Capitulo.-23. Una Verdad Dolorosa.

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Esa tarde Scarlett había ido a visitar a Min, a pesar de haber estado tan sedada había cosas que recordaba de cuando estuvo inconsciente. Necesitaba saber si era cierto lo que había escuchado, y realmente podía contar con Min para lo que fuera.

Llegó a la casa de él y se le hizo extraño que no abriera el ama de llaves. Aún así no hizo caso pues ella solo venía a platicar con Min, parecía haber más vigilancia de la normal aunque considerando que era alguien peligroso también era normal que de vez en cuando tuviera que contratar más personal.

Fue directo a la habitación de Min, aun cuando no vivían juntos ella siempre tenía la suficiente confianza de saber dónde lo encontraría. Entro a la habitación y no había nada que le hiciera pensar que  Yoon había dormido ahí, la cama estaba igual, no había nada desordenado en sus cosas y no olía a su perfume como cada día.

Se sentó en la cama y comenzó a acariciar las sábanas, recordaba sus días con el, sus momentos juntos cuando eran tan felices, pero todo se oscurecía cuando recordaba sus celos, Min había hecho que todo lo bonito desapareciara por tonterías que había podido arreglarse.

No paso mucho, cuando Min salio de la ducha, tenía apenas amarrada una toalla de la cintura para abajo, su cuerpo húmedo y tonificado, su espectacular piel blanca lo hacía lucir tan sexi, su cabello mojado escurría agua por sus hombros, era una escena que Scarlet no podrá sacar de su mente en mucho tiempo.

—¿Que haces aquí?

—Nesecitamos platicar Min.

—Si, pero no en mi habitación.

—¿Que? Tu nunca habías tenido problemas con que entrara a este lugar.

—Ahora tienes novio, evita malos entendidos y ve a la sala hablemos como la gente normal.

—Somos mejores amigos, no gente normal.

—Vete, ya dije que no quiero malos entendidos.

—Min no me trates tan indiferente.

—Entonces ve a esperar donde te dije.

Scarlet no soportaba su indiferencia, la mejor solución está vez si era hacer lo que él le pidió, sin decir más salió de la habitación. Mientras que Min se sentó en la cama y sentía su corazón totalmente acelerado por lo que acaba de decir y hacer con Scarlet, sentía dolor de tratarla así, pero no podía mostrarse débil ante ella, nunca lo había hecho ante nadie y por mucho que la amara no lo haría por ella.

Scarlet se fue directo a la cocina, sabía que encontraría a el ama de llaves, ella sabía que sería la única que le podría comunicar porque Min estaba tan de mal humor ese día, al estar ahí no la encontró por ningún lado y le pareció aún más extraño.

—La despidieron está mañana.-Dijo una de las empleadas a Scarlet.

—¿Porque?

—El señor Min no dio explicaciones, le pido que recogiera sus cosas, no quería que continuará trabajando con el.

—Gracias

Scarlet regreso a la sala, ahora con más dudas que nunca, la señora Kim había sido su empleada de confianza por más de 10 años, despedirla así se le hacía de lo más raro y además injusto. Ahora tenía otra razón para hablar con él y muy seriamente.

—Ahora si, dime de qué quieres hablar.

—Primero dime porque despediste a la señora Kim.

—Es mi empleada y puedo hacer lo que yo quiera

—No, ella tenía años de estar trabajando aquí y es una injusticia que la despidieras así.

—¿Te duele porque lo crees injusto, o porque no tendrás aquí quien te informe sobre mi?

—No seas así, sabes que es porque me parece injusto.

—No me interesa lo que tú creas o desees, en mi casa mando yo.

—Porque estás tan agresivo conmigo, se supone que eres mi mejor amigo.

—Porque vienes a mi casa y pretendes darme órdenes.

—Era solo una pregunta.

—Evitalas, así que di de que quieres hablar.

—Recorde algo que dijiste cuando estaba en el hospital.

—Ni siquiera entre a verte cuando estuviste en ese lugar.

—No mientas, ya pregunte y me dijeron que entraste a verme cuando estaba en terapia intensiva.

—Bueno y¿ eso que ?

—Dijiste que te vengarias de mi hermano.

—¿Que?.-Min retrocedió un par de pasos por la sorpresa de escuchar eso.

—No me mires así, sabes de lo que estoy hablando.

Min se apartó de ella, fue a la barra a sacar del librero donde estaban sus licores, tomo un vaso y se sirvió whisky, de un solo trago lo bebió.

—No digas tonterías, no voy a usar mis recursos para vengar algo que no me interesa.

—Tan poco significado tengo para ti.

—Somos amigos ,no hermanos ni novios así que no pienses en que te ayudaré a nada.

A Scarlet se le cristalizaron los ojos, estaba a punto de llorar, lo que Min le había dicho se le hacía lo más cruel del mundo.

—Llora, solo eso te falta.

—Porque siempre tienes que ser tan cruel, si no te importo déjame tranquila y ya.

—Eso haré, desde ahora ya no quiero que te aparezcas de nuevo en casa, olvida nuestra amistad.

—¿Que?.

—Si doy por terminado todo lo nuestro, olvídate de mi y de todo lo que teníamos.

—Min no, yo te quiero y nesecito que sigamos siendo amigos.

—Ya te dije que no me importa lo que quieras o desees.

Scarlet se puso de rodillas frente a él, mientras lloraba comenzó a suplicar.

—Deja que al menos seamos amigos.

Min la aventó.

—No y deja de ser tan débil

—Te suplico que no me apartes de ti.

—No supliques, carajo no te cansas de ser débil, ya no eres una niña y no puedes llorar.

—No importa si tengo que ser débil ante ti.

—Ve con tu novio, el te quiere y le interesa verte débil, a mi no me vas a conmover con tus lágrimas.

Min la dejo ahí, no podía seguir siendo cruel o terminaría por seder a sus lágrimas.

Scarlet se quedó ahí destrozada, después de todo lo que había dicho él, termino por entender la dolorosa verdad de porque se comportaba así, todo había sido por si relación con Kook, el había sido el problema, es por eso que tenía celos.

—Min porque carajo no lo dijiste, si me amabas porque no solo hablaste, nuestra historia pudo haber sido muy distinta.

Min estaba al otro lado de la puerta, escucho cada palabra, pero ahora era mejor alejarla y continuar su venganza sin que ella tenga que contaminarse con eso, Ambos estaban llorando por su lado.

Peligrosa Tentación Donde viven las historias. Descúbrelo ahora