Survive (Daryl Dixon)

T1: Capítulo uno

Emma

Terminé de vestirme para mí siguiente turno, mientras ordenaba un poco la habitación que compartía con mi esposo hasta que escucho como alguien entra a la casa haciendo mucho ruido a su paso.

Sabiendo que no se trataba de Daryl salí de mi cuarto para dirigirme hasta la cocina en dónde me encontré con mi querido cuñado, noten el sarcasmo.

-¿Qué haces aquí?- le pregunto con molestia

Merle solo se ríe de mi mientras toma una rebanada de pan y comienza a comerlo mientras se sienta en la isla de la cocina viéndome divertido.

-Hola a ti también preciosa- habla con su boca llena de comida

Solo atino a negar con molestia y seguir con mis quehaceres hasta que sea la hora de salir en dirección a mi trabajo, el que por mi mala suerte queda a una distancia considerable.

-Oye, ¿quieres que te llevé?- pregunta Merle mientras me ve tomar mi mochila y subir a mi bicicleta

-Gracias, te conozco y se que luego me reclamas dinero para la gasolina que utilizarás en mi- dije viendo como el se reía de mi nuevamente

-Pues que te valla bien pedaleando hasta el otro pueblo, pequeña zorra- dice mientras vuelve a entrar a mi hogar

Con una sonrisa comienzo a andar, ya estaba acostumbrada a la forma de ser de los Dixon.

Mi historia con ellos era extraña, aún no se cómo es que termine casada con el menor.

Yo soy una inmigrante y era sabido que para no ser echada de nuevo a mi país debía de casarme con alguien de aquí y por arte de magia o el destino, estos extraños hermanos se cruzaron en mi camino e hicimos aquel trato.

Claramente mi matrimonio con Daryl era falso.

Al conocerlos ni siquiera hablaba su idioma, no tenía a donde ir y solo contaba con una mochila en mis hombros y mi título de enfermera.

Los tres coincidimos en un motel y extrañamente pudimos comunicarnos, tal parece que el lenguaje de los negocios no necesita de idiomas.

Hace un año estoy casada con el menor de los Dixon y puedo decir que es un hombre muy cerrado.

No somos de hablar mucho, le gusta salir a cazar y tuve que rogarle por qué me enseñará a hacerlo, siempre hace lo que su hermano dice aún cuando no está de acuerdo y realmente, es un animal en la cama.

Pero sus puntos positivos son que me da mi espacio, confía en mí extrañamente, siempre pide mi opinión o permiso a la hora de tomar una decisión y es un hombre muy trabajador.

Aún pensando en estás cosas logré llegar a tiempo a mi trabajo, no solo hacia algunas guardias en un hospital de mi pueblo sino que en el tiempo que me quedaba trabajaba cuidando a una pareja de ancianos muy amables.

El dinero no es un fuerte de los Dixon pues el mayor siempre se mete en algún problema y yo y Daryl debemos de pagar para que el siga con su vida de mierda.

Pero el dinero que ganó con este trabajo es única y exclusivamente para mí familia y eso los Dixon lo saben.

Dejo mi bicicleta contra un árbol y me acerco a la puerta de la casa de los señores Walsh.

-Hola cariño- saluda la señora Walsh con una sonrisa -Adelante, mi hijo está aquí hoy, seguro se alegrará de verte- dice mientras me guía hacia la cocina

Sonrió mientras la acompaño.

Nadie más sabe que estoy casada, mucho menos el hijo de los señores Walsh, ya que es policía y me da temor el que en algún momento mi falso matrimonio se descubra y sea exportada.