🍂El viento me guío hasta ti🍂 Kaedehara x Malereader (Omegaverse)

Prologo y Aclaraciones

Todo comenzó cuando conocí a ese Omega. Fue algo raro... el viento me llevó hasta él. Estaba en un bosque de Sumeru, la nación Dendro. De repente, una ráfaga de viento se descontroló. No era normal que ocurriera algo así, lo cual me sorprendió. Decidí seguir la dirección del viento durante varios minutos, hasta que finalmente se calmó. En ese momento, pude escuchar una suave risa. Cualquiera se habría asustado, pero la suya era tan suave, tan dulce y hermosa, que simplemente me encantó. Solo pude sonrojarme mientras la escuchaba, junto con una linda vocecita que provenía de algún lugar cercano.

Me asomé cautelosamente detrás de un árbol, y allí lo vi: al Omega más hermoso que había visto en mi vida. Su piel era blanca como la nieve, suave como el algodón. Su cabello rubio cenizo caía en rizos suaves por sus hombros, como un delicado abanico. Se veía tan... perfecto. Su cuerpo delgado, con una cintura marcada, parecía no medir más de 1.55 metros. La vestimenta que llevaba no parecía de ninguna nación en específico. De Mondstadt no podía ser, ya que su estilo no se asemejaba al de esa región. No parecía provenir de Liyue, Inazuma, ni Fontaine. Dudaba de que fuera de Natlan, ya que no la había visitado, y de Sumeru, ya que estábamos en su territorio. Y, bueno, Snezhnaya tampoco, ya que no planeaba ir allí y, sinceramente, no quería tratar con más arcontes estúpidos.

El Omega llevaba un top negro y unas mallas que cubrían sus piernas hasta los pies, semi-desnudos. Esa vestimenta me recordó a la arconte de esta nación, Nahida. Esa niña irritante... su voz era peor que la de Paimon. Simplemente desagradable, al igual que todos los arcontes.

Me quedé observándolo, analizando de dónde podría ser aquel Omega tan hermoso, aunque en mi cabeza solo pasaba un pensamiento una y otra vez:"Es perfecto." Nunca me había interesado en una pareja, siempre estaba sirviendo a la Shogun. Muchos omegas de Inazuma se me habían declarado, pero siempre los rechazaba. No me parecían atractivos ni en lo más mínimo, y sus olores solo me repugnaban. Sus presencias me molestaban, pero... él, con solo una mirada, sentí lo que nunca había sentido con otros. Incluso ahora, con el viento en mi contra, llegaba hasta mí un dulce olor a miel y flores. Estaba seguro de que ese era su olor, uno delicioso y agradable.

Quería acercarme, pero estaba nervioso. No quería asustarlo. Se veía tan tranquilo que temía que si me acercaba, huiría. No es que sea la persona más agradable de Teyvat. De repente, el Omega se dio la vuelta, y nuestros ojos se encontraron. Eso solo sirvió para sonrojarme aún más y admirar lo que podía de él. Sus ojos... eran de un tono celeste como el hielo, tan claros que parecían hechos de cristal fino. Reflejaban cada pequeño destello de luz. Su pequeña nariz, adornada con preciosas pecas, acompañaba sus mejillas sonrosadas, y sus labios brillaban como si tuviera un brillo labial. El Omega me sonrió, y yo intenté devolverle la sonrisa. Con un nudo en el estómago, me acerqué lentamente hacia él, y me senté justo frente a él, sin decir nada. Mi mirada cayó sobre su cintura, y pude ver su Visión: Cryo. Probablemente de Snezhnaya.

Lo observé por unos segundos hasta que él habló.

—Kazuha, ¿cierto? Eres de Inazuma, tienes Visión Anemo, conoces al viajero, eres fiel a la Shogun, odias a los arcontes, eres un Alfa, y has rechazado a todos los omegas que se te han declarado. Además, llevas varios minutos detrás de ese árbol observándome. ¿Me equivoco? —dijo con una sonrisa tranquila.

Me quedé sorprendido. ¿Cómo sabía todo eso de mí? ¿Acaso me conoce? Tal vez uno de esos omegas a los que he rechazado me recordaba... No, no podía ser. No rechazaría a un Omega como él. Bueno, a él.

—¿C-como sabes todo eso de mí? ¿Nos conocemos? —le pregunté, incapaz de ocultar mi sorpresa.

El Omega soltó una risita y me miró.

—No, no nos conocemos, tranquilo. Bueno, más o menos. Soy ____ amigo de la Shogun. Por eso sé tu nombre y lo de que eres fiel a ella. También sé de dónde eres y que conoces al viajero. Tu Visión la vi cuando te acercaste, y el resto... pues, piensas en voz alta, susurras mientras piensas. Tengo buen oído, así que supe que llevabas un rato detrás de mí.

Me sonrojé aún más. No sabía que estaba susurrando. Entonces, ¿él conocía a la Shogun? Hmmm... ¿será de Inazuma? Pero, bueno, la señorita Ayaka tiene Visión Cryo, no sería tan raro.

—Entonces, ¿eres de Inazuma? ¿Por qué nunca te había visto antes? Pensé que quizás eras de Snezhnaya, pero si eres de allí, ¿cómo conoces a la Shogun? —le pregunté, dudoso.

El Omega me miró y sonrió de nuevo.

—Muchas preguntas, ¿eh? Responderé todas. No, no soy de Inazuma, por eso nunca me has visto. Solo vengo a ver a la Shogun. De hecho, soy de Snezhnaya, y conozco a la Shogun porque soy el Arconte Cryo. Nos conocemos desde hace muchos años.

Hmmm, así que él era el Arconte Cryo. Pero no se comportaba como uno. No era nada desagradable. De hecho, me gustaba su apariencia, su voz, su olor... todo de él me agradaba, incluso más de lo que quisiera admitir.

—Oh, entonces eres un Arconte. No te ves como uno, sin ofender, pero te ves... muy simple.

Él soltó una risa suave y me miró.

—Tienes razón. Aquí me siento más cómodo así. En Snezhnaya, uso otra vestimenta.

Pasaron varias horas en las que estuvimos platicando y conociéndonos mejor. Esa fue la primera vez que me encontré con ____. Y con solo esa vez, con solo una mirada, me bastó para enamorarme de aquel Omega que me robaba los suspiros.

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Aclaraciones:

- La historia contiene contenido homosexual (aviso para los que no se dan cuenta).
- Kazuha es Alfa y _____ es Omega.
- Claramente, esto está basado en el Omegaverse.
- No está basado en el lore de Genshin por dos razones: no estoy al tanto del lore y no pienso investigar.
- En ningún momento Kazuha será "malo" o hará algo desagradable, porque soy main Kazuha y no pondré a mi hombre así.
- Comentarios ofensivos se pueden ir bien a la verga.
- Portada e imágenes hechas por mí.

Eso sería todo. ¡Se les quiere, bye!
Editado🌒💗