Outside

Prólogo

Era un día aparentemente tranquilo como cualquier otro; el sol brillando el cielo, éste a su vez llenaba el paisaje con su vívido dorado e iluminaba el azul celeste del cielo; la suave brisa removía levemente las plantas extremadamente cuidadas de los jardines estratégicamente ubicados de las idénticas casa blancas; los niños hacían sus deberes luego de un día tranquilo en la escuela. Todas las refinadas casas de Golden Village, tranquilas y pulcras, ocultando todos los secretos de sus habitantes. La casa Hens en particular ocultaba mucho tras sus impecables paredes: La señora Hens, la adorable Irina Hens, no sabía cómo lidiar con la apatía de su esposo, ya no soportaba todas las tardes sola en casa, los fríos silencios cada vez que estaban solos en la misma habitación, la indiferencia en la cama... Ella en su desesperación había acudido a un sustituto para su esposo, alguien que si le prestaba atención. Las aparentemente perfectas hermanas tenían suficientes secretos como para llenar todo tipo de libros, los cuales Julianne sabía muy bien cómo usar para esconder sus reservas de alcohol, tenía un extraño don para esconder a la chica fiestera detrás de todas esas Biblias; Lauren Hens era una linda chica: inocente, amable, confiable... casi se podía creer que era virgen; Grace Hens, la cereza de la familia, la que no puede vivir si es la segunda en algo, la favorita de papá... la que tiene mas secretos. Grace es la confidente de todo aquel pobre atormentado que se ahoga en sus pensamientos, y por lo tanto también es la perdición de muchos. La linda y responsable Jillian Hens, no tiene ni idea de lo que sucede entre las paredes de su casa, desde su nacimiento siempre ha vivido en una burbuja de perfección en el que todos juegan su papel sin interferir con los demás; la clásica chica ingenua y mimada. Pero la oveja negra de todas la perras Hens es Zoe. Ella siempre fue diferente, mas morena que las rubias hermanas, menos perfecta en lo que hace que todos los que la rodean, mas aislada... Nunca la mas femenina, ni la mas atlética, ni tampoco la mas inteligente... Pero probablemente la mas resentida puede que sí. Y la mas astuta cuando le conviene.

El pobre Trent Hens no tiene la mas mínima idea del tipo de chicas que esconde en su casa. Aunque él no es un ángel de blanco; a Trent se le cayeron las alas hace mucho tiempo, algo que su secretaria sabe muy bien. Trent se cree el único con secretos en su familia; pero no sabe ni la mitad de lo que ocultan... En su mente todo es perfecto y normal, la vida que cualquiera soñaría, o hasta mataría por tener.