Rekindling love (Pedro Pascal)

Cap-10

Después de la conversación con Ana, me di cuenta de que necesitaba hacer algo drástico para sanar y seguir adelante. Pedro y yo habíamos compartido tanto, pero también habíamos causado mucho dolor. Era hora de tomar una decisión definitiva.

Me dirigí al apartamento de Pedro, con el corazón pesado y la mente llena de determinación. Cuando abrió la puerta, vi en sus ojos una mezcla de esperanza y temor. Antes de que pudiera decir algo, lo interrumpí.

—"Pedro, tenemos que hablar."—

—"Holly, por favor, pasa."—

Entré y me senté en el sofá, sintiendo el peso de nuestras historias compartidas. Pedro se sentó frente a mí, su expresión llena de ansiedad.

—"Pedro, después de todo lo que ha pasado, he decidido que necesito alejarme. No solo de ti, sino de todo esto. Necesito empezar de nuevo, en otro lugar."—

Sus ojos se abrieron con sorpresa y dolor.

—"Holly, no, por favor. Podemos arreglar esto. Podemos intentarlo de nuevo."—

—"Pedro, lo intenté. Pero cada vez que te miro, recuerdo el dolor que causamos. No puedo seguir así. Es mejor para los dos si nos separamos y seguimos adelante con nuestras vidas."—

Pedro asintió lentamente, sus ojos llenándose de lágrimas.

—"Entiendo, Holly. No quiero que sufras más. Si esto es lo que necesitas para ser feliz, entonces lo aceptaré."—

Me acerqué y le di un abrazo, sintiendo una mezcla de tristeza y alivio. Era el final de un capítulo, pero también el comienzo de algo nuevo.

—"Cuídate, Pedro. Espero que encuentres la paz y la felicidad que buscas."—

—"Lo mismo para ti, Holly. Te deseo lo mejor."—

Me alejé del apartamento, con la sensación de que, por primera vez en mucho tiempo, había tomado la decisión correcta. Sabía que sería difícil, pero estaba lista para empezar de nuevo.

Más tarde, me encontré con Javier en nuestro café habitual. Necesitaba hablar con alguien que entendiera la profundidad de lo que estaba pasando.

—"Javi, he decidido irme. Necesito un cambio, algo nuevo."—, le dije, mientras removía mi café.

Javier me miró con preocupación y comprensión.

—"Holly, lo entiendo. A veces, alejarse es la única manera de sanar."—

—"Ojalá nunca me hubieras presentado a Pedro. Todo esto ha sido tan complicado y doloroso."—

Javier suspiró, tomando un sorbo de su café.

—"Lo siento, Holly. Nunca imaginé que las cosas llegarían a esto. Pedro siempre fue un buen amigo, y pensé que también lo sería para ti. Nunca quise que sufrieras."—

—"Lo sé, Javi. Y sé que no es tu culpa. Pero no puedo evitar desear que las cosas hubieran sido diferentes."—

—"Te entiendo. Solo quiero que sepas que siempre estaré aquí para ti, sin importar a dónde vayas o qué decidas hacer."—

Le sonreí, sintiendo una calidez en su apoyo incondicional.

—"Gracias, Javi. Significa mucho para mí."—

Pasamos el resto de la tarde hablando de mis planes y recordando los buenos tiempos. Javier me ayudó a ver que, aunque había dolor en el pasado, también había habido momentos de verdadera amistad y amor.

Esa noche, empecé a empacar mis cosas. Era un proceso lento y doloroso, pero cada objeto guardado en una caja era un paso hacia mi nueva vida. Sabía que dejar atrás a Pedro y todo lo que representaba era lo mejor para ambos.

Finalmente, cuando terminé de empacar, me senté en el suelo de mi apartamento vacío y respiré profundamente. El camino por delante era incierto, pero también estaba lleno de posibilidades. Estaba lista para enfrentar lo que viniera, con la esperanza de encontrar paz y felicidad en mi nueva vida.

Me levanté, sintiendo una determinación renovada. Era hora de dejar el pasado atrás y abrazar el futuro, sin importar lo que trajera. Estaba lista para seguir adelante.