VACACION3S | ONE SHOT JENLISA

PARTE 1

Bangkok - Tailandia
Pov. Jennie.

—Amor ¿estás segura? — le pregunto terminando de subir su pequeña maleta en la camioneta.

—Sí amor ¿por qué? ¿Tú no?

—No sé — admito insegura

—Cielo solo serán unos días

—Sí, viajando por carretera y sin rumbo — especifico ¿acaso soy la única que no ve la lógica en esto? Es una locura.

—Amooor, será divertido — insiste con su carita de cachorro tierno

Cierro los ojos y camino hacia la puerta del conductor — Sí divertido, solo espero que no nos maten o nos coman los lobos en el camino.

Pone los ojos en blanco y susurra — exagerada. Aquí no hay lobos.

—Te oí Lisa — le aviso y se encoje de hombros nerviosamente mientras me muestra una sonrisa culpable. Niego con la cabeza — ¿llevas todo?

—Sí, solo debemos pasar al súper por unas botellas de agua y ya está

Suspiro y asiento.

Estos meses habían sido pesados para ambas, pero a ella le habían pegado más duro. El trabajo estaba yendo perfecto y nuestros proyectos estaban saliendo mejor que nunca, pero había un problema, no teníamos tiempo para nosotras, supongo que por eso acepté en un principio su idea loca de aventura.

Decidimos darnos una semana de vacaciones, una semana en donde nos olvidaríamos de todo y simplemente disfrutaríamos la una de la otra. Claro que mi idea era más quedarnos en casa viendo algo y sin salir o viajar algún sitio cercano para descansar, no enrumbarnos en un viaje por carretera a quién sabe dónde.

—Genial, entonces vámonos — digo subiendo a la camioneta mientras acepto mi destino y la veo subir mi lado.

—Amor, cambia esa cara. Nos vamos a divertir — me repite acercándose a mi, toma mi rostro y me acaricia delicadamente con su pulgar. Junta nuestras frentes y mira a mis ojos directamente y yo no puedo apartar la mirada. Ella sabe lo que hace, siempre lo hace, me desarma por completo y en un par de minutos me tiene totalmente ganada — hazlo por mi ¿sí?

Suspiro cerrando los ojos para liberarme por un segundo de su embrujo — ¿y por quién más crees que lo estoy haciendo? — le pregunto y abro los ojos para verla de nuevo sonriendo de lado— debo quererte mucho.

Una sonrisa aparece adornando su hermoso rostro.

—Te amo ¿lo sabías? — me pregunta con sus ojitos brillantes mordiéndose los labios.

—No —niego haciendo un puchero jugando con ella.

Sonríe levantando una ceja — ¿ah no?

—No

—Bueno, en ese caso… — se acerca más subiéndose encima de su asiento para darse más impulso y me acorrala contra el espaldar de cuero amarillo. Sonrío.

Ella mira mi boca y es instintivo, muerdo mis labios y veo los suyos pero no me muevo. Quiero que ella lo haga. Se inclina despacio sonriendo y me besa lento pero con fuerza, con necesidad y al mismo tiempo con una dulzura que me lleva directo a ver las estrellas —…te amo, mi Nini.

Sonrío suspirando contra sus labios y la acerco de nuevo para robarle un besito más — y yo a ti, Lili.

Salimos por la carretera con rumbo al supermercado y después de comprar el agua y unos cuantos dulces más, Lisa puso la ruta en el GPS para salir de la ciudad y dirigirnos al primer punto. Era una playa muy poco concurrida pero que quedaba a casi 5 horas de donde estábamos.