¡No puede ser! Otra vez no escuché el despertador y mi abuela está tocando a mi puerta gritando y repitiéndome que "de nuevo se me hizo tarde para irme a la escuela" Sí, aunque no lo crean soy de esos chicos que batallan para despertarse, pero en fin, debo hacerlo para ir a esa maldita clase de matemáticas que reprobé apropósito para estar cerca de él.
De verdad que odio despertarme temprano, ¿A quién se le ocurrió que las clases deben comenzar a las 7:00a.m? -Es así como comienza mi rutina; abro y cierro un ojo y después el otro, es la tonta manera de ejercitarme para no dormir en clase, me levanto de la cama, saco al patio a Lucifer y Agnes, mis hermosos cachorritos, lavo mis dientes, me miro en el espejo y veo mi aspecto peor que el de un zombie, me cambio agradable, pero en realidad no sé por qué me esmero en intentar verme bien, si él nunca me ve, en fin. Le doy un beso a la abuela y después me voy corriendo a la esquina para tomar el camión escolar, pero nunca lo alcanzo así que tengo que irme caminando y reproduciendo mi lista de canciones favoritas. ¡Mierda! Faltan 5 minutos para que comience la clase, espero poder llegar pronto para sentarme cerca de Will.
Al terminar Don't Cry de Guns N' Roses tuve algo así como un pequeño recuerdo, o al menos así intenté llamarle, eran mis padres extrañamente diciéndome "ya casi es la hora" lo curioso es que yo solo he visto a mis padres en fotos, así que no le tomé importancia, creo que estoy enloqueciendo.
Por fin llegué a la escuela y lo primero que veo es a Will corriendo apresuradamente, al parecer también se le hizo tarde, alcancé a ver como se movía con el viento su cabello negro y despeinado pero con mucho estilo, esos labios rojos que dibujan una sonrisa perfecta y su color de piel tan blanco que deslumbra. Llegamos al salón y para mi mala suerte, o más bien, para mi buena suerte el profesor no nos dejó ingresar al salón de clase y pensé que podría ser una buena oportunidad para conversar.
-Hola, creo que nos tocará pedir los apuntes ¿no crees? le dije con la voz entrecortada, dejando ver mis nervios al cien por ciento por tenerlo tan cerca, me miró y pude observar ese color miel de sus ojos y respondió con un simple y sencillo "hola" marchándose a la cafetería de la escuela.
No podía creer que acababa de tener la primer conversación con el chico que me gusta, debo admitir que no fue como lo imaginaba, fue mucho menos larga y menos interesante de lo que esperé, pero bueno, al menos lo intenté.
ESTÁS LEYENDO
Pandemónium
Novela Juvenil¿Las razones del cambio? Muchas, y algunas de ellas pueden ser muy poderosas... Christ Wytte, la noche antes de su cumpleaños número 18 descubre un anillo mágico en el cuarto abandonado de su madre. La vida de Christ dará un giro inesperado y se las...