No volveré a perder nunca más (Beyblade X fanmade)

El origen del todo

En los inicios de los tiempos, estalló una guerra entre el inframundo y cielo debido al desacuerdo de la última creación de Dios, los humanos, el inframundo los consideraban un cargo más para ambos reinos mientras que el cielo pensaba que era un gran avance en cuanto a otros modelos impuestos anteriormente, como eran los dinosaurios, pero la discusión se debió a algo que le dieron a los humanos que a los otros no, el razonamiento, mientras que los animales actuaban por instinto, los humanos poseían algo que por ahora ninguna otra creación poseía, excepto ellos. Esto provocó una gran guerra en la cual el cielo resultó ser ganador, pero el inframundo no se iba a dejar ganar tan fácilmente, ellos esperaron hasta la creación de algo tan popular que no iba a desaparecer cuando la moda se acabase, algo fácil de manipular, como un objeto, la creación de los beyblades marcó el inicio de su plan, dejando parte de sus espíritus dentro de aquellas peonzas y logrando manipular más discretamente a los humanos, para contrarrestar esto, el cielo bendijo algunos beys que iban a ser destinados a diferentes portadores de corazón puro, siendo uno de los más importantes Gingka Hagane con su Pegasus, aunque hoy en día el poder bendito de los beys se debilitó considerablemente, eso no significa que no dejen de resultar útiles, el blader purificador que más impactó a todos en esta época fue el Chico Maravilla, Valt Aoi, el cual recientemente purificó a una persona que será crucial para el futuro, el sufrimiento pasado por ti no será en vano, Bird Kazami, lo más sorprendente de él es su afán de ayudar voluntariamente con la bendición otorgada por nosotros, siendo este el ayudante del cielo más fiel de todos.

Arcángel Gabriel

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