SombrA

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Gun abrió la puerta hacia el jardín consiente de lo tarde que llegaba, había planeado no asistir pero al final pudo más su sentimentalismo que su determinación a no enfrentar a Off, tenía miedo miedo a verlo y encarar su realidad.

Al entrar al jardín Gun se sintió estúpido en el costoso traje que Off le había mandado, todo el mundo iba más casual que el, por lo que no le sorprendieron las miradas sobre el, sin tener de otra se enmascaro con una sonrisa cordial pero completamente falsa he ingreso al festejo. Después de todo que más le quedaba.

-Gun hijo, que bueno que llegaste.

Gun sonrió genuinamente al oir la voz de la persona por la que estaba ahí, por la que dejó sus miedos de lado y decidió asistir.

- No me perdería por nada del mundo tu cumpleaños Godji- responde Gun acercándose a la mujer que lo había amado como si de la familia fuera... La abuela de Off.

- Oh cariño estás más delgado- comenta Godji dándole un abrazo y un beso en la mejilla a Gun- No deberías trabajar tanto. ¡Sabes que tu y Off deberían tomar unas vacaciones!- dice animada- mí nieto tampoco se ve muy bien- dice llevando a Gun hacia unas sillas un tanto apartadas del gentío.

- Jeje si supongo que debería tomar vacaciones- comenta Gun incómodo ante la mención de Off, más la idea de unas vacaciones, solo, le eran muy atractiva- pero la verdad es que estoy ansioso por restaurar la hacienda a su antiguo esplendor, no sabes Godji cundo termine podrás ir y disfrutar de ella como en tu niñez, ya estoy planeando todo- dice auténticamente emocionado.

Para Gun, quien sabía que pronto dejaría de formar parte de esa familia, era de suma importancia llevar a Godji a la hacienda familiar, una vez restaurada claro está. Gun deseaba con todo el corazón que Godji pudiera pasar una temporada ahí recordando lo que ella describía los mejores años de su vida y tal vez el aire fresco le ayudará a su cuerpo envejecido, era por eso que estaba trabajando día y noche por dejar a aquella hacienda con todas las comodidades que Godji requiere y merece.

- Ay hijo te lo agradezco, no sabes lo que he discutido con Off para que me lleve, pero solo obtengo negativas de su parte , tal vez tú puedas convencerlo, no creo que te cueste mucho trabajo en especial si sabe que piensas restaurar el lugar- dice Godji con un brillo aniñado en los ojos- ahhh! - suspira y toma la mano de Gun - no tienes idea de cuánto te agradezco que pienses en los anhelos de una vieja. Pero no deseo que te desgaste demasiado con esto,está bien, como sea no podré ir si no es hasta dentro de un mes que mí doctor regrese y lo autorice... Pero tal vez tu y Off si puedan ir y no se estrenar la hacienda, ver que todo está en orden- dice con una tono pícaro.

Gun se sonrojo ante la simple idea de ir y estrenar la casa con Off pero vasto recordar los últimos dos meses para salir de su absurda fantasía, no había un Off y el y ya no lo abría.

El había intentado todo, absolutamente todo y al final pese a saber que esto podía ocurrir y que lo perdería todo si no funcionaba se arriesgó ... Y perdió.

Gun suspiro y apretó suavemente la mano de Godji, mirando las arrugas de su cara, su cabello plateado cual preciosa luna y un nudo se le hizo en la garganta al recordar como en el pasado aquella mujer lo abrazo y consoló en sus peores días... Cuánto deseaba nuevamente ese consuelo.
Más no podía, no debía preocupar a Godji.

- No tienes nada que agradecer Godji, es lo menos que puedo hacer por ti y de lo demás ya veremos, aún no comienzo con la reconstrucción y no se cuánto tardaré - dice Gun sintiendo sus ojos que amenazan con llorar por lo que aparto la mirada de Godji.

Godji miro extrañada a Gun, sentía que algo no iba bien y el verlo ahí sosteniendo su mano la puso un tanto inquieta, más se calmo a si misma, todo debía estar bien Off está mañana por primera vez le había confesado algo que ella ya sabía hace años. Por lo que con una sonrisa maternal continuo su platica con Gun por un largo rato.