𝙎𝙤𝙡𝙤 𝙦𝙪𝙞𝙚𝙧𝙤 𝙦𝙪𝙚 𝙨𝙚𝙖𝙨 𝙩𝙪

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Conozco a Javon desde que éramos niños prácticamente, me mudé a Atlanta cuando tenía 7 años, y en mi primer día de escuela lo conocí, algo tan característico de él era que se portó sumamente amable y amigable conmigo.

Ese mismo día había conocido a su gemelo, Jaden, que era casi igual a él en el aspecto de personalidad, y físicamente podía distinguirlos por la pequeña línea que Javon tenía en la ceja.

Jayla estaba más que encantada de tener una amiga más, recuerdo que desde el día uno todos me hicieron parte de su vida, y ahí comenzó una amistad entre los Walton y yo.

Fue a partir de los 12 años que me di cuenta que en realidad estaba enamorada de Javon, Jayla lo sabía y constantemente me molestaba al respecto, y aunque siempre me animaba a confesar mis sentimientos, nunca quise hacerlo.

Llevaba tanto tiempo guardando mis sentimientos que podía decir que con cada día que pasaba se iban haciendo más y más fuertes, era imposible no enamorarme de él, era la persona más amable y generosa que conocía.

La voz de Jayla me fue sacando de mis pensamientos, me quité uno de los auriculares para poder escucharla mejor

–Mamá dice que la cena ya está lista, vamos–

Jayla salió de su habitación bajando las escaleras seguida de mi, el día de hoy a diferencia de otros días había estado demasiado distraída y pensativa

Me senté a la mesa en silencio, mientras los demás hablaban entre sí en un ambiente completamente distinto al mío.

Estaba sentado justo a lado de Daelo, aún era muy pequeño para comer por sí solo, así que Jessica era quien se encargaba de asegurarse de ayudarlo.

–Hailey, Hailey–

Jayla estaba moviendo una de sus manos a modo que pudiera mirarla.

–¿Me pasas la catsup?–

Le pasé el envase de catsup y continué con mi cena, solamente que esta vez el ambiente había cambiado

–¿Está todo bien Hailey?– preguntó Jessica

–¿En dónde está tu mente?– esta vez me preguntó DJ

Jayla me preguntó de forma burlona esperando una respuesta, ella sabía perfectamente en qué pensaba.

Una pequeña risa nerviosa salió de mis labios.

–No es nada, tengo muchas cosas en la cabeza pero no es importante–

–¿Piensas en un chico?– Jayla preguntó

Esta vez todas las miradas se posaron en mi

–No, de qué cosas hablas–

–¿Tienes novio?– me preguntó Jaden

–¿Tienes novio y no me lo contaste? ¡Soy tu mejor amigo!– esta vez hablo Javon

–¡Exacto! ¿Por qué no se lo contaste? Es tu mejor amigo– volvió a hablar Jayla

–Bueno basta, déjenla tranquila– los reprochó Jessica

–No tengo novio, es.. asuntos de casa, es todo–

Esta vez el ambiente volvió a ser silencioso, no era un silencio incómodo, pero se sentía extraño.

La cena continuó con total normalidad, trate de alejar mis pensamientos de mi cabeza e intentar disimular un poco.

Más tarde, ya era hora de ir a casa, luego de haber guardado todas mis pertenencias en mi mochila volví a abajo.

–Gracias por haberte quedado a cenar– se acercó Javon

–Me agrada quedarme a la cena en tu casa, tu madre cocina delicioso–

–¿Vendrás mañana?–

–Tal vez–

Javon hizo un puchero que hizo que sonriera.

Me despedí de todos ahí antes de salir

–¿Estás segura que no quieres que te llevemos a casa?– me preguntó DJ

–No, prefiero ir caminando, pero gracias–

–Hailey, sabes que puedes acudir a nosotros en cualquier momento y puedes quedarte aquí las veces que quieras, las puertas de nuestra casa están abiertas para ti–

Jessica era como una segunda madre para mí, ella y DJ siempre me habían tratado como una más de su familia.

Le sonreí amablemente y después negué con la cabeza.

–Muchas gracias, en verdad, pero no quisiera causar molestias–

–Para nada cariño, ¿segura que estarás bien?–

–Muy segura, gracias por la cena–

Me despedí con la mano y emprendí mi camino a casa, un suspiro salió de mi, me sentía abrumada, ya no sabía cómo manejar mis sentimientos y creía que en cualquier momento podría salirse de control, no quería que Javon se fuera de mi vida por eso.