Algo Contigo // Segunda Parte // Meddison

Pedido de Ayuda

Narra Emily

Hoy fue un día desastroso, una niña de mi salón empezó a tener fuertes dolores en su abdomen, estuvo mal durante toda la mañana, pero ahora parecía haberse puesto aún peor.

Casi nunca hablamos, sólo cruzamos miradas de vez en cuando, realmente no tiene amigos de nuestra edad. Se junta con chicos más grandes, siempre está en las sombras y desaparece apenas llega la hora de salir, aún así, me preocupó mucho verla en ese estado.

Decidí acercarme a ella al ver que nadie se interesaba por ayudarla. Huyó al baño de mujeres y la seguí para poder hablar y averiguar lo que estaba pasando.

- Hannah ¿Estás bien? ¿Necesitas que llame a alguien? - pregunté, mientras ella se encerraba en un cubículo del baño retorciéndose de dolor.

- Estoy bien, vete - respondió cortante, para apartarme de la situación.

- No estás bien, sólo quiero saber si necesitas algo - insistí, pegando mi mano a la puerta para que no se sintiera sola.

- ¡Lárgate de aquí, fenómeno! No necesito tu ayuda - gritó dándole un golpe a la puerta que me hizo retroceder.

Sus amigos mayores y ella siempre me ven raro, me han llamado así otras veces, pero no me importa nada de eso ahora. Quise mantenerme al margen, hasta que un hilo de sangre se escapó por debajo de la puerta y mi corazón empezó a latir con mucha fuerza.

- ¡Hannah! Déjame entrar ¿Qué ocurre? - exclamé, entrando en pánico, la puerta no se abría, estaba atrapada ahí dentro.

- Déjame, yo puedo sola - dijo, antes de desmayarse y caer al suelo golpeando su cabeza con un fuerte estruendo.

Forcejeé hasta abrir aquella cerradura y la tomé con todas mis fuerzas para sacarla de allí, necesito saber que está bien. Por lo menos respira, su corazón late, pero sigue perdiendo mucha sangre que viene de su entrepierna. No es sangre de período, es algo más, necesito hacer algo.

Tomé mi celular y le marqué a mamá, tengo sangre en mi ropa y ella no despierta, no sé qué más hacer.

- Hola, cariño ¿Está todo bien? - preguntó, sorprendida por mi llamada repentina.

- Mamá, necesito tu ayuda, Hannah está sangrando demasiado, está inconsciente y no puedo despertarla, por favor, ven - rogué, con un nudo en la garganta y mis manos temblorosas.

- Amor ¿Quién es Hannah? - preguntó mientras yo intentaba hacer que ella reaccionara.

- Es mi compañera, mami, ven rápido, tengo miedo - dije, empezando a llorar por la desesperación, siento que está muriendo en mis brazos.

- Tranquila, mi vida, voy en camino, llevaré una ambulancia, intenta hablar con algún profesor, todo va a estar bien - dijo, ayudándome a calmar mi respiración, sé que ella puede hacer algo por Hannah, necesito que esté aquí.

Narra Addison

Pedí una ambulancia y me apresuré para llegar a la escuela cuánto antes, mi niña me necesita. Apenas pisé ese lugar, choqué con la profesora de matemáticas de Emily, estaba muy alterada y corrió hacia mí al verme.

- Doctora Montgomery, necesitamos su ayuda, hay una niña inconsciente en el baño de mujeres - exclamó con total desesperación mientras intentaba mantener a los niños lejos de aquella escena.

Guié a los paramédicos y me encontré con mi hija, estaba abrazando a su compañera e intentando hacer que recuperara la conciencia.

- Emily, ya estoy aquí, ella va a estar bien, la vamos a atender - dije, intentando sacarla de su estado de shock, es algo demasiado fuerte para una niña de 13 años.