Tulipanes Morados

—¡Feliz cumpleaños frente de marquesina!

Sakura había invitado a una pijamada a Ino para pasar los primeros momentos de su cumpleaños junto a ella, sus padres deberían estar durmiendo ¿Quien estaba despierto a las 12:00 a.m. en Konoha un jueves? Solamente ellas dos parecía.

—Gracias Ino puerca— se dieron un pequeño abrazo y la rubia sacaría de su mochila una caja.

—No es la gran cosa pero cuando lo ví automáticamente pensé en ti.

Desplegó el moño rosa que ataba la caja, cuando la abrió se encontró con un hermoso collar con forma de flor de cerezo, era de un cristal rosa y en su centro tenía su inicial.

—Esto es precioso, ¿dónde lo conseguiste?

—Shh es un secreto. Ven te lo voy a poner — ambas kunoichis estaban enamoradas del collar, Ino sabía que nadie podría superar su regalo —¡Quedaste fabulosa!

—Jeje, comamos un poco de pastel. Voy a llevar algunas rebanadas al entrenamiento ¿Te imaginas que Sasuke-kun me regale algo?

—Te va a regalar una patada si es un entrenamiento.

—¡Ino!— siempre bromeaban con cosas así entre ellas, tenían un humor raro según Shikamaru.

—JAJAJA, ¡Hubieras visto de tú cara!— la cumpleañera le pegó en la cabeza —En fin ¿De que son estas fotos?

—Tienes como siete fotos en tu manos, si no me muestras como que quizás no se cuál estás viendo...

—Mmm estás tres me llaman la atención.

Los protagonistas de todas las fotos eran los compañeros de la pelirosa, Naruto y Sasuke, en la primera parecían observar un festival, la segunda que estaban en alguna playa y la tercera era bastante graciosa ya que sus compañeros estaban viendo la camara desde arriba.

—Todas esas fotografías la saqué cuándo fuimos a una aldea vecina, nuestro cliente era un importante fotógrafo y me regaló una camara suya vieja, ¡estaba tan entusiasmada que saque foto a todo!

—Seria tranquilamente yo... Pero dame el contexto, dudo que Sasuke-kun se preste para que juegues a ser fotógrafa.

—Estábamos viendo un festival de esa aldea, ambos parecían muy felices y saqué la foto.

—Eso suena algo psicópata.

—¡Cállate! ¿Quieres que te cuente o no?

—Jaja, continúa.

—Te explicó para que no te pierdas, salimos por la mañana con el fotógrafo, al medio día llegamos a la aldea y me dió la camara, por la tarde fuimos a la playa y saque esta foto...

—¡Y en la noche la primera!

—Eso estaba por decir yo— Sakura la miro irónicamente mal —igualmente en la playa paso algo extraño...

—¿Extraño como qué?

—Yo no me podía meter al agua, estaba en mi periodo y no le dije a nadie del equipo, los acompañe con la parte superior de mi bikini y una falda debajo.