𝐻𝑎𝑠𝑡𝑎 𝑠𝑖𝑒𝑚𝑝𝑟𝑒 | Megumi Fushiguro

𝐻𝑎𝑠𝑡𝑎 𝑠𝑖𝑒𝑚𝑝𝑟𝑒.

Con la mirada de su psicologa viendo cada uno de sus movimientos, Cairo jugueteaba con sus dedos ─ Los seres humanos son casi 50% microbianos eso significa que la mitad de las células nuestro cuerpo no nos pertenece. Le pertenecen a los organismos microscópicos que se arrastran dentro de todo. nosotros no existimos. no eres real, eres ficticia. ─ su voz rápida y nerviosa resonó en los oídos de la adulta.

─ Lo se, Cairo. me lo has repetido en varias sesiones. ─ habló con amabilidad, sabia que estos comportamientos eran ¨normales¨ padeciendo su condición. ─ Podríamos probar con terapia de exposición de nuevo. ─ sugirió ─ No, no es lo mío.

Cairo mantenía su mirada en el suelo mientras respondía sus preguntas. ─ ¿Has estado tomando los medicamentos?

Si, algunas veces. ─ Dudó ante su respuesta, no quería un sermón por parte de su doctora. ─ Debes tomar el medicamento, todos los días para que funcione. Lo sabes... ¿En que piensas?

─ Estaba pensando que no es justo que tu y las demás personas estén viviendo sus vidas sabiendo que están cubiertas de bacterias y no les importe.

─ No me gusta la palabra normal.

─ Y a mi no me gusta las palabras que usas para describirme en tu libreta, pero.. si te identificas..

─ Si, describen tu lucha pero dicen mucho mas que tu TOC. Eres lista, creativa, divertida.

─ Si, ya entendi. Basta. ─ Detuvo los "elogios" que le dio su psicologa.

─ ¿Entonces quisieras ser como la gente normal?

─ No. ─ Los ojos conectaron con los de la doctora. ─ Mataría por ser como la gente normal.

...

Destapando su jugo natural, Cairo estaba desayunando con su amiga en la preparatoria. ─ Me corte el cabello y me lo teñí. El color cobrizo es algo que no espere que me sentara tan bien.

─ Te queda estupendo. ─ Sonrió tomando el líquido.

─ Hola chicas ─ Llegó su compañero Yuji saludándolas, en su mano tenía una hoja con su arte impresa en ella esperando los elogios. ─ Es nueva.

─ Uh.. Está lindo ¿Quien es? ─ La conversación de Yuji y Nobara se hizo inaudible para Cairo, un zumbido en los oídos empezó a atacar y su piel empezó a llorar. ─ ¿Cairo? ─ Llamó Nobara. ─ ¿Ya escuchaste hablar de Fushiguro? ─ Miró nuevamente a Yuji dándose cuenta del estado en el que se encontraba Cairo.

¿Por qué hace ruido? Es mucho ruido. Ruido abdominal excesivo. Dolor de estómago no es síntoma de una infección a menos que sea ... gastroenteritis viral. No, ¿Si? Estoy lo suficientemente hidratada. ¿O no? Deberé entrar al hospital.

El hospital. El hospital, envuelto en bacterias que podrían atracarme. Proteus sp, Enterobacter..

Estoy sudando, estoy caliente. Tengo fiebre, la fiebre es uno de los síntomas- No. No tengo fiebre.

─ Cairo. ─ Nobara por fin pudo captar su atención, Yuji la miraba con las cejas entre ceñidas ante el momento. ─ ¿Está bien? ─ Asintió. ─ Bien, ¿Puedes recogerme en la tarde? Necesito salir de compras y podemos comer algo en camino.

...

Sentadas en la barra de un restaurante de comida rápida, las chicas habían pedido dos hamburguesas sencillas con gaseosa.

─ No sabía que Taylor lanzó nuevo álbum. ─ Revisó su teléfono.

─ Si, he escuchado un par de canciones ayer en la noche. ─ Sonrió a la chica que le había traído su pedido empezando a comer. ─ ¿Por qué Megumi está en las noticias?

─ Ya te lo dije, de eso hablamos en la tarde con Yuji. ¿Me prestas atención? ─ La miró buscando sus ojos ya que los de Cairo estaban en las noticias luego de ver al ojiazul en su noticiero.

El millonario Fushiguro Toji, envuelto en tratos ilegales y estafas está desaparecido. La policía está ofreciendo 100 mil dólares por alguna noticia importante de su paradero o hallazgo del hombre. Se sabe que Fushiguro tiene dos hijos llamados Megumi y Tsumiki, los jóvenes esperan el regreso de su padre y así para enfrentarse a las autoridades.

─ ¿100 mil dólares? ¡Es una locura! ¿Sabes lo que haríamos con 100 mil dólares?

─ ¿Desaparecido? ─ Miró a Nobara. ─ Como se estará sintiendo Megumi..

─ Alto. ─ Detuvo su amiga. ─ Lo conoces ¿No? ─ La miró con los ojos entrecerrados. ─ En un campamento cuando teníamos 12. ─ Nobara chocó sus manos. ─ Podemos buscar pistas.

─ ¿Pero como? ... oh.. ─ Nobara imitó el gesto pero en forma de pregunta. ─ Cuando éramos niños, Megumi me invitó a su cumpleaños y estábamos tomando fotografías, dejamos una cámara en un árbol.

─ ¿Por qué harían eso? ─ Tomó su bebida extrañada.

─ Porque éramos niños y su padre lo regañó diciéndole "La privacidad es lo más importante, si no tienes eso no tienes nada" ¿Quién le dice eso a un niño jugando en su cumpleaños? ─ Mordió su hamburguesa.

─ Ahora se sabe la razón. ─ Posó su bebida en su bandeja. ─ Hay que buscar esa cámara y reclamar la recompensa.

Próximamente.