Feliz cumpleaños - Tomjake/Jam

Feliz cumpleaños

Tom, no sé por dónde empezar. He intentado llamarte y enviarte mensajes, pero no has respondido. No sé si escucharás esto, pero necesitaba hablar contigo, aunque sea a través de este tonto mensaje de voz. Siento mucho que las cosas hayan terminado como lo hicieron. No he dejado de pensar en ti, en nosotros, en lo que podríamos haber sido.

¿Sabes? Nunca se lo he dicho a nadie, pero la lluvia siempre me pareció hermosa, antes porque ahora, cada vez que la veo, no puedo evitar pensar en aquel día lluvioso cuando estuvimos tan cerca el uno del otro por última vez, sintiendo el calor de tu pecho bajo mi rostro. Tus abrazos y sonrisas eran mi refugio.

Lloro cada vez que recuerdo nuestro lugar especial, donde nos dimos nuestro primer beso y prometimos ser mejores, por ti, por mí, por nosotros...

Me odio por lo que pasó. Si yo no hubiera sido un idiota contigo, nuestra historia podría haber sido diferente. Cualquier situación hubiera sido mejor que esta, y eso es porque entre tú y yo, no hay ningún tipo de situación, no existe nada. Porque simplemente te diste cuenta de lo idiota y estúpido que puedo ser y elegiste dejarme.

Pero también te odio, porque no cumpliste nuestra promesa. Cuando dijimos que nos daríamos un tiempo para mejorar, realmente creí que podríamos encontrar el camino de vuelta el uno al otro. Pero tú optaste por ser un cobarde que huye de los problemas. Entiendo que todos tenemos nuestros problemas, nuestras formas de lidiar con el dolor. Pero, Tom, yo merecía al menos una explicación. Me merecía saber por qué te fuiste, por qué me dejaste solo en la oscuridad. Quería gritarte, exigir respuestas de una vez. Pero ¿de qué serviría? No estás aquí para escucharme, y probablemente nunca lo estarás. La confianza que tenía en ti, en nosotros, está destrozada, y yo también. Me rompiste el corazón de una manera que nunca imaginé posible.

Estoy enojado, Tom. Muy enojado. Porque no merezco esto. Nadie merece esto. Me dejaste con todas estas preguntas, con todo este dolor. Me siento traicionado, abandonado. Como si todas nuestras promesas hubieran sido una mentira.

He intentado convencerme de que tenías una buena razón. Que algo grave te pasó, o que necesitabas tiempo para ti mismo. Pero cuanto más pasa el tiempo, más claro se vuelve que elegiste irte. Que preferiste desaparecer en lugar de enfrentarme y decirme la verdad.

Cada vez que miraba mi teléfono, esperaba ver tu nombre, un mensaje, una llamada. Pero nada. Era como si nunca hubieras existido. ¿Estoy loco acaso?

Me dejaste solo, hundido en mi dolor, sin un cierre, sin respuestas...

Dime que ya no me amas y me obligaré a dejar de amarte.

Dime la verdad aunque me duela, por favor. Déjame oír tu voz una vez más, no me importa si la usas para decir cuánto me odias. Solo quiero oírte de nuevo.

Te odio, te odio, ¡te odio, Tom! Pero me odio más a mí, porque sé que sigo amándote después de todo lo que pasó.

Este sentimiento no es nuevo para mí, he pasado por una ruptura antes... ¿entonces por qué duele tanto? Esta presión en el pecho que me acompaña día y noche, me matará algún día, pero no será asi, yo seré más rápido.

Porque ya no sé cómo seguir viviendo solo.

Todos los días son igual de grises, sin emoción ni color. Me encuentro en un pozo que estoy llenando con mis propias lágrimas. Pero yo no sé nadar, y voy a ahogarme. Moriré en la miseria, sin nadie a mi lado a quién le importe.

Ya te lo he dicho antes, pero nunca hubo respuesta de tu parte...

Miriam ha muerto.

Miriam había sido mi ancla, mi luz en la oscuridad. Su sonrisa podía iluminar cualquier habitación, y su risa era el sonido más dulce que conocía. Pero en una fría noche, todo cambió. Un accidente de tráfico se la llevó de repente, y me quedé con un vacío que parece imposible de llenar. La muerte de Miriam es, fue, y será un golpe tan brutal que sentí como si una parte de mí hubiera muerto con ella. No pude despedirme de ella, ¿es acaso una maldición? Tampoco pude hacerlo con mi abuela.

¿Realmente te importa? Por favor, al menos finge que te importa.

Desde que te fuiste, mi vida ha sido una espiral descendente. Intenté ser fuerte, intenté seguir adelante, pero cada día se siente más pesado que el anterior.

¿Sabes lo que se siente? Es como si estuviera cayendo en un abismo sin fondo, sin una cuerda a la que aferrarme. Pero, aunque no lo creas, estoy esperando tocar el suelo de una buena vez, así dejaré de sufrir más, quiero dejar de hacerlo.

Quiero que sepas que siempre te quise. Incluso ahora, con todo lo que ha pasado, te quiero. Tal vez eso sea parte del problema. Pero no puedo evitarlo.

Quiero agradecerte, Tom, por los buenos momentos que compartimos juntos. Los recuerdos de nuestras risas, nuestras conversaciones profundas, y los momentos de complicidad son preciosos para mí. Siempre apreciaré esos momentos, incluso en medio de este horrible dolor.

Gracias por amarme, aunque no haya durado tanto como me hubiera gustado.

Pero aún te amo, Tom. Pero también no puedo continuar con esta carga emocional sin tu apoyo, sin tu presencia aquí a mi lado.

Ya no puedo más. Lo siento.

Voy a terminar con todo.

Estoy con una soga al cuello, a punto de saltar. La soga raspa un poco mi cuello, pero pronto dejará de doler.

Estoy nervioso, siento mi corazón salir de mi pecho. Si sigue así, moriré de un paro cardíaco y no como lo planeé. Sería una muerte tonta, ¿no lo crees, Tom?

Espero que te vaya bien en la vida, que tus inseguridades desaparezcan y consigas un lindo novio que ames y te ame, te lo mereces.

Te amaré por siempre...quizás también te odie por siempre.

Odio hacerte esto en tu cumpleaños, realmente disculpame.

Feliz cumpleaños, Tom, por cierto.