Elena y Alexia habían superado muchos obstáculos juntas, pero ahora enfrentaban un nuevo desafío: encontrar el equilibrio entre sus crecientes responsabilidades profesionales y su vida personal. Alexia estaba en una etapa crucial de su carrera, compitiendo en la UEFA Champions League, mientras que Elena, recién nombrada jefa del departamento de cirugía, tenía que ponerse al día con todas las demandas administrativas y operativas de su nuevo puesto.
Ambas sabían que esta fase sería un verdadero test para su relación y para su capacidad de manejar el estrés. Sin embargo, también estaban determinadas a no dejar que sus carreras afectaran su vínculo personal.
Para Alexia, el fútbol siempre había sido una pasión y un refugio. Ahora, en medio de la competencia más importante de Europa, cada partido, cada entrenamiento y cada estrategia importaban más que nunca. La presión era inmensa y el nivel de exigencia aumentaba con cada ronda superada.
Durante los entrenamientos, Alexia se esforzaba al máximo, pero también sentía la carga emocional de estar lejos de Elena. Los días eran largos y agotadores, y a menudo terminaba tan cansada que apenas tenía energía para nada más.
Un día, después de un entrenamiento particularmente duro, Alexia se quedó más tiempo en el campo, practicando tiros libres. Su entrenador se le acercó y le dijo: "Alexia, sé que esto es importante para ti, pero necesitas encontrar un equilibrio. No te quemes."
Alexia suspiró y asintió. "Lo sé, pero quiero dar lo mejor de mí en cada partido. No puedo permitirme fallar."
El entrenador le puso una mano en el hombro. "Entiendo. Pero también necesitas cuidar de ti misma. Recuerda que tienes a alguien en casa que te apoya y te necesita."
Mientras tanto, Elena estaba inmersa en sus nuevas responsabilidades como jefa del departamento de cirugía. La gestión de personal, la planificación de cirugías y la implementación de nuevas políticas requerían su atención constante. El hospital dependía de ella para mantener la eficiencia y la calidad de la atención médica.
Elena solía llegar temprano y quedarse hasta tarde, revisando expedientes y asegurándose de que todo estuviera en orden. Los fines de semana, que solían ser un tiempo para relajarse, ahora estaban llenos de reuniones y planificaciones.
Una tarde, mientras revisaba unos informes en su oficina, su colega y amiga entró. "Elena, te ves agotada. ¿Cuándo fue la última vez que tuviste un descanso?"
Elena sonrió cansada. "No lo sé. Entre el trabajo y asegurarme de que todo esté bien en casa, el tiempo vuela."
Su colega se sentó frente a ella. "Entiendo que tienes muchas responsabilidades, pero también necesitas cuidar de ti misma. ¿Has hablado con Alexia sobre esto?"
"Lo hemos intentado, pero ambas estamos tan ocupadas. Es difícil encontrar tiempo para nosotras," admitió Elena.
A pesar de sus agendas apretadas, Alexia y Elena sabían que necesitaban encontrar tiempo para su relación. Decidieron reservar al menos una noche a la semana para pasar tiempo juntas, sin distracciones ni trabajo.
La primera noche, Alexia preparó una cena especial en su apartamento. Quería crear un ambiente relajado y romántico para desconectar del estrés diario. Elena llegó agotada, pero su rostro se iluminó al ver el esfuerzo de Alexia.
"Esto es maravilloso, Ale. Gracias," dijo Elena, abrazándola.
"Quería hacer algo especial para nosotras. Sé que hemos estado muy ocupadas, pero es importante que tengamos estos momentos juntas," respondió Alexia, sirviendo el vino.
Durante la cena, hablaron de sus días, pero también se aseguraron de discutir sus sueños y esperanzas para el futuro. Este tiempo juntas les recordó por qué se amaban y lo importantes que eran la una para la otra.
Ambas sabían que no podían cambiar la naturaleza de sus trabajos, pero podían apoyarse mutuamente de formas significativas. Elena continuó asistiendo a los partidos de Alexia siempre que podía, animándola desde las gradas. Alexia, por su parte, encontraba pequeñas maneras de mostrar su apoyo a Elena, como dejarle notas de ánimo en su bolso o prepararle el desayuno antes de salir al entrenamiento.
Un día, después de un partido difícil, Alexia llegó a casa para encontrar a Elena esperándola con una cena caliente y una sonrisa. "Sé que hoy fue duro, pero estoy tan orgullosa de ti. Siempre das lo mejor de ti, y eso es lo que importa," dijo Elena, abrazándola.
"Gracias, Elena. Saber que estás aquí para mí hace que todo valga la pena," respondió Alexia, sintiendo una oleada de amor y gratitud.
A pesar de sus esfuerzos, hubo momentos en los que ambas se sintieron abrumadas y dudaron de su capacidad para equilibrar todo. Hubo noches en las que las tensiones y el cansancio llevaron a discusiones, y días en los que parecía que el peso de sus responsabilidades era demasiado.
Una noche, después de una discusión particularmente intensa sobre la falta de tiempo juntas, Alexia se sentó en el sofá, mirando fijamente al suelo. "No quiero que esto nos separe, Elena. Te quiero demasiado para perderte por culpa de nuestras carreras."
Elena se sentó a su lado, tomando su mano. "Yo también te quiero, Alexia. Estamos en esto juntas, y encontraremos una manera de hacerlo funcionar. Solo necesitamos ser pacientes y apoyarnos mutuamente."
Conscientes de la necesidad de un respiro, Alexia y Elena comenzaron a planear una escapada de fin de semana. Querían desconectar de sus responsabilidades y pasar tiempo de calidad juntas, aunque fuera por unos días. Empezaron a investigar destinos cercanos y a buscar un lugar que les permitiera relajarse y disfrutar de su mutua compañía.
Una noche, mientras cenaban en casa de Elena, Alexia trajo el tema a colación. "He estado pensando que podríamos irnos a una cabaña en las montañas. Sería un buen escape y podríamos disfrutar de la naturaleza."
Elena sonrió, emocionada por la idea. "Me encantaría. Necesitamos ese tiempo juntas. Buscaré en mis días libres y veré cuándo podríamos hacerlo."
Ambas decidieron tomar un enfoque proactivo hacia el equilibrio de sus vidas. Alexia comenzó a organizar mejor su tiempo de entrenamiento y partidos, y Elena delegó más responsabilidades a sus colegas para no sentirse abrumada. Sabían que mantener su relación fuerte requería esfuerzo y compromiso.
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Ecos de Amor - Alexia Putellas
FanfictionAlexia Putellas, una destacada futbolista, y Elena, una talentosa cirujana, se encuentran en una gala de caridad y se enamoran rápidamente. Sin embargo, sus vidas llenas de secretos y responsabilidades ponen a prueba su relación. Juntas, luchan por...