Astromelia | Rivers x ElMariana

Astromelia (final ❤️)

Me vino un ataque de pánico y tuvieron que sedarme para evitar alguna complicación cardíaca debido a que mi corazón había quedado un poco debilitado por la sobredosis. Al despertar, me informaron que tendría que tomar antiansiolíticos y que no podría comer cosas ricas hasta nuevo aviso. ¡Pinche tipa! Podía olvidar su desmadre, incluso que me exhibiera, pero... ¡Esto! ¡Dejarme sin lo que me hacía feliz! Eso jamás ¡Jamás se lo perdonaría!

Luego de que me dieran esa horrible noticia, noté que Osvaldo ya no estaba aquí. Tuve un poco de miedo, después de todo, él escuchó lo que dijo Félix. Sentí un gran alivio al verlo entrar con una jarra de agua.

—Pensé que habías huido —murmuré nerviosa.

—¿Por qué? —dijo con calma, pero me dí cuenta cómo evitaba mirarme.

—Oye... lo que dijo Félix... yo creo que...

—Tiene razón —me interrumpió.

—¡Claro que no!

—Si es mentira... ¿Por qué tuviste otro ataque? —replicó seriamente.

No supe qué responder, el ataque fue por eso.

—Félix tiene razón y yo tengo miedo de que te lastimen otra vez —miré su rostro y me sentí culpable por haber colapsado.

—Solo fui débil... —Osvaldo resopló.

—¿Débil? Samantha casi te matan... por mi culpa —acarició mi cara y luego quitó su mano—, tal vez debo alejarme de ti.

—¿Qué? ¡No! Eso no es justo —le reclamé.

—Por supuesto que lo es, ya no quiero causarte más problemas, siempre... todo... desde el principio... ha sido mi culpa —el odio de su voz no era hacia ella, era a él mismo. ¿Se estaba culpando por todo?

—¿Cómo qué desde el principio? No te refieres a...

—¡A todo Samy! ¡A todo! Yo no debería estar aquí —ví como poco a poco se alejaba hacia la entrada.

—No te atrevas, Osvaldo... por favor —le supliqué.

—Solo quería saber que estabas bien —sonrió—, lo siento... no puedo arriesgarme, creo que es lo mejor.

—¡Esto no es justo! —Unas lágrimas cayeron.

—Quiero que estés bien, no puedo volver a verte sufrir así, por favor, compréndeme.

Abrió la puerta y se fue mientras yo lloraba de impotencia. Sentí que debía darle su espacio, pero aún así me dolía que se alejara. Sé que esto debía ser muy fuerte para él. Verme así, casi perderme, saber que Sofía apareció en mi vida por su culpa. Todo eso seguro lo estaba martirizando por dentro.

Tenía sentimientos encontrados, pues gran parte de mí estaba triste porque él se alejara, pero también había un pequeño alivio que me hacía sentir culpable. Una parte de mí, sí creyó en lo que dijo Félix y... aunque no quería distanciarme para siempre de Osvaldo, tal vez, por ahora, era lo mejor para ambos.

Ama y Ari me cuidaron mientras estuve en observación. Pasaron tres días y él todavía no me visitaba, rechazaba mis llamadas y no respondía mis mensajes. Aún así, se comunicaba con Ama para saber de mí y gracias a eso supe que estaba con Chapa. No quiso ir con su familia; él le ofreció asilo porque su dirección no era pública y no iba a estar en casa.

Estaba segura de que solo necesitábamos hablar, que ambos teníamos miedo y eso era normal. Solo debíamos superarlo y seguir, por lo que intenté contactarlo, pero todavía rechazaba mis llamadas: "Todavía no estoy listo" se disculpó. Las chicas quisieron animarme, pero no podía, necesitaba arreglar todo y deseaba verlo. Durante este tiempo, entendí que no quería que las cosas terminaran y que alejarnos no era necesario, pero Osvaldo aún parecía temeroso.