You Arrived

capitulo .16✨

Morgan

Con mi mochila colgando de un hombro, y me alejé del colegio, tomando la ruta menos transitada hacia la estación de autobuses.

El viaje en autobús fue un silencioso preludio a lo que le esperaba. Yo miraba por la ventana, observando cómo el paisaje urbano daba paso a estructuras más sombrías y formidables. Al descender, me encontró frente a la prisión donde se encontraba mi padre.

Tras una serie de controles y una espera que pareció eterna, fui conducida a la sala de visitas. Allí estaba él, mi padre.

La última vez que lo había visto, él estaba lleno de vida, sus ojos brillaban con un humor que podía iluminar incluso los rincones más oscuros de cualquier habitación. Pero hoy, él era una sombra de aquel hombre.

Sentado frente a mi, mi padre parecía perdido en sus pensamientos, su mirada fija en un punto invisible en la pared opuesta. Su expresión era una mezcla de tristeza y resignación, y por un momento, casi no lo reconoci. La alegría que solía rodearlo se había esfumado, dejando atrás solo el eco de la persona que una vez fue.

Papá," llame suavemente, esperando romper el hechizo que parecía tenerlo cautivo.

Las lágrimas comenzaron a brotar, trazando ríos salados por mis mejillas, mientras un sollozo silencioso se escapaba de mi pecho.

-Morgan," dijo él, su voz entrecortada por la emoción. "No llores por mí, por favor."

-"¿Cómo no voy a llorar, papá? Te necesito," confesé entre sollozos. "Te necesito fuera de este lugar."

-No puedo creer que estés aquí," continúe, mi voz temblando con cada palabra. "Esto... esto no es justo. Tú no mereces esto."

Mi padre levantó la vista, sus ojos encontrándose con los mios. "Morgan," dijo con firmeza, "no me gusta que vengas a este lugar. Hay muchas personas peligrosas aquí y no quiero que te expongas a eso."

-"Pero papá, yo..."

"Escúchame," me interrumpió, su tono suave pero urgente. "Pronto saldré de aquí. Todo esto es un malentendido, y se aclarará. No quiero que tu última imagen de mí sea entre estas paredes.

Aprete mis manos contra el cristal, mi determinación reflejada en mis ojos.

- "Haré lo que sea necesario para sacarte de aquí, papá. No puedo dejarte en este lugar."

Mi padre me miró con una mezcla de afecto y preocupación. "Morgan, mi niña, no quiero que te metas en esto. Es peligroso y complicado. No es tan simple como parece."

Sentí un nudo en la garganta. "No es justo," repiti, pero esta vez en un susurro.

La vida no es justa Morgan," respondió mi padre con una sonrisa triste. "Pero tienes que prometerme que vivirás tu vida plenamente, sin las sombras de este lugar oscureciendo tus días."

Cuando estaba a punto de responder las palabras de mi padre, de repente, un oficial de la cárcel se acercó a nosotros.

-"Lo siento, pero el tiempo de visita ha terminado," anunció con una voz que no admitía réplica.

mire al oficial, luego a mi padre, y asintió con resignación. -"Está bien," dije, con mi voz apenas audible.

Mi padre se puso de pie lentamente, su mirada aún fija en mi. -"Cuídate, mi niña," murmuró, antes de ser escoltado fuera de la sala.

Me quedé sentada, observando cómo la figura de mi padre se alejaba hasta convertirse en una sombra entre las sombras. Una vez sola, permiti que mis pensamientos volaran hacia la organización secreta con la que había estado colaborando. y yoestaba dando todo de mi para ayudar a sacar a mi padre de este lugar.