MAR Y TIERRA / NAMORA X M'BAKU

Capitulo 3

_ ¿Cuánto tiempo vas a quedarte aquí?_ Namora poseía una mirada severa, bastante ofendida se sentía ya después de una semana de silencio, silencio que Kukulkán había guardado hacia ellos, siempre habían sido leales, el general y su consejera. Pensó que solo se trataba de obedecer, de estar ahí, de estar siempre dispuesta a todo por el bien de su pueblo, solo hasta ese momento se dió cuenta que también quería algo de vuelta, la más mínima consideración al menos por parte de aquel a quien había servido... pero solo obtuvo secretos... si estaba involucrado el Rey de Wakanda, no se trataba de algo sin importancia.

_ ¿Te incomoda mi presencia Namora?_ M'Baku observaba a la guerrera con total pacividad a pesar de la posición defensiva de su interlocutora. Se mostraba impávido, de hecho demasiado sereno o tal vez... distraído y pensativo por algo más.

Namora pudo ver algo en sus ojos, pudo percibir algo que la desarmó por completo, porque... era una mirada que había reconocido en su propio reflejo un día... ese día en el pasado donde se sentía angustiada, desesperada... por algo que ya se había salido de sus manos. Casi se le escapan unas palabras de sus labios, tal vez un pequeño susurro de sus emociones ocultas, de un "algo" de humanidad en lo profundo de su alma...pero.

_ No te preocupes, ya estaba por regresar al continente madre._ M'Baku alzó su mirada, la bajó vacilante y luego la posó en los ojos oscuros de ella._ a veces hay una buena razón para no decir ciertas cosas, los secretos pueden ser menos dolorosos que la verdad, pero no están nunca ocultos para siempre... llegará en momento de ser conocidos.

_ Si te refieres a Kukulkán...

_ Lo veo en tu mirada... la duda._ Namora se sintió descubierta y solo pudo guardar silencio un momento._No pongas esa expresión Namora, él ya lo sabe.

_ Pensaré en ello...pero... No creo que sea eso lo que le atormenta a usted Lord M'baku...

_ Tienes razón, tengo mis propias batallas internas... desde que salí por primera vez de Wakanda.

¿Salir por primera vez de Wakanda? Tenía razón la primera vez que lo vió con ropa no tradiciona ¿Dónde estuvo? ¿Porqué se ocultó aquí? ¿Que vió? Ella también había tenido un choque emocional después de salir en la post guerra, pero no era igual, no se sentía igual. Por primera vez quería saber, saber sobre alguien más, lo que pasaba por su cabeza o por su ¿Corazón?.

_ Lord M'baku ¿Cómo vas a regresar?

_ Me comunicaré con el palacio...

_ Sólo quiero saber si te estabas ocultando durante estos días... Si es así no es conveniente que abandones este lugar por aire... Oh lo siento... No es de mi incumbencia..._ Namora dió un paso atrás para retirarse, pero...

_ Tienes razón... estás en lo correcto.

_ ¿Entonces? ¿Porqué...?

_ No estaba pensando con claridad, de hecho no he anunciado mi partida...

¿El rey de Wakanda dudaba? Casi abandona el reino de su aliado sin avisar... eso hubiese Sido un mal detonante diplomático.... Namora no entendía. El gran gorila parecía tener algo, esas corazonadas...

Unos pasos se acercaron a la escena, calmos, quedos. La presencia del soberano Talokanil se hizo presente, parecía conocer la situación, pero no parecía molesto.

_ Lord M'baku, entiendo.

Esa mirada entre los dos fue sorpresiva, acaso... ¿Comprensión? ¿Respeto? ¿Consentimiento? ¿De qué?

_ Namora... acompañalo hasta el continente... lleva tropas contigo.

_ Si señor.

_ Gracias, nos vemos en el consejo Kukulkán.

_ Iremos nadando Lord  M'baku. No hay naves acuáticas ¿Alguna objeción?

_ Ninguna objeción, creo que será toda una experiencia, ¡claro! Si no me ahogo en el camino._ Una carcajada resonó por un momento, parecía estar volviendo a su semblante de antes, aunque no duró mucho...

_ Eso no pasará._ Namora se retiró el respirador de su rostro, lo puso en el suyo con tacto y suavidad. Y de un saltó abandonaron el cenote para entrar en aguas marinas.

_ ¿Enserio? ¡Esto es fantástico!

Sí, se irían sobre una magestuosa ballena, una reina del mar. Aunque era molesto para Namora tener emociones, se alegró un poco en el fondo el hecho de ver disipada la angustia del rostro de aquel hombre a su lado. Aunque por un momento surgió la duda de aquello que le era oculto por su rey...

***

_Por fin llegas M'Baku_ Shuri estaba de espaldas con los brazos cruzados y con facciones serias.

_ ¿Ya estás mejor?

_ Me mantuviste ocupada, supongo que sí, estoy bien.

_ ¿Te dejaste de lastimar?

_ Sabes que mi cuerpo sana sin ningún problema después de haber consumido esa hierba de corazón.

_ Osea que...

_ M'Baku, no te preocupes por mi... puedo cuidarme sola... y de paso cuidar a otros, es ahora mi labor ¿No? No te go problema con eso.

_ Deja de infringirte daño... Solo eso Shuri... porfavor date el tiempo de terminar el duelo por tu madre...

_ Se lo que hago M'Baku, puedo con ese peso. ¿Algo más que debas contarme de tu visita al mundo exterior?

_ No.

_  ¿Seguro?

_ Seguro.

Shuri abandonó el lugar dejando a M'Baku atrás.  Aunque no sin antes....

_ M'Baku... No me ocultes cosas..._ Luego cruzó la puerta.