Eres mi juego final

Partida doble PARTE 2

Taylor se quedó congelada al oír la noticia que le dio su mejor amiga, ¿A caso era una broma?, ¿Embarazada?, ¿Estaba embarazada?, quería mostrarse emocionada, pero sabía lo que todo eso podía conllevar.

—Sel, ¿En serio? — pudo hablar.

—Sí, lo juro—

—Pero... ¿Cómo? — estaba sorprendida.

—Tay, ¿De verdad?, pues teniendo sexo, obviamente—

—Oh, no, no— dijo riendo. —Yo no me refería a eso, ok, lo estás, bueno, entonces, ¡Felicidades!, sé lo mucho que has deseado ser madre, Sel, me alegro por ti, aunque no te voy a negar que estoy del mismo modo, aterrada—

—Sí... Estoy igual, estamos— volteó a ver a Ross, que se encontraba sentado en el borde del ventanal.

—Con razón te ves así de pálida, ¿Te encuentras bien? —

—Sí, bueno, no sé, tengo que realizarme varios estudios, no planeábamos esto ahora, justamente... Así que todo puede pasar, estúpidas pastillas— rodó los ojos.

—Selena Marie, los niños están conmigo—

—Oh, mala palabra, lo siento— rio. —Llevé el peor control natal—

—Te entiendo— bromeó recordando que le pasó casi lo mismo. —Estuve en Los Ángeles hace unas horas, pude haberte ido a ver, ¿Quieres que vaya a verte?, puedo ir si me lo pides—

—Estoy bien Tay, necesito un tiempo a solas, ya sabes... Para asimilar todo esto, quiero asegurarme de que todo marcha correctamente y de la mejor manera— suspiró.

—Bien, me está volando la cabeza ahora, ¿No te han revisado? —

—No—

—No puedes aplazar eso, así que, será mejor que lo hagas ya, irás con mi doctora, ¿Ok?, ahora mismo le digo a Ashley que te pase los datos y vayas ya—

—Ay, Tay, andarás peor que Ross, tal vez— rio.

—¿Cómo lo tomó? — no quería ser indiscreta, pero quería aliviar el sentir de su amiga.

—Hablaremos en su momento de eso, debo cortar la llamada, en cuanto tenga información de que todo va bien o mal... Te llamó, ¿Sí? —

—Ok— suspiró. —Cuídate mucho, ¿Sí? —

—Lo haré—

—Te amo, Sel—

—Te amo, Tay, adiós—

Cortaron.

—No puedo creer esto— Taylor dijo en voz alta, sus hijos la oían, pero no entendían nada. —¿Estoy embarazada al mismo tiempo que mi mejor amiga?, Dios mío, es una locura—

Travis entró, supo que la llamada había terminado porque Ross le mandó mensaje. —¿Todo mejor? —

—Sí, ¿Ya lo sabías? —

—Sí... Digamos que mi amigo está impresionado—

—Pues no debería, estuvieron teniendo relaciones sin la protección adecuada, no es una sorpresa que pase esto— se molestó.

—No, Tay, no malinterpretes, tú y yo hablamos durante la relación que tendríamos hijos, fue algo sorpresivo, no en el mejor momento, pero en los planes estaban, ellos, no lo sé, es un asunto privado, no sabemos que es lo que piensan y sus acuerdos—