Esposado Y atados

Capitulo 👮‍♀️24

Rayanne tomó la manzana y le dio un mordisco. Estaba tan sumergido en sus pensamientos sobre todo en lo que Mattie le había dicho, que se olvidó de que se había quedado a solo con mile.

Él, en silencio y con la mirada perdida, le quitó la manzana y le dio un enorme bocado.

-Bueno, ahora es cuando me dices lo mal padre que soy -dijo mile devolviéndole la manzana a Rayanne.

Si alguien le podía decir la verdad, era el.

-Yo nunca te diría eso. Por lo que he visto hasta ahora, eres muy buen padre.

-¿De verdad? -aquello era una sorpresa para él-. Entonces, ¿de qué estabas hablando con Mattie?

-Ella está preocupada por ti, por Bennie y por vuestras discusiones sobre ella. Quiere que yo sea su madre su padre para hacer a Bennie feliz. Ella piensa que eso solucionaría el problema... Mile sacudió la cabeza con preocupación.

-Ha estado preguntando por una madre durante días, de hecho, desde que volviste a la ciudad. Siento haberte metido en esto.

-No te preocupes. Me gusta Mattie y me gusta charlar con ella por las mañanas.

Aun así, Mile no estaba muy seguro de ser un buen padre. Su propio padre lo había abandonado nada más nacer y nunca tuvo la oportunidad de conocerlo. Su madre había muerto justo un año antes de que él conociera la
existencia de Mattie.

-No te preocupes por la niña, Mile -añadió Rayanne suavemente después de un rato-. Todo va a salir bien.

Entonces Rayanne Nattawin hizo una cosa que a él lo sorprendió. Se inclinó un poco y lo besó en la mejilla. Fue un beso puro, sincero. No había nada sexual en él, Mile le tomó la mano.

-Vamos, ayudante Nattawin Rayanne Garrett. Vístete, ya es hora de que nos pongamos a trabajar -dijo mile levantándose y saliendo de la habitación.

Después de unos minutos, Rayanne estaba listo. Bajó las escaleras para encontrarse con mile. Se había puesto un par de vaqueros blancos increíblemente ajustados que resaltaban su figura. Una camisilla blanca y chaqueta vino Y su sombrero Mile no podía evitar dejar de mirarlo.