El Romance Prohibido de Edward Cullen y Jacob Black

Temporada 2, Capitulo 11: La Profecía

La paz que había regresado a Forks se sentía frágil, como si estuviera sostenida por hilos invisibles que podían romperse en cualquier momento. Los habitantes sobrenaturales del pueblo, aún recuperándose de la reciente batalla y el ritual, no podían permitirse bajar la guardia. Sin embargo, la llegada de Elian y el éxito del ritual habían dado a todos un respiro necesario.

Una noche, poco antes de que Elian se marchara, convocó a Edward, Jacob, Carlisle, y Alice a una última reunión en la cabaña. La atmósfera era tensa y cargada de expectación. El anciano, sentado frente a ellos con una expresión seria, tenía más que revelar.

"Hay algo más que deben saber," comenzó Elian, su voz grave. "Algo que no mencioné antes, pues necesitaban concentrarse en cerrar el portal. Es una antigua profecía, conservada en los textos de mi orden. Predice el resurgimiento de las criaturas que han enfrentado y el papel crucial que ustedes, Edward y Jacob, jugarán en la salvación del mundo sobrenatural."

La revelación dejó a todos en silencio. Edward frunció el ceño, intentando procesar la información. "¿Qué dice exactamente esta profecía?"

Elian sacó un pergamino antiguo de su túnica y lo desenrolló con cuidado sobre la mesa. Los caracteres escritos en una lengua antigua parecían brillar con una luz propia. "La profecía habla de una época de oscuridad y caos, cuando los sellos que contienen a las criaturas malignas se debiliten. Solo la unión de dos fuerzas opuestas, una inmortal y otra ligada a la naturaleza, puede restaurar el equilibrio y proteger ambos mundos."

Jacob, con una mirada de determinación, preguntó: "¿Qué tenemos que hacer exactamente?"

Elian suspiró, consciente del peso de sus palabras. "La profecía es vaga en los detalles, pero menciona una serie de pruebas que deben superar juntos. Estas pruebas no solo medirán su fuerza y valentía, sino también su capacidad de trabajar en armonía. Solo entonces podrán acceder al poder necesario para reforzar los sellos y asegurar un equilibrio duradero."

Alice, siempre perceptiva, intervino. "Mis visiones han sido confusas últimamente, como si algo las estuviera bloqueando. ¿Tiene esto algo que ver con la profecía?"

Elian asintió. "Las fuerzas oscuras son conscientes de su papel y harán todo lo posible por desestabilizar su unión. Las visiones son solo el comienzo. Deben estar preparados para enfrentar no solo amenazas externas, sino también internas."

Carlisle, con su habitual serenidad, preguntó: "¿Hay alguna guía que podamos seguir? Algún consejo para iniciar este camino?"

Elian señaló el pergamino. "La profecía menciona un lugar sagrado, un templo escondido en las montañas, donde encontrarán la primera de las pruebas. Deben partir lo antes posible, pues el tiempo no está de su lado."

Con esta nueva misión en mente, Edward y Jacob comenzaron a prepararse. Aunque sus habilidades y naturalezas eran diferentes, sabían que solo trabajando juntos podrían enfrentar los desafíos que se avecinaban. La revelación de la profecía les dio un nuevo propósito, una razón para continuar luchando no solo por Forks, sino por el equilibrio de todo el mundo sobrenatural.

Antes de partir, Bella y el resto de la comunidad les desearon suerte y seguridad. Morgana y su clan de brujas también ofrecieron su apoyo, proporcionando encantamientos protectores y conocimientos antiguos que podrían ser útiles.

El viaje hacia el templo sagrado fue arduo y lleno de peligros. Elian les había dado direcciones precisas, pero el camino estaba lleno de obstáculos naturales y trampas sobrenaturales diseñadas para probar su resolución. Durante el trayecto, Edward y Jacob enfrentaron bestias salvajes y fenómenos climáticos extremos, pero cada desafío solo fortalecía su vínculo y su determinación.

Finalmente, después de días de viaje, llegaron a la entrada del templo. Una estructura antigua y majestuosa, oculta en una caverna entre las montañas, los recibió con una atmósfera cargada de misterio y poder.

"Este es el comienzo," dijo Edward, mirando la entrada con una mezcla de aprehensión y esperanza.

Jacob asintió, su mirada fija en la oscuridad del templo. "No importa lo que enfrentemos, lo haremos juntos."

Entraron al templo, preparados para enfrentar las pruebas que les esperaban, conscientes de que su éxito o fracaso determinaría no solo su destino, sino el de todo el mundo sobrenatural. La profecía había sido revelada, y ahora, debían cumplir con su papel crucial en la salvación de su mundo.