Entre notas [TERMINADA]

Capítulo 26- Singing in the rain

El agua fría de la ducha cayendo sobre la cabeza de Jungkook apenas calmaba el calor abrasador que se había adueñado de la ciudad de Seoul, pero tampoco le importaba demasiado ¿Por qué iba a hacerlo, si había pasado la mayor parte del tiempo en las últimas dos semanas desnudo junto a su novio?

Cuando supo que iba a ser la primera vez probando el sexo para Taehyung, asumió como una gran responsabilidad darle el tiempo que necesitase, cuidarle como a su príncipe, tratarle con la delicadeza de una pieza de museo...Pero Taehyung, para su sorpresa, tenía otros planes. O más bien un solo plan: Volverle absolutamente loco. Y lo estaba consiguiendo.

La puerta del cuarto de baño abriéndose sacó a Jungkook de sus pensamientos, viendo a través de la mampara translúcida una sombra acercándose con sigilo. Sabiendo quien era, Jungkook jugó la carta de hacerse el idiota con una sonrisa en los labios, esperando pacientemente a que el intruso hiciese lo que había planeado.

Por momentos, Jungkook se sentía como un papá león viendo a su cachorro aprendiendo a rugir a pesar de que por el momento solo fuese un maullido, animándole a continuar con una mirada orgullosa. Taehyung aún estaba en la fase de explorar todo lo que ese nuevo mundo tenía para ofrecerle,y vaya si estaba motivado.

— ¡Hola! —dijo Taehyung abriendo la mampara de la ducha rápidamente y colándose de un salto en la ducha con él. En su cara se reflejaba la ilusión por la travesura que estaba haciendo, y Jungkook no tuvo el corazón de corregirle.

— Vaya, vaya, a quién tenemos aquí...—susurró Jungkook, rodeando la cintura de su novio con su brazo para meterle bajo el agua con él.

— ¡¡Ah, está helada!! ¿Pero cómo puedes ducharte así? —chilló Taehyung echándose a reír.

— Bueno, ya has venido tú a caldear el ambiente...—susurró Jungkook en su oído, haciendo que Taehyung se riese juguetonamente.

— No sé de qué hablas, yo solo venía con la inocente intención de ahorrar agua—dijo Taehyung.

— Sabes que hay un espejo detrás de ti y estoy viendo la botella de lubricante que tienes a tu espalda, ¿verdad, señor inocente? —dijo Jungkook con una media sonrisa orgullosa.

Taehyung se dio la vuelta para comprobarlo, y su cara de sorpresa reflejada fue suficiente para darse cuenta de que había sido descubierto. Pero al intentar volver a mirar a Jungkook, sintió sus brazos rodeando su cuerpo inmovilizándole parcialmente.

— Así que tienes ganas después de lo de anoche —susurró Jungkook sugerentemente en su oído.

— Bueno, no creo que lo que siento presionando contra mi nalga izquierda sea el bote de champú, ¿eh? —respondió Taehyung con una media sonrisa.

— Nadie ha dicho que yo no esté más que listo para otra ronda, precioso—respondió Jungkook— A lo mejor me tienes que enroscar de los pies como a un tubo de pasta de dientes, pero ten por seguro que no te voy a dejar salir de esta ducha sin que tengas lo que has venido a buscar.

De improviso, Jungkook mordió el cuello de Taehyung, haciendo que éste perdiese momentáneamente la fuerza en las piernas. Pero ahí estaban sus fuertes brazos para sostenerle mientras se recreaba un poco más en saborear la piel ligeramente salada de su hombro. Taehyung se fue perdiendo poco a poco en la sensación de intimidad, toda su piel erizándose con los escalofríos que estaba sintiendo.

— Eres irresistible, cielo—susurró Jungkook en su oído, al tiempo que introducía dos dedos en la entrada de su novio—Wow, eso ha entrado muy fácil.

— Ah, ¿sí?...

— Ahá...—confirmó Jungkook, arrebatando la botella de lubricante de la mano de su novio— Y saber que aún estás dilatado de nuestro jueguecito de anoche, y que aún vuelves a por más, activa algo muy animal en mí.