliva. ¿Ella podía...?
- Una chica... Rubia... Ella llevaba una falda rosada... Se llama Enid... Enid Sinclair - la miré - ¿Está aquí? - pregunté.
La chica hizo una mueca... Una horrenda mueca.
- Eres afortunada, linda... Pero tú y otros dos hombres salieron dañados, el resto falleció - respondió.
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[WEDNESDAY] Jueves.
FanfictionCada mañana le miraba en las andaderas de esa estación, conmemorando aquel 11 de marzo en el qué la ví, con esas trenzas y esos colores opacos. Con su mirada sobre mí y su amor sobre las ataduras de mí ansiado corazón. Historia Wenclair. Los persona...