POV Fernando
Salí con Isabella del club tenía que confirmar si ella sabía que perdería la herencia de su padre al divorciarse de mi, si a ella no le importaba una vez que mi padre no estuviera firmaríamos el divorcio sin más, podría no decirle nada, pero estoy un poco harto de los juegos de estos dos viejos con nosotros, aunque eso podría complicarme las cosas también, si ella no lo sabía es probable que al enterarse ya no se quiera divorciar realmente estaba poniendo mucho en juego pero su padre la conoce mejor según las pláticas que he tenido con el a su hija no le interesa la herencia al menos no lo suficiente para seguir siendo mi esposa a la fuerza.
La lleve al restaurante de un hotel, pero cuando nos bajamos del auto vi algo que me impacto, Paola iba saliendo del hotel con un señor, apreté el puño estaba molesto, que estaba haciendo Paola en un hotel con un hombre, no me quería imaginar cosas, cuando ella se subió al auto de su acompañante no lo pensé dos veces y la seguí.
Los seguí un momento el auto estaba polarizado de tal manera que no se podía ver al interior de este, fueron a un café, no me acerque quería ver que hacían, no podía escucharlos tampoco, después de un rato volvieron a salir juntos y se montaron al auto los seguí al parecer iban a mi casa.
Al llegar a la entrada el hombre se bajó y abrió la puerta para Paola ayudándola a bajar, lo tomó de la cintura y le dio un beso en los labios me hervía la sangre de coraje, yo estaba a unos metros en mi auto, cuando estaba por bajarme el hombre se subió al auto y se fue.
Me baje furioso y le grite a Paola
-Se puede saber que hacías con ese hombre?
-Fernando me estás siguiendo?
-Más te vale que no me cambies el tema Paola vi como ese hombre te beso
-Fue un accidente el se iba a despedir con un beso en la mejilla pero pero ambos nos movimos y me termino besando en la boca, amor te juro que fue un accidente
-Paola no soy estupi*o que hacías en un hotel con ese hombre
-Es un socio de mi padre fuimos a comer al restaurante que está ahí, Fernando me estás siguiendo? Dímelo, no lo puedo creer
Entro furiosa a la casa seguimos discutiendo un momento adentro hasta que nos percatamos de la presencia de Isabella, Paola intentó decir que todo era culpa Isabella, nisiquiera se por que la metió en esto comenzó a llorar y se fue a la habitación, siempre que discutimos hace lo mismo odio que lo haga.
Estaba furioso pero igual me percate del extraño atuendo de Isabella hace rato tenia un conjunto caro de diseñador y ahora lleva una camiseta de una universidad, jeans que parecen viejos, Tennis y un moño algo desarreglado, sin mencionar que tiene una brocha en la mano y manchas de pintura sobre ella.
Le pregunté qué hacía y me sorprendió cuando dijo que estaba pintando que eso la relaja y le ayuda a pensar, yo seguía muy furioso así que pensé que tal vez eso también me ayudaría a mí, me quite el saco y la corbata y me doble las mangas de la camisa.
Por alguna razón Isabella se preocupo que arruinaría mi ropa, me pareció extraño, solo es ropa, apostaría que ella ha comprado ropa solo por comprarla y nunca la ha usado no se por que le preocupa que arruine lo que tengo puesto así que le dije que no me importaba le quite la brocha y comencé a pintar.
Me relaje bastante, Isabella tarareaba las canciones que sonaban intenté explicar mi pelea con Paola no quiere que piense que siempre es así y me lo restriegue después, su respuesta fue que no le interesa mi relación con Paola.
La verdad esto de pintar si me ayuda a pensar un poco más claro, se lo dije y ella dijo que por eso lo estaba haciendo no pude evitar preguntarle si pensaba en el divorcio y lo que implica para ella no se lo dije directamente no mencione la herencia, pero no fue necesario.
Isabella me explicó como no le interesa la herencia, tiene lo que le dejó su madre y otro par de cosas, ahorros trabajo, incluso resaltó que una mujer soltera no necesita mucho me molesto un poco ese comentario y le recordé que no estaba soltera, tiene esposo y ese soy yo, me explico a que se refería entendí su preocupación por dañar mi ropa de hace rato.
Cuando la conocí pensé que era la típica niña rica, igual a otras en mi círculo que les encanta derrochar dinero, pero ella no es así, ahora entiendo por qué su padre alaba tanto su inteligencia a diferencia de Paola, Isabella nació con una cuchara de oro, le hubiese sido sencillo no hacer nada con su vida teniendo todo lo que tiene, acomodarse como la mayoría de niñas ricas pero no lo hizo planificó toda su vida desde muy joven y a los 24 años tiene un plan detallado de como hacer las cosas, Paola abandono la escuela por los problemas económicos que tuvo su familia, intente que los retomará con mi apoyo pero se negó, dijo que no le hacían falta, gasta millones en un mes, mis millones no se por que comencé a compararlas a ambas, al inicio Paola rechazaba mi ayuda económica, decía que no quería que mi padre pensara que era interesada, ayude a su padre a salir de la quiebra y poco a poco Paola me dejó darle lujos, realmente ella no me lo pide, yo se los doy, quiero que este contenta.
Pensaba que todas las mujeres eran iguales, les das lujos las consientes un rato y son felices, pero Isabella no es así es extraño
Me fui a dormir con esa idea en mente cuando entre en la habitación Paola comenzó de nuevo el drama por que no la había seguido cuando corrió llorando, la ignore me metí a bañar al salir del baño me pidió disculpas me explico todo mas calmada me dijo que no le gustaba que la siguiera, le explique como la encontré en ese hotel le molesto que fuera con Isabella ahí pero no discutimos, tuvimos se*o y me quede dormido.
Me levante algo tarde era domingo, Paola seguía durmiendo, baje a la cocina, Isabella estaba sentada ahí comiendo mientras hablaba con la cocinera y Teo uno de sus guardaespaldas, de hecho es el que casi siempre está con ella nunca había reparado en eso y me molesto un poco Teo es un hombre alto fornido con músculos grandes, espalda ancha, además por que un guardaespaldas era tan bien parecido, tenía el cabello y los ojos escuros su piel canela y facciones marcadas una nariz fina por que demonios Isabella tenía a un hombre así como su guardaespaldas.
POV Isabella
Hoy era domingo me levante temprano iba a cubrir la emergencia hoy, ya que ayer no fui a trabajar pero iba a entrar un poco tarde así que pensé que por que no iba al gimnasio de esgrima a entrenar un poco. Ayer había tenido una platica tranquila con Fernando así que me levante de buen humor
Baje a la cocina le pedí a Milagros la señora que cocinaba si por favor me hacía un desayuno sencillo, ella lo hizo y me senté a comer en la cocina les pedí a ella y a Teo que me acompañarán pero se negaron con la excusa de que estaban trabajando trate de convencerlos de acompañarme a desayunar pero todos mis esfuerzos eran inútiles mire a la puerta y Fernando nos estaba viendo así que salude
-Buenos días Fernando
-Por qué siempre comes en la cocina Isabella?
-no se, es cómodo además puedo platicar con Milagros y Teo
-Señor ya le sirvo su desayuno en el comedor - dijo Milagros
-Comeré aquí Milagros, te levantaste temprano vas a algún lugar - pregunto Fernando sentándose a mi lado
-Voy a ir al gimnasio, quiero entrenar un poco y después tengo trabajo - su interés parecía sincero por eso se lo dije
-Es domingo Isabella que trabajo tienes los domingos?
-bueno como veras los hospitales funcionan 24/7
-lo olvide, estarás ahí todo el día?
-Fernando me asusta que te interese tanto mi día, que quieres
-Nada solo es curiosidad, lo siento si te incomode
-Como sea tengo que irme - me pare - vamos Teo, adiós Milagros
-Adiós Doctora que tenga buen día
Como dije fui a entrenar, y el entrenador me hizo papilla por no haber ido en toda la semana, pero realmente necesitaba esto, me concentró cuando tengo una espada en las manos de no ser por que mi localizador sonó no hubiese recordado que tenía que ir al hospital.
Cuando llegue entre a una cirugía era domingo no había tanto que hacer así que subí con el señor Thompson y hablamos un rato.
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Novela wearth Mi niña
Novela JuvenilMuchos podrán pensar que mi vida fue privilegiada viniendo de una familia adinerada con un gran conglomerado, no todo fue color de rosas para mi, mi madre falleció cuando yo apenas tenía dos años mi padre y mi hermano mayor no se sintieron capaces d...