Almas Cruzadas[En curso]

Prólogo

¿Cómo puede ser que con solo ver esos ojos azul zafiro, esa calidez que transmiten, y ese cariño en su mirada, me hacía sentir único?
Esa sensación de que a quien miraba de esa manera era solo a mí y a nadie más. Podía iluminar aquella oscuridad que habitaba en mí, en la que me encontraba.
Ella, tan única y especial, ese ángel que me mantiene con vida, que me hace sentir… amado. Sé que no la merezco, pero soy demasiado egoísta para dejarla ir. Puede que ella piense que sin mí no podría seguir, pero la verdad es que yo no podría vivir en un mundo en el que ella no exista.
—Eres lo mejor que me ha pasado, Leyna. Ni siquiera sé qué haría si no estuvieras a mi lado. Por favor, no me dejes—cada palabra que sale de mis labios expresa todo el dolor que siento. Una lágrima silenciosa resbala por mi mejilla mientras la veo envuelta en esas sábanas de seda—. Eres la única con quien me dejo ver vulnerable, por quien sería capaz de derramar lágrimas. Eres a quien yo…