Lee Namra tiene una misión, descifrar si el sospechoso del caso es culpable o si sólo es un empresario.
Shi Oh tiene otra misión, vengarse.
Ambos sin saber esto del otro. El se casa pensando que es una chica ingenua y ella se casa pensando en arre...
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Nam Ra
Trataban de devolvérmelo a mí. No me dejaban entrar por más que rogara y gritara. Mis manos temblorosas pasaban por mi cabeza. Entra quien no quiero ver. Mi madre.
—— Nam Ra... — lo miré —
—— ¿Qué haces aquí? ¡No tengo tiempo para esto! — iba a desquitar todo lo que sentía con ella, pero el doctor me interrumpió —
—— Señora Lee... — lo miré sonriendo comenzando a enloquecer —
—— ¿Ya puedo entrar? Mi esposo está esperándome ¿verdad? Tengo que hablar con él. Nuestro hijo está esperando en casa.
—— No sobrevivió... — cerré mis labios al oír sus palabras — Lo siento...hicimos los que pudimos.
—— ¿Qué? Pues...Pues, sigan intentándolo. Deje de perder el tiempo hablando conmigo. — exploté en llanto de nuevo — ¿Qué está esperando? ¡Sálvelo!
—— Lo sentimos...
—— ¡Maldita sea, es mi cumpleaños, siga intentándolo! ¡El es lo único que tengo! — empujé al doctor quien suspiró con la cabeza baja —
—— Lo sentimos...Señora Lee... — iba a ir detrás de el, pero mi madre me sostuvo de la muñeca —
—— ¡Suéltame! ¡Salve a mi esposo! ¡Se que usted puede hacerlo! ¡Sálvelo! — caí al suelo y mi madre me abrazó con fuerza —
—— Nam Ra...lo siento... — traté de soltarme bruscamente, pero no funcionaba — Nam Ra... — grito sin escucharla y me sacude con fuerza — Está muerto...Lo siento... — me quedo paralizada escuchándola —
—— No...No lo está...
—— Iré por agua...quédate aquí, esto le hace daño a la bebé. — se levantó y se marchó. Sigo en el suelo negando —
Esto era una tontería. El estaba vivo, debe estar molesto conmigo y por eso hace esto...si...es eso...
Escuché unos aplausos que me hicieron levantar la mirada aún en el suelo.
Mi falso padre sonreía y aplaudía
—— Bien hecho, Nam Ra... Lo lograste...acabaste con el asesino de tu hermano...mis felicitaciones...ahora eres un orgullo para mí. — me comentó con una sonrisa y un tono sarcástico — Bien hecho... — me levanté temblando todo mi cuerpo —
—— ¿Qué? — el río y escondió sus manos en sus bolsillos—
—— Haz completado la misión. — mis ojos se inundaron de lágrimas cuando recordé que alguien más le disparó —
—— Fuiste tú... — susurré paralizada. El sonrío y me dió la espalda sonriendo. Se estaba marchando cuando fui detrás de él — ¡Infeliz, mal nacido! — antes de que entrara al auto, comencé a empujarlo y golpearlo con llanto — ¡Asesinaste a mi esposo! ¡Fuiste tú! — sonriendo sostiene mis muñecas. Suelto su agarre de una y la uso para seguir golpeándolo — ¡Devuélvelo a mi! ¡Devuélvemelo! ¡Tráelo de vuelta! ¡Voy a matarte! ¡Lo haré con mis propias manos! — ignoró el hecho de que todos me miran, me toma de ambos brazos y me acerca para decirme al oído —
