NOCHE 6

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Pao llevaba todo el día cansada. Por más que durmió esa mañana, no lograba descansar.
Por la tarde quería quedar con Milo para contarle todo sobre esa última noche, pero estaba demasiado cansada.
Hasta a la hora de comer le costaba mantenerse despierta y comió muy lento, cuando ella siempre había comido deprisa.
Su abuela lo notó y le preguntó si estaba bien, a lo que ella solo respondió que no había podido dormir en toda la noche.
Su abuela la dejó echarse una siesta por la tarde en el sofá, y se durmió 3 horas seguidas.
Se sentía mejor, pero aún estaba cansada y le dolía el cuerpo.
Fue al baño nada más despertarse de su siesta y se miró la tripa.
Tenía una cicatriz del Scooper, se notaba que había sido una herida grave, pues era una cicatriz grande y oscura en algunas partes.
Se tapó de nuevo con la camisa suspirando, y se fue a su habitación.
Estuvo dibujando unas horas.
Cuando llegó la noche, decidió intentar entrar por su pantalla de nuevo.
Cuando vió que iban a llegar las 12 de la mañana, encendió su videojuego. Tenía la luz apagada para que su abuela no notase que estaba aún despierta después de estar cansada todo el día, pero encendió la televisión y conectó la consola.
Dejó el juego en la parte de siempre y se subió al escritorio.
Apoyó sus manos en el escritorio, generando unas pequeñas interferencias.
No tenía muchas esperanzas de encontrar a Mike de nuevo, después de todo, ya habían pasado las cinco noches, ya no había razón para que regresase allí.
Apretó las manos hacia dentro, pero no lograba transpasar la pantalla.
De repente, notó que la superficie en la que estaba apoyada se volvía cálida y tomaba relieve.
Cuando se quiso dar cuenta, ese relieve eran manos que estaban entrelazandose con las suyas.
Intentó apartarse asustada, pero antes de poder hacerlo, alguien salió de la pantalla dándose un cabezazo contra ella.

-¡Au! -se quejó Pao, tambaleándose hacia atrás y a punto de caerse del escritorio.

-¡Woah...! -exclamó quien estaba saliendo, agarrandola del brazo para que no se cayera. -¿Qué demonios estabas haciendo?

Pao miró hacia la persona. -¡Mike! -exclamó abrazándole.

-Déjame salir del todo antes de atosigarme. -pidió Michael, que tenía aún medio cuerpo dentro de la pantalla.

-Ah si, claro. Perdona. -dijo ella apartándose.

Mike salió del todo de la pantalla y se puso de pie en el suelo.
Pao se le lanzó encima para abrazarle.

-¡Nunca pensé que me alegraría tanto de verte! -exclamó ella, aunque al tocarle notó un fuerte dolor en la tripa y se separó de él. -Au...

-¿Qué tal estás? ¿Te sientes mejor que ayer? -preguntó Michael.

-Muchisimo mejor. Aunque me sigue doliendo la tripa. -dijo Pao levantándose la camisa. Tenía las vendas de la otra noche, pero ensangrentadas.

-¿Pero cómo te hiciste eso? -preguntó Michael.

-Ehh... no se me ocurre ninguna buena excusa que puedas creerte. -admitió ella. -Scooper. Por suerte no estaba suficientemente cerca como para que me sacase las tripas jeje. Solo para lanzarme volando.

-¿¡O sea qué sí fue con el Scooper!? Ay madre, ¿¡cómo es que no te has muerto!?

-No sé, pero bueno, estoy bien. ¿Y tú qué? ¿Qué haces aquí? Ya han pasado cinco noches. 

-¿Y qué?

-¿Cómo que "y qué"? Vamos a ver, tus juegos se llaman "Five Nights at Freddy's", que se traduce literalmente como "Cinco Noches En Freddy's". -argumentó la chica como si fuese algo evidente. -Ya han pasado las cinco noches, se acabó, ¿no?

-¿Por qué se iba a acabar? No es como si tuviesen un plazo fijo para matarnos. -respondió Mike. -Su objetivo era escapar, por eso venían a por nosotros. Si no se libran de nosotros, saben que no ibamos a dejarles escapar, además necesitan un disfraz para pasar desapercibidos. Y si, ese disfraz es nuestro cuerpo. ¿Qué te hace pensar que por haber pasado cinco noches van a parar de intentar matarnos?

1// Cinco Noches Fuera de Freddy's Sister LocationDonde viven las historias. Descúbrelo ahora