Rayemma Week 2024

first date

Hoy era un día especial para ambos, pues hoy iban a ir a su primer cita juntos. El plan era verse con Emma a las 1:20 de la tarde fuera del mall para luego adentrarse en este, iban a ver una película que tenían ganas de ver desde hace un tiempo. Ray había aprovechado que justo hoy salía aquella película para poder invitarla a salir. Ahora el día había llegado y el chico se encontraba en frente del espejo que estaba en su habitación para ver si se veía bien, y como es obvio, sí logró verse genial.

Faltaban unos minutos para poder salir de la casa y dirigirse al lugar de la cita, estaba nervioso, no quería que algo malo sucediera en su cita, deseaba que todo fuera perfecto, perfecto como su amada chica, ella merecía la mejor cita de todas, y él iba a poner todo de sí mismo para darle a ella esa gran cita que tanto deseaba regalarle.

-¿Cómo me veo?- Le preguntó el adolescente de 16 a su madre. Llevaba puesto una camiseta negra y pantalones del mismo color, no había duda de que ese era el color favorito del chico.

-Te ves muy bien- Dijo la azabache para luego acercarse a su hijo y agarrar las mejillas de este con sus manos, estaba tan orgullosa de su hijo, ahora estaba con una linda y educada muchacha que ella misma amaba con todo el corazón. -Como has crecido, Ray. Hace unos años te cambiaba los pañales y ahora tienes 16 y tienes una hermosa novia. - Isabella adoraba a su hijo, era el único que tenía. Siempre se encargo de darle al chico todo lo que este necesitaba, hizo un gran trabajo al educarlo, todos le decían eso

Como era de esperarse, Ray estaba un poco sonrojado de la vergüenza, así que solo se despidió de su madre y se fue.

-Ya me voy, nos vemos luego- Dijo para luego acercarse a la puerta y luego abrir esta misma.

-Adiós cariño, pásala bien. Mandale saludos a Emma de mi parte- Se despidió de él para luego verlo salir de la casa. -Como crecen tan rápido- Dio un suspiro y luego sonrió con nostalgia, esos dos se habían convertido en buenos muchachos.

Había llegado al lugar, sabía que Emma iba a llegar un poquito tarde, la conocía a la perfección, siempre llegaba algo tarde a los lugares así que decidió sentarse en una banca que había por ahí. Pasaron como 15 minutos y por fin Emma había llegado, se acercaba a Ray con una enorme sonrisa, estaba feliz por verlo de nuevo, y también estaba feliz porque hoy sería su primera cita con su novio.

- ¡RAAY! ¡Hola!- Lo abrazó por cuello y luego beso la mejilla de este, luego de esto lo soltó y lo miró a los ojos- Llegué algo tarde, lo siento- rió nerviosa, sabía que a su novio no le gustaba esperar, pero no podía evitar llegar tarde, se había dormido y tuvo que hacer todo a la velocidad de la luz.

Ray dio un pequeño suspiro pero aun así le dio una sonrisa a Emma, no podía enojarse con ella. -Te la perdonaré solo por esta vez, ¿entendido? Ahora vamos, se nos hace tarde para ver la película. - Agarró la mano de la chica y de la llevó dentro del lugar.

La fila era algo larga, pero valía la pena esperar, y mientras lo hacían hablaban sobre cualquier cosa para no aburrirse.

-¿Raaay, me extrañaste mucho?- Preguntó Emma para poder obtener la respuesta que quería, pero Ray vino con otra cosa.

-No, no lo hice- Bromeó. Amaba hacerle ese tipo de bromas a su novia, le divertía ver las caras que esta ponía, aunque algunas veces de ganara algún golpecito por parte de esta.

-¿¡EEH!? Eres malo, Ray- Hizo un puchero para luego tirar de el mechón que cubría la mitad de la cara de su novio para luego hacer un mini drama. -Es una lastima, tu amada novia estuvo horas, incluso días esperando para poder verte, y tú vienes a herirla de una forma tan cruel, eres un malvado, Ray Grace. Cuando sea tu cumpleaños ni pienses que te voy a dar un regalo, ¿y sabes algo? Iba a ser el mejor regalo de todos, pero bueno, tú te lo pierdes- Se Volteó para darle la espalda a Ray, sabía que este bromeaba, ella también lo hacía, ese tipo de bromas entre ellos era algo de todos los días, de todas formas se amaban mucho.