Yo en Naruto

Parte 6 Entrenamiento

Cuando note como los chakras de ambos ninjas de la niebla se alejaban suspire aliviado, habíamos superado la situación de estrés. Mientras el resto de mis compañeros genin aún se recuperaban de la impresión por el combate, me dirigí a donde estaba Kakashi. El cual se había bajado la bandana y estaba apoyado en un árbol, resollando.

—¿Quiere apoyarse en mi sensei?

—Me gustaría poder negarme.

Le sonreí antes de dejar que se apoyara en mi hombro.

—¡Venga chicos, tenemos que llevar a Tazuna a su casa!

Y empecé a caminar a un ritmo calmado, los otros adolescentes me siguieron algo extrañados.

—Con las heridas de Zabuza dudo que pueda moverse antes de una semana. Por lo que dudo que nos ataquen antes. Chicos, toca hacer entrenamiento.

Los genin asentimos con diferentes grados de convencimiento ante las palabras de Kakashi.

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Sakura suspiró aliviada cuando llegaron a la casa de Tazuna, no habían sido atacados en lo que quedaba de camino. Por lo que tal vez podrían tener uno o dos días de descanso. Había tenido emociones suficientes para una semana.

—¿Cómo piensas entrenarnos Kakashi-sensei?

La pelirosa contuvo un estremecimiento, lo último que le apetecía hacer ahora era entrenar. Entendía que era importante, pero le dolía todo el cuerpo por la tensión en la que había estado. No quería imaginar el estado en el que estaban Sasuke y Naruto después de pelear.

—Después de cenar lo comentaremos. Ahora necesitamos descansar y dejar que los músculos se destensen.

—Como digas sensei.

"Menos mal que Roger no es el líder. Si lo fuera dudo que tuviéramos tiempo de descanso."

A Sakura, Roger le caía bien, era algo callado, y cuando hablaba lo hacía de forma directa y honesta, incluso cuando había que ser más delicado. Pero siempre había sido amable con ella y nunca se había burlado de nadie. Eso junto con su mirada adulta y su personalidad que le recordaba ligeramente a Sasuke, hacían que el chico fuera bien visto por la pelirosa.

Aunque eso no evitaba que supiera que era un adicto al entrenamiento, sospechaba que la razón era porque veía a Sasuke como su rival, y claro, Sasuke era un genio, mientras que él era alguien normal, por lo que tenía que poner mucho esfuerzo para poder igualarlo.

Se presentaron ante Tsunami, la hija de Tazuna y comieron la comida que ella les ofreció. Fue bastante abundante, a pesar de ser pobre en variedad.

Mientras comían, la mujer preguntaba cómo era la vida en la villa, Naruto se lo contaba con todo lujo de detalles, y lo que no alcanzaba a explicar Kakashi o Roger lo completaron.

—¿Y cómo es la vida en familia de los civiles?

Los ninjas se tensaron, tanto Sasuke como Naruto eran huérfanos, hablar sobre el tema era como una especie de tabú en el equipo. Solo Roger y ella misma tenían familia, y según Sakura sabía, su compañero ya estaba buscando un lugar para independizarse.

—Es bastante tranquila, fuera de lo que se podría pensar por ser una aldea ninja. Simplemente hay más gente con bandanas en la cabeza, un comercio un poco más abundante y algunos diplomáticos o embajadores. Fuera de eso apenas se diferenciaría del tipo de vida que antes podríais tener aquí.

Roger fue pragmático, fue rápido y lo resumió lo mejor posible para evitar incomodar a sus compañeros de equipo. Tsunami asintió, completamente ajena a las miradas perdidas de Naruto y Sasuke.