Atsushi es diferente al resto de los niños, Chuuya lo supo en los primeros meses de conocerlo; cada vez que abría la boca era para decir cosas ridículas que parecían inventos, hablaba sobre como para evitar que los niños se enfermaran debían de bañarse más seguido o lavarse las manos antes de comer.
Al principio solo pensó que eran estupideces de un niño recién huérfano que quería escapar de la realidad.
—"No tenemos suficiente agua" —Le había dicho Chuuya para desanimarlo de sus extrañas ideas—, "toda el agua que tenemos la extraemos del río, y solo podemos acarrear lo suficiente como para poder tomarla"
Cuando amaneció, incluso el director Fukuzawa se quedó con la boca abierta al ver un pozo grande en un sitio mucho más accesible para lograr acarrear el agua. Nakajima Atsushi se encontraba lleno de lodo y suciedad, pero con una gran sonrisa en el rostro, llena la esperanza que da el querer ayudar a las personas.
Akutagawa: ¿Por qué él se lleva todo el crédito? ¡Yo fui quien pasó más tiempo cavando! (en realidad solo se sentó a ver como el humano cavaba en el lugar que él le señaló, y únicamente estuvo dispuesto a ayudarlo cuando el albino se quedó dormido por el cansancio).
Después de eso no fue difícil que los demás se lavaran las manos una vez convenció a Kunikida de que eso era lo mejor. Para sorpresa de todos, las enfermedades en efecto bajaron, incluso los malestares estomacales que eran los que más vidas arrebataban al año disminuyeron.
Sin embargo, Atsushi salía con más ideas locas, cada una más descabellada que la anterior; por ejemplo, decía que era posible guardar un rayo para que cumpliera la misma función que una vela pero que no requería de fuego para funcionar, sin embargo, por más que intentara no lograba hacer ese "artefacto". En alguna ocasión Chuuya le preguntó:
—"¿Cómo sabes esas cosas?"
A lo que Atsushi respondió.
—"Un Ángel me lo susurró mientras dormía".
Es por eso que cuando empezaba a decir ese montón de cosas ridículas, nunca estaban seguros de lo que era real o no. No descargaban la posibilidad de que los santos lo iluminaran, aunque esto era difícil de creer para un huérfano, alguien desperfecto como ellos no merecían esa clase de bendiciones.
Chuuya recordó todo esto cuando vio a Atsushi arreglarse para dar su primer día de prácticas como docente del orfanato; el tiempo pasaba muy rápido, y eso solo lo hacía sentir nostálgico. Su más grande sueño era ver a todos sus amigos seguir adelante y lo estaba logrando.
—¿Ya vas a terminar? No tenemos toda la mañana para que te arregles, es una clase, no una boda —Chuuya hizo una mueca que ocultaba su diversión.
—Ja, si no me arreglo, Kunikida me va a obligar a copiar otra vez las reglas —dijo estremeciéndose ante el recuerdo de tener el rubio gritándole sin cesar.
Chuuya chasqueó la lengua.
—Antes de que él las escribiera ni siquiera teníamos muchas —Frotó el espacio entre sus cejas—, sería más sencillo si no se hubiera quedado trabajando aquí.
Y como si hubiese sido invocado por la conversación, Kunikida tocó un par de veces la puerta de madera antes de entrar. Llevaba unas hojas en la mano, lo que le recordó a Atsushi que esa tarde sería dedicada a la elaboración de cuadernos; en su interior quiso llorar, hacer papel es de sus actividades menos favoritas.
—Deberías hablar más bajo, pude escucharte incluso a través de la puerta —Levantó el cuaderno con el propósito de darle un golpe, sin embargo, Chuuya lo repelió sin mucho esfuerzo.
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El monstruo que se esconde bajo la cama -Shin Soukoku
FanfikceAkutagawa es un demonio que se alimenta del miedo y terror de los humanos. Atsushi es un niño que vive en una casa donde la violencia intrafamiliar es el pan de cada día. El monstruo un día se topó con un niño que se esconde debajo de su cama para e...