El Loto Rojo de Cang Qiong

2. Biblioteca

- No es necesario que el joven Lan se tome esta molestia, este maestro puede pedir a otro discípulo que haga la ronda de vigilancia esta noche. No es adecuado que un discípulo invitado se encargue de este tipo de tareas.

Después del banquete de bienvenida, Gongyi Xiao se había acercado al Líder de Secta Omega para decir que uno de los discípulos que debían de hacer las rondas de vigilancia en los alrededores de Qing Jing esa noche había tenido un accidente y se encontraba indispuesto en Qiang Cao. Casualmente esta conversación había sido escuchada por Lan WangJi que pronto se acercó para ofrecer su ayuda. 

- Sin problema, shifu pidió que ayudara al maestro Shen - respondió el joven Alfa. 

- Entiendo - Shen Jiu recordó lo mucho que Lan Qiren se enorgullecía de ese discípulo suyo, pensó que tenía muy buenas razones para hacerlo y sintió envidia porque de lo único que podía sentirse orgulloso era de que sus hijos fueran capaces de mantenerse con vida un día más - En tal caso, agradeceré la ayuda del joven Lan. Pediré al maestro de Qing Jing que encuentre un reemplazo lo más pronto posible. Algunos discípulos aún se deben de estar encargando de los preparativos para las clases de la mañana, la única restricción que tienen es que no debe de salir de sus cumbres, sin excepciones. El castigo es impuesto únicamente por el Señor de su respectivo Pico o los Líderes de Secta.

El joven Alfa sólo hizo una reverencia en respuesta de haber recibido toda la información y camino por el camino indicado. Shen Jiu soltó un suspiro, realmente tenía un mal presentimiento.

- Xiao Jiu parece estar estresado - comentó su esposo, Yue QingYuan llevaba en brazos a Yue Hua y Xue Yang que se habían quedado dormidos en algún momento. Shen Jiu recibió a Yue Hua en sus brazos para ayudar a su esposo - ¿puede este esposo hacer algo por Xiao Jiu? 

- Has hecho suficiente, estos hijos tuyos heredaron la costumbre de meterse en problemas, será tu culpa que muera de una desviación de qi. - acaricio el cabello de Yue Hua en sus brazos - sólo espero que HuaHua no de tantos dolores de cabeza a este padre como sus hermanos lo hacen. 

Yue Hua frunció el ceño en sus sueños, no había escuchado nada de la conversación de sus padres. Yue QingYuan simplemente sonrió al ver a su esposo caminando con su hijo más pequeño en brazos, lo siguió camino a su casa en Qiong Ding. 

*

El apuesto Alfa de ojos claros y ropas blancas lo había detenido en su camino de regreso a su habitación en Qing Jing, tuvo que apresurarse en ocultar las jaras de alcohol que llevaba. 

- Todos los discípulos deben regresar a sus habitaciones durante el toque de queda - detuvo al Omega, su apuesto rostro serio hizo que Yue Ying se sintiera con ganas de molestarlo.

- Oh! ¡Hermano WangJi! - saludo, ocultando las jaras de alcohol detrás suya - ¿qué haces aquí? ¿estas patrullando? oh, no te preocupes, mis padres me llamaron y regreso de Qiong Ding.

Lan WangJi frunció el ceño. Fijo la mirada en las jaras de alcohol que el Omega llevaba mal ocultas detrás suya, Yue Ying tuvo que reprimir la risa al ver como los ojos del Alfa se entrecerraba un poco. Sabía que podía meterse en problemas si aquel Alfa lo reportaba con su hermano (o peor, sus padres), terminaría limpiando las escaleras o ayudando a An Ding hasta que su hermano más pequeño se casara y tuviera hijos, pero... siempre era divertido molestar a un Alfa tan apuesto como Lan WangJi. 

- Oh... ¿esto? ¿quieres beber conmigo, Hermano WangJi? - preguntó mostrando ambas jaras, Lan WangJi frunció aún más el entrecejo si era posible. 

- No se permite alcohol en la cumbre Qing Jing - recordó una de las muchas reglas que rara vez se cumplía en su cumbre.

- Esto no es Gusu - se quejó con un puchero - las reglas se rompen todo el tiempo, además... no queremos molestar a mi hermano y al Señor Luo ¿cierto? - preguntó guiñando un ojo y sonriendo, pudo ver como el Alfa se enfadaba aún más - esta bien, Hermano WangJi, puedes hacer una excepción conmigo.