Algo Contigo // Segunda Parte // Meddison

La Gran Disputa

Narra Meredith

Es el primer día de escuela, ese día caótico en el que corremos de un lado a otro. También es el primer día para Addie, luego de tener una disputa con Catherine, ella terminó redoblando su apuesta y compró el hospital en su totalidad. Ahora es la jefa, y se vé increíble al mando.

- Mami, no encuentro mis zapatos - dijo Bailey mientras yo terminaba de peinar a Zola.

- Busca otros zapatos, mamá compró muchos pares la semana pasada - contesté, intentando mantenerme concentrada en el peinado.

- Está bien - se fué al cuarto para buscar sus zapatos y cuando estaba poniendo la última liga en el cabello de mi niña, escuchamos un grito agudo que venía de la cocina.

- ¿Qué fue eso? - preguntó ella y ambas corrimos escaleras abajo para ver qué pasaba.

- ¡¡Eres la mejor mamá del mundo!! Te amo, te amo, te amoooo - gritó Emily mientras saltaba y abrazaba a Addie con todas sus fuerzas.

- ¿Qué pasó aquí? - pregunté con mis manos en la cintura.

- Mamá me compró un celular - dijo ella con una emoción inmensa.

Miré a Addison molesta, ésto no es lo que habíamos acordado. Se acercó a mí y quiso comprar mi perdón con sus besos mentirosos.

- Sé que querías esperar un poco más, pero creo que está lista - dijo, mirándome a los ojos.

- Seré cuidadosa, no aceptaré solicitudes de extraños, atenderé todas sus llamadas y no lo usaré en clases - dijo Emily, rogando para que accediera a dejárselo.

- No quiero que te desveles usándolo - dije seriamente.

- No lo haré, lo apagaré antes de dormir - prometió, usando sus lindos ojitos para convencerme, es igual a su madre.

- Bien, confío en tí, puedes quedartelo - dije, haciendo que me atacara con una ola de abrazos y besos.

- Son las mejores - exclamó, dándonos un abrazo a ambas.

- ¿Yo puedo tener un celular? - preguntó Zozo.

- No, tú tienes 11, tendrás que esperar - dije, dándole un abrazo de consuelo.

- Tal vez logre convencerla - le dijo Addie con un guiño.

- No, no lo harás - contesté, recibiendo sus besos, no me va a convencer, pero disfruto mucho de sus labios.

- Encontré mis zapatos ¿Ya nos vamos? - preguntó Bailey, está muy emocionado por su regreso a clases, es el único niño de 8 años que se emociona tanto por volver a la escuela.

- Ya casi, Ellis está terminando su desayuno- dijo Addie viendo cómo la más pequeña de la casa compartía su fruta con el gato.

- Cariño ¿Estás lista para empezar el preescolar? - pregunté mirando a esos lindos ojitos pícaros.

- Siiii - exclamó contenta.

Ellis tiene sólo 3 años, es la bebé de ésta casa, hoy empezará a ir al preescolar y eso me pone un poco nerviosa. Es una niña muy dulce y tierna, pero también adora las travesuras. La bajé de su silla y busqué su mochilita para que estuviera lista.

- ¡Vamos! No podemos llegar tarde el primer día, muévanse, todos al auto - exclamó Addie, moviendo a nuestra pequeña tropa hacia la entrada.

- ¿Estás nerviosa por tu primer día, jefa? - pregunté, notando su ansiedad.

- Un poco, me harán una entrevista cuando decidan qué pasará con el puesto y luego debo inaugurar el laboratorio de investigación genética, todo debe salir perfecto - dijo a toda velocidad, eso significa que se muere de nervios.