Cap.21

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Los días avanzaban y la preocupación de louis seguía al no saber nada de su hermano, tenía miedo de que algo le pudiera pasar o si estaba enfermo, los días de felicidad en el castillo se habían ido junto con Isaac, extrañaba ver a su hermano por los pasillos corriendo y escuchando los gritos furiosos de las cocineras por alguna travesura de su hermano, Louis se encontraba en su habitación recién levantado y mirando al techo mientras pensaba y llenaba su cabeza de malos pensamientos cuando de pronto Harry entra a la habitación con una gran sonrisa con Henry caminando y tomando su mano a su lado derecho y un muy sonriente August en los brazos de su padre

—¡Harry!—exclama Louis, sorprendido y complacido por la visita inesperada pero bienvenida.

Harry, con su habitual calma y optimismo, se acerca a su esposo con Henry a su lado y August en brazos. —¡Buenos días, mi amor!— saluda Harry, con una sonrisa radiante que ilumina la habitación. —¿Cómo has amanecido?—

Louis se siente aliviado al ver a su esposo y a sus hijos . La preocupación que había estado pesando sobre su hermano  parece disiparse un poco ante la presencia de su familia. —¡Buenos días, cariño!— responde Louis, con una sonrisa genuina. —Amanecí bien, gracias. ¿Y tú? ¿Cómo están mis pequeños príncipes hermosos y preciosos?—pregunta levantándose y sentándose en la cama para luego tomar a su pequeño August en brazos y abrazarlo. 

Los pequeños ríen al ver a su padre Lou y Henry corre en hacia el para subirse a la cama y acostarse a su lado, Harry que observaba la escena sonrie e imita la acción de su pequeño, abraza a Louis y luego deja besos en sus labios y rostro. —Estoy muy bien amor, estoy feliz y enamorado cada vez mas de ustedes mi bella y perfecta familia amor, sin duda no puedo ser mas feliz con ustedes mis amores. —dice Harry abrazando a Henry en su pecho.

 Louis sonríe ante la escena, sintiendo el cálido abrazo de su familia y dejando que la felicidad momentánea los envuelva a todos. Aunque la preocupación por su hermano aún está presente, el amor y la alegría que siente al estar con su esposo y sus hijos le brindan un respiro en medio de la incertidumbre.

—Yo también estoy feliz de estar con ustedes, mi amor —, responde Louis, devolviendo el abrazo de Harry y dejando un beso en la frente de August, quien ríe con alegría en los brazos de su padre.

La habitación se llena con risas y caricias, creando un ambiente de calidez y amor que parece disipar cualquier sombra de preocupación. Henry se acomoda entre Louis y Harry, disfrutando de la cercanía de su familia mientras August juega felizmente en los brazos de su padre.

—Gracias por estar aquí, por traer tanta luz a mi vida —, murmura Louis, mirando a su esposo con amor y gratitud. —Necesitaba esto, necesitaba estar con ustedes. —

Harry le sonríe con ternura, comprendiendo el peso de las preocupaciones de su esposo pero decidido a brindarle todo el apoyo y amor que necesite. —Siempre estaremos aquí para ti, mi amor. Juntos podemos superar cualquier desafío que se nos presente —, asegura, apretando la mano de Louis con ternura.

Louis asiente, sintiendo cómo el amor de su familia le da fuerzas para enfrentar lo que sea que el futuro les depare. En ese momento, se siente agradecido por tener a Harry y a sus hijos a su lado, recordándole que, incluso en medio de la incertidumbre, hay luz y esperanza en su vida.

La serenidad de la escena se ve interrumpida por los toques en la puerta, seguidos por la entrada de un consejero del castillo. Su anuncio corta el ambiente cálido y familiar, llenando la habitación de una tensión repentina.

Louis y Harry intercambian una mirada preocupada ante las palabras del consejero. —¿Qué sucede?— pregunta Louis, sintiendo cómo la preocupación vuelve a apoderarse de él.

The song of the moonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora