★ 𝅄 𝆬 BUTCH 4 BUTCH【 𝗛𝘂𝘀𝗸𝗲𝗿𝗥𝗮𝗱𝗶𝗼 】 𝆬 𝅄 ★

Capítulo dieciocho: Aliens blues

"¡No, por favor!"

"¿¡Qué carajo te pasa!?

¡Él no te hizo nada!"

"Psicópata."

"Monstruo."

"Bestia."

"Asesino."

"¡Eres un asesino!"

"Eres una maldita decepción."

"¿¡Qué mierda te ocurre!?

¡Si sigues así te vamos a enviar a casa!"

"No piensas con claridad,

es por eso que estás aquí."

"Nunca serás el héroe de nadie."

"Abre los ojos, ¡Estás mal de la cabeza!"

Alastor pareció curioso al respecto, sobretodo por la insistencia de Husk de no soltar su mano.

—¿Cómo cuales? —preguntó, alzando una de sus finas cejas.

El ya mencionado tomó aire, reuniendo la valentía para hablar. Sus iris brillantes se reflejaron en los rojizos del otro, un sentimiento de pena invadía los orbes del bartender, que finalmente se decidió a hablar.

—¿Si te lo digo tú prometes que... Seguirás viéndome de la misma manera?

El locutor parpadeó.

—¿Es tan grave? —rió nerviosamente.

Husk suspiró.

—Algo así. Es solo que no quiero seguir teniendo secretos contigo.

—Oh, bueno... —no sabía qué decir a este tipo de situación, puesto que no era alguien tan bueno para consolar a otros y de hecho solía alejarse de personas con estado de ánimo muy decaído—No creo que sea tan malo —se le ocurrió decir, algo incómodo.

• 🦌😾 •

—Vaya...

—¡Lo sé! Fui un imbécil inestable! —pasó una mano por su cabello, nervioso y a la vez aliviado.

Alastor no estaba muy impresionado respecto a los múltiples asesinatos que había realizado el otro "En nombre del país", ya que lo que más le llamaba la atención era ese peculiar remordimiento que parecía impregnar sus palabras. Tenía que aparentar sorpresa, aunque sea un poco. Pero no podía, inevitablemente, una emoción le recorrió las venas al percatarse de lo similares que eran. Las manos de ambos estaban manchadas con sangre de tanto culpables como inocentes, con distintas razones y excusas.

El joven locutor rió bajamente en un inicio antes de pasar a estruendosas carcajadas, llamando al atención del cantinero, que lo miró extrañado y enojado. La risa de Alastor siempre se ha caracterizado por ser fluida, suave, casi elegante pero ahora reía del júbilo cual maníaco.