𝔼𝕏𝕋𝔼ℝ𝕄𝕀ℕ𝔸𝔻𝕆ℝ𝔸S
Adám recuerda con bastante cariño la primera vez que conoció a parte su escuadrón de exterminadoras, en ese entonces el exterminio aun no se confirmaba por lo que simplemente se le encargo entrenarlas y cuidar de ellas y eso de cuidarlas era literal, todas y cada una de ellas eran niñas que rondaban entre los 5 y 6 años de edad siendo angeles creados en el cielo para el propósito de disminuir la población del infierno en un futuro; claro que cuidar tantas niñas no fue fácil, eran bastante energéticas la mayoría del tiempo y tenia que encontrar maneras de que se cansaran para que durmieran y lo dejarán descansar a el también y ¡claro que las entreno! Pero el entrenamiento durante su infancia fué bastante leve pues no tenia corazón para privar las de su infancia pues a pesar de sus propósitos en el cielo seguían siendo simplemente niñas en ese entonces y sus entrenamientos solo consistían en velocidad y ¿Que mejor que ponerlas a jugar a las traes? Verlas correr y volar persiguiendo se entre ellas eran recuerdos que guardaría celosamente en su memoria (y en los videos de una USB).
—Sofi, ¿Que le paso a tu caballo?— Adám se arrodilló frente a una linda niña de pelo oscuro y lacio que en ese momento estaba disparejo y enredado cubierto por moños y brillitos.
—¡Me lo arreglo Lute!— hablo entusiasmada— ¿Me veo bonita?— sonrió dejando ver un espacio entre sus dientes a falta de uno de estos.
—si, te ves muy bonita Sofi— sonrió mordiéndose el interior de la mejilla al imaginar el desastre que tendrían en el pelo las demás niñas y lo que le costará lavarlo, desembarañarlo y emparejarlo para que se vean medianamente decentes— ¿Puedes llevarme a donde están jugando?— pregunto suavemente a la pequeña infante.
—¡Si!—la niña lo tomo de un dedo y empezó a caminar entre brinquitos sin darse cuenta de que llevaba al castaño prácticamente agachado para ir a su altura— aqui —apunto con su manita a un cuarto en el que se lograban escuchar varias risitas.
—Gracias corazón—sonrio abriendo la puerta y jura que casi se muere una segunda vez, había trenzas tiradas en el piso, el cabello de todas las niñas enredado, con brillos en exceso o plastas de gel, peines atorados en sus cabecitas y sus caras mal maquilladas ....¡joder!, ¡¿eso en el cabello de Lute era un puto chicle?!—oh por mi padre—murmuro considerando si era muy tarde para serle la crianza de esas niñas a Miguel o a Sera y que ellos las entrenen como al resto de su futuro escuadron de angeles exterminadoras.
—¡Señor Adám!—todas gritaron alegremente saludando con sus manitas con entusiasmo al ver al castaño.
—ay niñas— suspiro—¿Quien quiere jugar en la bañera?—bien las bañaria a todas lo mejor que pudiera y en el peor de los casos solo tendría que raparlas...El pelo crece...¿Verdad?.
—¡Yo!/¿Puedo llevar juguetes?/¡Con música!/¡Fiesta de espuma!—eran solo algunas de las respuestas de las niñas que salieron corriendo a sus cuartos a buscar sus toallas y mas cosas.
Bien, tal vez no habría suficiente espacio para todas en el baño, plan B, caminó bajando las escaleras y abrió una puerta a un costado de esta dejando ver un gran bosque lleno de animalitos, árboles frutales, arbustos de moras con un rio y un lago en el centro, todo esto cubierto por un domo de "cristal" que dejaba pasar la luz del sol, un pequeño regalo de su Padre...un "portal" directo al jardín del Edén que ahora era solo y únicamente de el solo teniendo acceso el y Dios al recinto.
═════ ♢.✰.♢ ═════
—tienes una abertura en tu defensa Ágata — el castaño golpea a la chica en la parte trasera de la rodilla causando que perdiera el equilibrio y callera hacia enfrente llevándose con ella a tres chicas mas.
ESTÁS LEYENDO
ㄗ丹刀尺モ 刀モ ㄥ丹 卄U爪丹れ工刀丹刀
عشوائيel puede ser todo lo que quieran, pero aun es el padre de la humanidad y ante cualquier niño o adolescente siempre saldrá su lado amable y paternal