°°Demonio Pelirrojo°°
—Katherine
Luego de almorzar con mí hermano,pasamos toda la tarde organizando unos contratos que tenía el,y como yo ya estaba metida en el tema no era un estorbo ahi,más tarde el hizo que vuelva casa con el chofer,ya que al parecer ahora si tenía una reunión,aún que no quería volver a casa,no me quedo,no quería ver a mí madre,no quería saber nada.
Al llegar a la mansion,subí directamente a mí habitación no quería que nadie me moleste,así que rebusque en la cajonera de la mesa de luz,el control remoto de la televisión y la encendí,no quería quedarme en silencio,escuchando las voces de mí cabeza reprocharme una y otra vez.
Me dirigí al clóset y saque un camisón blanco de satén,era algo que obviamente mí madre no aprobaría de usar pero nunca le hice caso,ya trataba de controlar mí vida,no iba a dejar que controle mí forma de vestir,me desnude completamente y me lo coloque.
Me recosté en la cama mirando la televisión,aún que no estaba demás de ser que no le estaba prestando un gramo de atención, no quería bajar a cenar,tan solo imaginar los temas de conversación ya me daban jaqueca,terminar la escuela, iniciar la universidad,ser tan pulcra que no estaría demás exagerar que me coloquen una cofia,y además cenar sola con mí madre y sus estúpidos temas de conversación.
Ser pura,esa tenía que ser mí ambición,ser deseada pero nunca tocada,no sé si ella no se daba cuenta de que sus palabras se quedarían clavadas por el resto de mí vida.
~Una paloma blanca,tan pura esperando a ser corrompida~
El sentimiento de una moneda de cambio no se me iba de la cabeza,no eran palabras mías,eran palabras de mí jodido padre,no sé quién de los tres está más jodido,si yo por una vez quererlos,o ellos por ser unos nefastos padres,unos protagonistas que no estaban pendientes de la historia que estaban creando,el maltrato,las ausencias,los regalos disfrazados con disculpas,el que me encontrarán en mí situación escandalosa,hizo que de repente todo cambiará,las personas que más me importaban cayeron del pedestal en donde yo los adoraba a pesar de todo,pero ya no era así.
Solo quería libertad,cuánto daría por haber nacido en una familia común,que mí padre me llevará ala escuela,que mí madre me preparara el desayuno,pero algunas veces los sueños de uno,son las pesadillas de otros,y está vida es una pesadilla para mí.
Tomé mí teléfono y me di cuenta que ya eran las 8pm,me senté en la cama esperando a ver qué podía hacer,presione el botón que estaba en mí mesa de noche para que unas de las criadas venga,no tardó mucho cuando dos toques en la puerta resonaron por la habitación,me pare de golpe a abrir la puerta,viendo a Cian,una joven de casi 20,es nieta de Alina,en pocas palabras nos criamos juntas,pero obviamente de diferentes maneras,ella convivía conmigo solo para no hacerme sentir sola y yo con ella para no sentirme como tal,aún que una vez mi madre me atrapo jugando con ella en el patio,ni siquiera la miro,solo me abofeteó por qué mí deber no era jugar con la servidumbre,solo tenía 8,no la volví a hablar,era estrictamente como debía de ser, me obligaron a tratarlas como lo que son,la servidumbre.
Aún que siempre prefería no cruzarme con ellas,para no tratarlas como mis padres querían que lo haga.
De pronto escucho como alguien se aclara la garganta,sacándome de mis recuerdos,veo a Cian de pie,esperando a que le ordene.
—Cian,puedes decirle a los escoltas que preparen un auto,voy a salir.
—Enseguida señorita—susurro bajando la cabeza,seguía igual que antes,su cabello castaño ,sus ojos de igual color y su estatura baja,la observaba mientras se iba corriendo escalera abajo.
Me encerré en mí habitación,dirigiendo me al baño,para tomar una ducha rápida,está vez ire a ver a Katia,quiero saber si sigue viviendo en la dirección de hace dos años, necesito hablar con alguien de mí edad,o voy a terminar por sacarme los ojos,no tenía su número,nunca me había tomado el tiempo para memorizarlo,ahora estaba un poco arrepentida por eso, pero no es algo que pueda cambiar.
Salí del baño apresurada para cambiarme,tomé un enterizo blanco del clóset ,que nunca había utilizado que por sorpresa mia me apretaba el culo,pero no quería tardarme más tiempo en cambiarme,así que me lo coloque,me até unas converse blancas,si mí madre me viera vestida así,se infarta,pero no importa eso ahora,me senté en el tocador para secarme mí cabello y a echarme algo de gloss,agarre un bolso de mano blanco y salí de mí habitación.
Baje la escaleras casi corriendo a dirección de la salida,esperando no cruzarme con mí madre,pero supongo que en esta vida no se tiene tanta suerte,por qué estaba en la sala con una señora que no conocía,pero la melena pelirroja me hizo entrecerrar los ojos,de algún lado me era familiar,aún que no recordaba precisamente de dónde.
Su voz hizo que me frene en seco,carajo con razón se me hacía conocida,el recuerdo del momento en la que la conocí me hizo volver al pasado.
~Recuerdo que estaba en mí habitación,ese día no había ido a clases por qué no me sentía muy bien del estómago,mí madre no estaba y Damien ya no vivía con nosotros,cuando de pronto empecé a escuchar gritos provenientes del piso de abajo,se me hizo bastante raro,ya que a no ser de los criados,nadie más estaba en casa,aún que no caí en cuenta de que mí padre si que lo estaba ,baje despacio por las escaleras escuchando como los gritos se intensificaron,no eran alaridos de dolor,si no mas bien de placer,como en el vídeo que por curiosidad vi la otra noche,los gritos me guiaban al despacho de mí padre,me acerque caminando a punta pie,abriendo la puerta con sumo cuidado,asome la cabeza,esperándome cualquier cosa,pero lo que vi me dejó helada,a mí padre embistiendo brutalmente a una pelirroja mientras la agarraba del cabello,está levanto la cabeza encontrándose con mis ojos, mientras me miraba con los ojos abiertos y la boca abierta soltando incoherencias,aprete los ojos y cerré la puerta subiendo las escaleras hasta encerrarme en mí habitación,nunca había hablado del tema con nadie.~
Mí padre nunca me reclamó nada, tampoco creo que me haya vista, incluso si lo hubiera echo,no tenía derecho a reclamarme nada, supongo que estaba muy absorto en seguir embistiendo a la mujer que ahora tengo en frente de mí,seguía con ese cabello naranja tan llamativo que dudaba que fuese natural,la nariz respingada,labios carnosos por el botox,seguía tan asquerosamente llamativa.
La voz de mí madre me saco de mis pensamientos, volteé a mirarla mientras rogaba que la mujer que tenía al lado no me hablase.
—Kat, déjame presentarte a la señora Ágatha Thorsen,ella es esposa de un viejo amigo de tu padre y mí amiga más querida.
Al parecer la susodicha parecía causarle gracia las palabras de mí madre,por la evidente sonrisa que trataba de contener.
Y por qué creo que ella sabe que en esa presentación faltó la palabra "amante",no estaba segura de que si eso pasaba por su cabeza,pero creo que lo estaba pensando.—Un placer conocerte Katherine,tu madre te describe siempre como una niña en la reuniones,pero sus palabras se quedan cortas,eres toda una mujer—Sus primeras palabras tenían un deje de ironía,sabía que ya la habia conocido,pero no en los términos correctos.
Sin embargo las palabras de lo que supuestamente dijo mí madre,me dejaban pensando,por qué tenía que hablar de mí con sus amigas,solo soy una adolescente,pero aún así no me quedé sin responder.
—El gusto es mío señora Thorsen—espete recalcando la la primera palabra y la última,por qué de señora no tenía nada y no por qué se haya follado a mí padre,o porque se este haciendo la buen amiga de mí madre.
Si no por qué las miradas dicen mil palabras,y su mirada no tenía un buen presagio para mí destino.
Aparte mis pensamientos y cruce la sala,sin despedirme soltando un portazo.
NOTA DE AUTORA.
Ame este capítulo no me pregunten por qué,pero así lo hizo,mil disculpas si encuentran errores,luego los corregiré.
No sé olviden dejar comentarios de como les parece la historia,y tampoco olviden de dejar sus votos.
Hasta el martes.
iloveyou;)
ESTÁS LEYENDO
Luz Extinguida.[+21]
RandomKatherine es una joven de 15 que pertenece a la mafia rusa,pero no estaba enterada de eso por ser la pequeña de la familia y el hecho de que pensaba que su familia era normal cuando es todo lo contrario. De repente alguien enigmático entra a su vida...